Correo
Atisbo de esperanza
Para las víctimas de esta violencia desatada, las palabras del nuevo jefe de gabinete son esperanzadoras.
El ministro, como ex parlamentario del sur del Bío Bío, sabe perfectamente cuál es el daño que están haciendo los terroristas dispuestos a todo, con un grave saldo que todos sabemos, costos de vidas humanas, heridos, quema de propiedades públicas y privadas, además de la destrucción de camiones y maquinarias agrícolas y forestales.
Sin embargo, y siendo conscientes de la que la paz no depende de una autoridad o el Gobierno de turno, para lograrlo es imperante la disposición de todos los sectores. La violencia es violencia por donde se mire. No es cuestión de raza ni género. Chile necesita unidad y los parlamentarios debieran ser los primeros en dar el ejemplo.
Ricardo Oyarzún González
Fármacos
Los últimos meses han sido complejos para todo el país. No sólo hemos tenido que enfrentar la peor pandemia de los últimos 100 años, sino que también muchas familias han visto mermados sus ingresos o sus fuentes laborales -se estima la pérdida de dos millones de puestos de trabajo en los últimos 12 meses-, haciendo de esta crisis la peor que haya enfrentado el país en casi cuatro décadas.
Por eso, es importante conocer algunas de las medidas que se han tomado para afrontar este problema, sobre todo, para la llamada clase media que cotiza en Isapres. En abril pasado, la Superintendencia de Salud instruyó a éstas a abrir un proceso extraordinario para la devolución de excedentes a todos sus afiliados, que entregará lo generado entre enero y junio de 2020. Esto permitirá que más de un millón de personas podrán ocupar, de forma directa y como estimen conveniente, los ahorros formados cuando el pago obligatorio del 7% excede al valor del plan convenido con la institución de salud.
Esto dará la posibilidad a los cotizantes de ocuparlos en el copago de bonos, en la cobertura de sus planes e, incluso, en medicamentos y productos (de higiene o belleza) en todas las cadenas farmacéuticas, hecho que se presenta como un alivio -sobre todo- para enfermos crónicos o que consumen varios fármacos a la vez. No olvidemos que de acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde), Chile es el tercer país con el mayor "gasto de bolsillo" en salud, representando un 5,2% total de los hogares. Dentro de este gasto, el 38% se va al ítem de medicamentos, siendo el más alto en este desglose.
Además, y hoy más que nunca, es fundamental reforzar la aplicación de la Denominación Común Internacional (DCI), que entrega el nombre genérico de los fármacos en las recetas médicas. Esto permitiría a los pacientes ampliar el acceso a medicamentos genéricos, bioequivalentes o de innovación, en orden a sus necesidades y presupuestos. En nuestro país no existe normativa que regule este ítem, por lo que dependerá de cada profesional médico su aplicación.
Sabemos que esta pandemia es una situación de crisis sanitaria y económica que requiere de mecanismos de apoyo directo a las personas. En un país donde la salud es costosa, todos los actores del sistema debemos seguir trabajando incansablemente para mejorar el acceso y las condiciones.
Paula Molina, Químico farmacéutico
Pandemia y sopas
Las sopas son preparaciones culinarias líquidas con un contenido de sabor de acuerdo con las preferencias y disponibilidad de ingredientes de los pueblos y comunidades, teniendo una historia que se remonta a épocas de antaño. Con la llegada del invierno y en plena época de pandemia por el covid-19, que ha limitado actividades laborales y físicas, se hace necesario un consumo de alimentos bajo en calorías, pero con un aporte de nutrientes que satisfaga la necesidad nutricional en un tiempo de comida, para permitir que el organismo se mantenga activo y con una inmunidad adecuada.
¿Cuáles son los beneficios? Con la llegada de las bajas temperaturas y lluvias, la necesidad de temperar el cuerpo con alguna comida caliente resulta atrayente, y las sopas cumplen con este requisito debido a la variabilidad de sus recetas y preparaciones, que dan pie a un abanico de alternativas apetecibles para dar placer a la diversidad de gustos y satisfacer necesidades nutricionales.
A esto, actualmente se suma la situación de confinamiento y pandemia por covid-19 que afecta al país, lo cual hace que se preste mayor atención a la alimentación para mantener el peso y una buena salud.
Las sopas permiten: poder de saciedad, suficiencia nutricional, fácil digestibilidad, efecto de hidratación, se adaptan a diversos estados fisiológicos, son económicas y variables, y su proceso de elaboración es garantía de higiene y seguridad.
Magaly Navarrete Castillo, académica Escuela Nutrición y Dietética U. Andrés Bello