Comunidad denuncia malas condiciones y deficiencias del hospital de Puerto Octay
URGENCIA. La mitad del recinto está demolido tras la fallida remodelación y sin las unidades de Rayos X, Lavandería, Esterilización, entre otros problemas que obligan a viajar a los usuarios a otras comunas para recibir atenciones. El Servicio de Salud se encuentra buscando la fórmula para retomar las obras.
"Más unidos que nunca, queremos de vuelta nuestro hospital" es la frase que representa a la comunidad octayina que se encuentra movilizada debido a las malas condiciones y deficiencias existentes en el Hospital de Puerto Octay, el cual no cuenta con unidades de Rayo, Lavandería, Esterilización, entre otras instalaciones las que fueron demolidas en el 2017 como parte de un fallido proyecto de remodelación que hasta la fecha está pendiente de ejecución. Esta situación ha llevado a que el recinto asistencial no pueda entregar las mínimas condiciones de atención a los más de 8 mil habitantes de la comuna lacustre.
Dirigentes vecinales, sociales, asociaciones de funcionarios, entre otras organizaciones civiles conformaron hace unos días la mesa de trabajo transversal "Edificio hospital en crisis, salud digna para todos Puerto Octay en el olvido". El objetivo es denunciar públicamente las deficiencias existentes en el inmueble desde hace más de 40 años que alberga al único recinto de salud de la comuna y, de paso, exigir soluciones a las autoridades para que las personas puedan recuperar el acceso a una salud digna en su propio territorio.
Inversión
El proyecto de remodelación del Hospital de Puerto Octay tenían como presupuesto de inversión $5.400 millones provenientes del Ministerio de Salud (Minsal) y el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), todo ello asociado a un historial de cinco licitaciones fallidas desde 2014, hasta que se logró la adjudicación recién a fines del 2017. Sin embargo, el avance fue menor ya que en marzo del 2019 por problemas que radicaban en los errores de diseño del recinto producto de cálculos realizados con mucha antelación, hicieron el proyecto inviable para su construcción. Además no cumplía con los estándares del Minsal para este tipo de estructuras, lo que dejó la iniciativa sujeta a una nueva reevaluación antes de retomar sus obras, lo que aún está pendiente.
Impotencia y enojo
Margarita Carrillo, presidenta de la Unión Comunal de juntas de vecinos de Puerto Octay (urbanas y rurales), explicó que la situación hace años que viene siendo crítica, pero que desde que se demolió la mitad del recinto la promesa de mejora se transformó en una pesadilla.
"Esta es una comuna de mucha ruralidad y las personas vienen a buscar respuestas en atención de salud que no encuentran. Andan paseándose de un lugar a otro, tienen que ir a otras comunas con el riesgo que actualmente significa. Además hay que gastar recursos que no tenemos y a veces ni siquiera somos atendidos", detalló la dirigente.
Explicó que las radiografías más simples ya no se pueden tomar en la comuna porque no está operativa la Unidad de Rayos. Además, una parte de la atención se trasladó hacia el Liceo Benjamín Muñoz Gamero, ubicado a unas cuadras del hospital, por lo que los usuarios caminan bajo la lluvia y el frío pues son derivados de ida y vuelta.
A eso se suma que el lavado de toda la ropa cama, uniformes, entre otros se realizan en el hospital de Purranque, hasta donde se trasladan las cargas diariamente. Lo mismo ocurre con la esterilización de material e instrumental médico, que se ejecuta en los hospitales de otras comunas. Y es que dichas unidades estaban emplazadas en la zona que fue demolida.