Comerciantes de Soriano y Buschmann resintieron sus ventas debido a los controles
MENORES INGRESOS. Los locales afectados se ubican cerca de donde funcionaron hasta ayer los puntos de la barrera sanitaria, medida que dificultó la llegada de clientes.
Una notable baja en las ventas acusan diferentes comerciantes de avenida René Soriano, cuyos locales se encuentran cercanos a los controles del cordón sanitario que funcionaron hasta ayer en la ciudad.
Si bien comprendieron la situación por el bienestar de la comunidad osornina, debido a la pandemia por covid-19 que afecta al país y al mundo, resintieron durante semanas la baja afluencia de público, ya que tradicionalmente eran concurridos puntos y paradas obligadas para quienes salen hacia otras comunas.
El sector es conocido por concentrar a varios almacenes, panaderías, botillerías, carnicerías, talleres automotrices, negocios de comida rápida, entre otros, donde todos han visto una merma en sus ventas.
Otro punto que se ha visto también afectado es la avenida Julio Buschmann, donde también existió un punto de control y los negocios no vendieron como antes. En la zona muchas personas esperaban los buses que salen de Osorno y compraban algo para comer durante su viaje.
Locales de Soriano
Una de estas comerciantes afectadas es la dueña de la panadería Pool, Rossana Pool quien vio que sus ventas bajaron en al menos un 50% de lo habitual, debido a la menor afluencia de autos por la avenida Soriano, que es la arteria que conduce hacia la salida sur de Osorno, donde mucha gente que sale a trabajar pasa a comprar alimentos para el viaje.
"El cordón de Soriano nos afectó mucho en las ventas, con una caída de 50% en relación a lo que se vendía antes; de hecho, otros vecinos han tenido que cerrar porque en realidad no les da para mantenerse", manifestó.
Además de la baja circulación que afectó en las ventas, también agrega que el precio de los alimentos ha subido considerablemente en las últimas semanas, pero asegura que los locales de barrio compiten con los valores de los supermercados.
Al lado de esta panadería estaba un local de frutas que debido a sus escasas ventas y los costos de mantención se vio obligado a cerrar. Llevaba poco tiempo y por su buena ubicación tenía buenas ventas.
"Tuve que cerrar la frutería porque el cordón sanitario afectaba bastante la afluencia de público. El taco que se formaba impedía que la gente se estacionara y pasara a comprar", expresó Jorge González, dueño de la frutería, quien además tiene ahora a su cargo el local de la panadería Pool.
Relató que durante los primeros días de la cuarentena debió cerrar el local y aunque está intentando reabrir, aún se ve muy complicado el panorama, a lo que se suma además las bajas ventas nocturnas, que era el punto fuerte de la panadería antiguamente, pero ahora el toque de queda impide que así se de.
"En este sector estamos todos afectados, está el señor de la carnicería del frente, otras panaderías de por aquí y las otras fruterías, todos vendemos poco, sin contar los locales de comida de aquí cerca, se ven todos cerrados", concluyó.
Lentitud en Chuyaca
Otro sector afectado por los mismos problemas es la avenida Julio Buschmann y desde uno de sus locales más concurridos, como lo es el tradicional "Yogui Market", señalaron que en un principio cuando el control estaba ubicado en el puente Chuyaca, el taco que se formaba afectó la llegada de clientes en vehículos, ya que este conocido supermercado cuenta con un amplio estacionamiento, por lo que usualmente llegaban muchos clientes en sus vehículos.
Luego, cuando el control de este acceso central a Osorno fue desplazado por razones estratégicas desde el puente Chuyaca hasta el sector Cañal Bajo, ello les acarreó una complicación diferente, ya que muchos de sus clientes viven en sectores rurales en la Ruta 215, por lo que no pudieron llegar hasta el local.
Yasna Salinas vive en un departamento en calle Julio Buschmann y asegura que la pequeña vida comercial se genera solo entre vecinos y pocos clientes de otros sectores que llegan a comprar productos o servicios.
"Antes por acá se veía a mucha gente, personas llenando sus vehículos en las bombas de bencina o comprando antes de tomar el bus, etcétera. Igual se ve muy poca gente en los locales y también varios están cerrados", manifestó la vecina.
La situación en ambos puntos de la ciudad bien podría mejorar desde hoy, con la decisión de las autoridades de salud de levantar el cordón sanitario de la ciudad y retomar, en parte, el flujo normal de vehículos y personas
30 de marzo comenzó la cuarentena y en esa fecha se habilitó el cordón sanitario, que fue levantado ayer.
22 horas comienza el toque de queda, cuando muchos locales de ambos sectores aumentan sus ventas.