Cada día son más las personas diagnosticadas con alguna intolerancia o alergia alimentaria. Las razones del origen son variadas, así también su expresión. Personas con irregularidad en el tránsito intestinal, o con frecuentes procesos inflamatorios digestivos, diversas manifestaciones en piel como ronchas o manchas, diversas expresiones respiratorias, incluso jaquecas, pueden ser signos de que presenta una intolerancia o alergia alimentaria.

Una diferencia importante entre intolerancia y alergia, es que la primera es cuando el organismo tiene dificultades para digerir un alimento, lo que por consecuencia inflama el sistema digestivo. En las alergias, en tanto, se involucra el sistema inmunológico, donde éste considera al alimento ingerido como un "invasor", provocando una respuesta sobredimensionada del sistema inmune, donde se liberan diversas sustancias para el "control" de ese alimento, existiendo incluso casos con reacción anafiláctica que pueden llevar a la muerte.

Hoy se ve un gran número de bebés con diagnósticos de alergia a la proteína de leche de vaca, gluten, legumbres y/o huevos, entre otros, lo que genera que la madre del lactante deba ajustar su alimentación para favorecer la salud del infante, y además que la alimentación complementaria deba ser muy bien dirigida para no empeorar la manifestación del diagnóstico.

Si bien es cierto es un diagnostico cada vez más habitual, aún es poco entendido por la población general y lamentablemente eso puede generar situaciones clínicas complejas en las personas que desarrollan estas patologías. He escuchado en innumerables veces pacientes que me dicen sobre sus hijos "fue a un cumpleaños y le dieron algo de comer", o personas que sin antes consultar a los padres o cuidadores ofrecen algún tipo de alimento o golosina a un menor, ellos lo comen y se empeora la situación.

Es muy importante empatizar con las familias que tienen estos diagnósticos. La invitación es a tener más espacios con alternativas alimenticias, tanto en nuestros círculos personales como sociales, y a siempre consultar, sobre todo habiendo niños, qué pueden comer para colaborar con que éstos mejoren su condición.

Stephanie Riedel, nutricionista reservasriedel@gmail.com, @stephariedelrosas

30 años | 2 de mayo de 1990

Masivo brote de gripe en niños en el hospital

Más de 800 menores fueron atendidos en los últimos cuatro días en la Unidad de Apoyo de Emergencia del Hospital Base, a raíz de un brote de las infecciones respiratorias agudas como faringitis, amigdalitis, resfríos y otras patologías. Los menores se derivaron al hospital debido a que los consultorios no atienden los fines de semana.

20 años | 2 de mayo de 2000

Inician asignación de viviendas en Rahue

De acuerdo con un calendario que comenzó a cumplirse el lunes pasado y que se prolongará hasta el 10 de mayo, el Serviu inició el proceso de asignación de 230 viviendas básicas construidas en el sector de Villa Sofía en Rahue Alto. Los inmuebles miden 42 metros cuadrados con un costo equivalente a $4 millones, más $2 millones de subsidio.

10 años | 2 de mayo de 2010

Destruyeron ventanales del Museo Interactivo

Daños en ventanales de dos recintos municipales, destrozos de parquímetros y murallas rayadas, fue el saldo de las primeras horas de mayo en la ciudad. Los hechos habrían sido protagonizados en su mayoría por menores de edad y entre las acciones más repudiables se cuenta el ataque del Museo Interactivo ubicado en la Estación Vieja.

Apurados por las inéditas circunstancias que ha aparejado la pandemia del coronavirus, los planteles de educación superior de la Región, al igual que sus símiles del resto del país, han tenido que ajustar sus procesos y adentrarse en terrenos que aunque ya conocían tibiamente, como el trabajo en aulas virtuales y educación a distancia, se han convertido ahora en materia obligada si es que desean mantener sus actividades académicas en beneficio de sus estudiantes. Las casas de estudio han tenido que modificar sus procesos de enseñanza y de evaluación para permitir que los forzados conceptos de aislamiento y distanciamiento social no terminen afectando en demasía la docencia universitaria de las distintas carreras.

Afortunadamente, para buena parte de ellas no ha resultado un terreno tan inexplorado, pues el sistema de aulas virtuales ya venía desde hace años instalándose con fuerza en algunas universidades, en particular para aquellas que han buscado incrementar su presencia a través de programas a distancia. El problema, no obstante, pasa porque el apresuramiento al que se han visto obligados los planteles para sobrellevar la pandemia no ha dado el suficiente tiempo para hallar soluciones dignas y factibles para aquellos estudiantes que por la especial configuración social y territorial del sur del país, pueden no contar con suficientes dispositivos computacionales y redes de Internet que soporten la demanda de los contenidos de la educación superior.

Las universidades, tanto las localizadas en la Región como a lo largo del país, deben estar conscientes de esta brecha digital para evitar el incremento de las desigualdades de base con las que llegan los estudiantes a la enseñanza superior.

Es menester que exista flexibilidad en los contenidos y evaluaciones de este año, además de tener un catastro minucioso acerca de quiénes no cuentan con lo necesario para participar de forma activa y eficaz en la educación a distancia. Y este catastro, naturalmente, gestionarlo para idear soluciones.