Redacción
El Ministerio de Desarrollo Social y Familia, a través de la Subsecretaría de la Niñez, presentó ayer la encuesta "Radiografía nacional de jóvenes frente a la crisis sanitaria covid-19", realizada entre adolescentes y jóvenes de 70 comunas del país, de entre 14 y 24 años, para saber sus sentimientos y comportamiento frente a la pandemia.
Entre los resultados, destaca que a nivel económico, al 83% de los jóvenes le preocupa enormemente la pérdida del empleo de sus padres o familiares, mostrándose más nerviosas las mujeres (87%) que los hombres (76%). Llama la atención también que el 98% de los encuestados percibe que la crisis de covid-19 es algo grave. Sin embargo, el 41% cree que los adultos exageran sobre la magnitud de la enfermedad.
Otras preocupaciones en el plano económico son "empobrecimiento de mi familia" (74%) y no conseguir trabajo o perderlo (65%).
Si bien los jóvenes se muestran preocupados frente a la pandemia, al ser consultados sobre los sentimientos que les genera el virus las mujeres tienden a mencionar con mayor frecuencia angustia y miedo, mientras que los hombres hablan de "lata" y enojo.
De acuerdo a los datos, casi un tercio (29%) respondió que los jóvenes no se contagian, en una aparente confusión entre el riesgo de contagio y enfermar gravemente, aumentando de esta manera las posibilidades de conductas arriesgadas que pueden propagar la infección a poblaciones más vulnerables.
Al respecto, la subsecretaria de la Niñez, Carol Bown, comentó que "nos preocupan estos datos, porque si bien es cierto que el riesgo de enfermar gravemente o morir es menor en los jóvenes, eso no implica que no vayan a contagiar a otros que pueden estar en mayor riesgo. Queremos hacer un llamado a la solidaridad, a pensar en los demás y a cuidarse, para cuidar a otros.".
El ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel, sostuvo además que "es una preocupación del ministerio saber cómo los jóvenes están viviendo al interior de su hogar esta crisis". En ese sentido, agregó, esta encuesta "permite ver dónde tenemos que acelerar la estrategia más allá de la protección sanitaria y obviamente la ayuda social a muchas familias chilenas".
Clases Y postpandemia
Para muchos de los encuestados, estar perdiendo clases no es una situación dramática. Al 31% le preocupa nada o muy poco. La mayor preocupación se centra aquí entre los 14 y 17 años con 60%, disminuyendo a 40% entre 18 y 21, y a 30% entre los 22 y 24 años. Esto coincide con que el 44% siente que le sirven de nada o casi nada las clases online o las actividades académicas para manejar el estrés.
Entre los miedos que generan las consecuencias de la pandemia, apenas el 16% dijo que "perder el año en mis estudios", mientras que el gran temor es "que pueda morir alguien de mi familia o amigos" (34%). Luego viene, con 21%, que la familia tenga graves problemas económicos (21%), que las cosas nunca vuelvan a ser como antes (14%) y, al final, "que pueda morir yo" (15%).
Sobre los efectos negativos, el 34% cree que está comiendo más de lo normal y al 27% le cuesta conciliar el sueño. El 22% dice que se siente irritable con pareja o familia y el 6% reconoció que está consumiendo en exceso bebidas alcohólicas.
Lo que destaca positivamente en la encuesta es la forma en cómo los adolescentes manejan la angustia y el estrés, pues el 83% valora el tiempo con la familia. Otra cifra nos muestra que el 47% de los jóvenes considera importante ir a ver a sus abuelos cuando se supere la crisis, mientras que el 31% dice que es importante reencontrarse con su pareja.
Les preocupa la salud mental
Con igual porcentaje de preocupación (56%), los jóvenes y adolescentes chilenos indican que les preocupan las consecuencias de las restricciones sociales en medio de la pandemia tanto a nivel personal como entre sus amigos. Por otro lado, el 61% dice que le preocupa nada o casi nada el aumento de la violencia al interior de sus hogares en relación a circunstancias normales.