Tragos de verano: los sabores tropicales son los más pedidos
BARES. En la época estival los locales apuestan por la venta de cócteles frescos, exóticos y balanceados en sabor.
Frutales, azucarados y refrescantes son las tendencias en tragos veraniegos que cada año se posicionan en los bares osorninos, pues una tarde de verano puede convertirse en un panorama ideal para reunirse con los amigos o familia.
En algunas barras los clientes son más tradicionales y para capear el calor piden cervezas y sus variaciones en sabores, mientras que en otras se animan a degustar cócteles que combinan sabores frutas y diferentes bebidas alcohólicas que resultan ser frescas, pues en la mayoría de los negocios patentados para vender alcohol trabajan con productos de estación que convierten a los tragos en una deliciosa opción para el paladar.
La coctelería del momento está llegando a la ciudad y la gente se está atreviendo a probar sabores nuevos ya sea para acompañar tablas, disfrutar de almuerzos o pasar una tarde jugando play station en los nuevos 'game bar'.
En el centro de la ciudad, exactamente en la calle Arturo Prat #745, se encuentra "La Barra Cartes", restobar que se especializa en cerveza y shop artesanal; ideal para compartir en grupos, pues el recinto cuenta con una agradable terraza y mesas al aire libre.
En este local familiar, desde su apertura hace tres años, preparan uno de los tragos más solicitados por los clientes habituales. Se trata del "CaipiCartes", el cual consiste en una base normal de una caipiriña: limón de pica macerado con azúcar flor y jugo de limón para dar un gusto ácido más fuerte, hielo frappe para que sea lo suficientemente refrescante, sin embargo, una vez lista la mezcla tradicional, se vierte el producto estrella... la cerveza "Cartes Golden", una de las opciones más rubias entre la variedad de cervezas artesanales, también se conoce como 'lager'.
De esta mixtura resulta un trago fresco y agradable que tiene un precio de $4.000.
"Es un trago de la casa y la gente lo pide muchísimo en estas fechas, porque es súper refrescante. La mezcla entre la acidez del limón y la temperatura fría de la cerveza y el hielo frappe es lo que les gusta, sobre todo en horario de la tarde que hace más calor", indicó Natalia Cartes, una de las dueñas del negocio.
En la Barra Cartes también preparan distintos tragos frutales, como el "mojito frambuesa" o "murta sour", los cuales son variaciones de tragos mucho más comunes, donde generalmente el limón es el protagonista.
"El mojito frambuesa tiene la misma base del mojito normal, pero después se le agrega pulpa de frambuesa o la fruta natural; en caso de ser la segunda opción, se macera y posteriormente se agrega el hielo frappe, ron blanco y soda o agua mineral con gas, cualquiera de las dos opciones", indicó uno de los barman del restobar.
"Si tenemos alguna fruta especial podemos preparar otras opciones y complacemos al cliente. El mojito en happy hours lo tenemos 2x$5.000", agregó.
El novedoso trago murta sour se prepara como un sour tradicional: pisco, azúcar, triple sec o un toque de amargo, después se le agrega la fruta, que en este caso es murta entera en conserva. Se licúa y dependiendo del gusto del cliente, se puede colar o se sirve con los restos de fruta. Este cóctel tiene un precio de $3.500.
A 600 metros de la Barra Cartes, en la calle Manuel Rodríguez #955, hace un año y tres meses se encuentra Bigotellos Bar, local que ha tenido un crecimiento considerable dentro del rubro, pues el concepto de un espacio con consolas de distintos tipos y generaciones, con guiños al mundo de los videojuegos cautivó a los osorninos.
Se convirtió en un lugar al que se puede ir con amigos a jugar, comer y consumir sus novedosos tragos que hacen referencia a personajes como Donkey Kong y Uka Uka. Este último, es uno de los cócteles más solicitados, debido a su particular presentación y, por supuesto, su distinguido sabor.
Diego Pairicán, bartender profesional y administrador del 'game bar', es quien prepara estas exóticas bebidas y explicó la preparación de la bebida más solicitada: "Uka Uka".
Es un trago tipo polinésico que lleva una onza de limón fresco, una onza de syrup simple (mezcla de azúcar granulada con agua), pulpa de mango y maracuyá en proporciones iguales para que quede un sabor balanceado, hielo frappe y una mezcla de ron blanco y ron dorado
"Que se agregue dos tipos de ron provoca una mezcla de potencia alcohólica y al mismo tiempo un sabor maderoso. También se le puede agregar un poco de alguna bebida blanca, en este caso 7up y por último se incorporan los sabores", detalló Pairicán.
El bartender también se preocupa de la presentación, pues "un trago tropical siempre se decora como tal: hojitas de piña, naranja y frutillas deshidratadas, flores no comestiibles, palitos de canela (...) y así se logra un cóctel tiki que hace alusión al Crash Bandicoot, un juego de Play Station 1 que fue furor en su tiempo", detalló.
"Es un cóctel refrescante, rico en sabor, es nivelado, no es fuerte, no es cargante y la gente busca ese balance perfecto entre lo ácido, lo dulce y lo fuerte para poder disfrutar del calor de esta época", agregó Pairicán.
Este trago lo piden entre ocho y diez veces al día y también se puede preparar sin alcohol, pues su particular decoración y sabor también llama la atención de los más pequeños. Esta bebida tiene un precio de $4.500.
Unas cuadras más arriba, en Manuel Rodríguez #1527, se encuentra "El Círculo Restaurante", lugar con un estilo más tradicional que ofrece menú y brebajes criollos, pues los fines de semana su principal atracción es la propuesta del asado al palo que preparan en la terraza del local y la clásica borgoña en jarra; fresca y buena para compartir y conversar.
Sin embargo, este trago que se ha convertido en el favorito de quienes asisten frecuentemente al lugar, tiene una variación especial que gusta a los clientes: contiene todo tipo de frutos rojos, no sólo frutillas.
"Este trago es una variación de la borgoña tradicional, tiene frutilla, pero también le agregamos otros frutos rojos y, por supuesto, el secreto de la casa", indicó uno de los trabajadores del restaurante.
Las frutillas, frambuesas, moras y arándanos (todo de la zona) se maceran por horas con el azúcar. A la mezcla se le agrega un toque de canela y esencia de naranja para dar un sabor distinto al que la gente está acostumbrada.
El vaso de esta bebida contiene aproximadamente medio litro y tiene un precio de $3.500, mientras que la jarra de un litro para compartir en grupos de dos o tres personas cuesta $6.000.
Son muchos los cócteles que se suman a la lista para convertirse en clásicos, pues las mezclas refrescantes, en algunos casos sencillas y con pocos ingredientes, es precisamente lo se busca para disfrutar las temperaturas veraniegas.
Sabores frutales son los favoritos para la temporada de verano, pues los locales utilizan frutas de la estación.
Recetas exóticas cautivan a los más atrevidos. Los bartender utilizan esencias para sofisticar los cócteles.
Tragos reversionados son los favoritos para el público más tradicional.