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Histórica puesta en marcha de Chuqui subterránea

COBRE. Busca dar otros 40 años de vida al yacimiento de Codelco.
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La mina de cobre Chuquicamata fue inaugurada ayer en su versión subterránea, como resultado de la reconversión de tajo abierto a explotación bajo la superficie para dar otros 40 años de vida al yacimiento de Codelco.

El Presidente Sebastián Piñera y el presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, cortaron la cinta que pone en marcha oficialmente la nueva era de Chuquicamata.

Centenaria explotación

Mientras el colosal cráter a cielo abierto ve cercano su final -programado para diciembre de 2020- tras 104 años de extracción de cobre, la parte subterránea tiene previsto un incremento de las actividades en los próximos siete años para alcanzar una producción diaria de 140.000 toneladas de material para 2026.

Una cifra que supondrá, explicó Pizarro, una producción anual de 320.000 toneladas de cobre fino y más de 16.000 toneladas de molibdeno fino.

Esta gran obra de minería, con una inversión de 5 mil millones de dólares, la más grande de la historia de Codelco, buscará explotar una reserva de 1.028 millones de toneladas del yacimiento en 4 décadas.

Un cobre con una ley del 0,82%, lo que supone que de cada cien kilos de material extraído habrá 820 gramos de cobre, unas cifras superiores a las que estaba registrando hasta ahora la mina a tajo abierto.

"A lo largo de una década, realizamos cerca de 150.000 metros de sondajes para contar con la información más precisa posible para saber si existía un proyecto rentable en Chuquicamata. Y los estudios nos dieron la razón: el potencial estaba. La dimensión del yacimiento seguía siendo gigantesca", dijo Pizarro.

Para conseguir los objetivos de la empresa estatal, el trabajo ha sido enorme. Consideró, por ejemplo, ocho años de ejecución, con 13 mil personas contratadas durante el peak de la construcción de la mina subterránea.

Bajo el tajo de más de un kilómetro de profundidad, Chuquicamata subterránea explotará otros 898 metros bajo tierra en tres niveles que se irán generando a medida que el superior sea agotado completamente a través de la destrucción de la roca por medio de erosión hídrica.

Piñera aprovechó de poner tarea a la cuprífera: "Vamos a tener que mejorar la productividad de Codelco. Codelco está en el tercer cuartil de productividad y el desafío y compromiso que tenía el actual presidente ejecutivo, y que tendrá el nuevo, es pasar del tercer al segundo cuartil en materia de productividad".

0,82% es la ley del cobre que se extraerá de la mina: de cada 100 kilos de material, habrá 820 gramos de cobre.

1.028 millones de toneldas del yacimiento espera explotar la mina subterránea en 40 años.

"La casa se venía cayendo, sabíamos que iba a ocurrir"

VALPARAÍSO. Relatos de parientes de habitantes de casa derrumbada. Hay 6 muertos y 6 denuncias por presunta desgracia. Otras 1.500 viviendas corren riesgo similar.
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Fernanda Aros es familiar de quienes habitaban la casa que se derrumbó el martes en la noche en Valparaíso, tragedia que hasta ayer había dejado seis personas fallecidas y seis denuncias por presunta desgracia. "Estamos consternados por la situación. Sabíamos que iba a ocurrir, pero no ahora", relató a los medios.

"La casa se estaba derrumbando. Hace como un año venía con problemas, se venía cayendo. Tenía la esperanza de que vinieran a arreglarla", sostuvo Aros.

Anita Galarce, una de las testigos del derrumbe en el cerro Bellavista, relató a Mega que, junto a dos amigos, estaban en la escala Louis Pasteur cuando oyeron el estruendo y que alcanzaron a huir. "Hoy me siento afortunada de por lo menos estar relatando... Fue todo muy rápido, fue un estruendo terrible. Llegamos a la escala y estaba llenísima, llena, llena, entonces, nosotros, como estaba llena, nos sentamos más adelante, al principio", contó la joven sobreviviente.

Comentó que, cerca de las 19:30 horas, vieron que caía tierra, pero que pensaron que era por la acción de unos niños que estaban más arriba. Y añadió que "fácilmente" había unas quince personas en la escala, todos jóvenes.

"De un minuto a otro comienza a caer más tierra y no me atreví a mirar para atrás, sólo atinamos a levantarnos y a correr", dijo otra joven que se salvó y cuya identidad no fue precisada. En su huida, llegaron a la calle Condell, donde se toparon con una gran nube de tierra.

Faenas siguen

Entre las seis personas fallecidas, dos han sido identificadas: Mónica Bruna (53) y María Rodríguez (82), quienes vivían en la casa afectada. Hay otras cuatro aún sin ser identificadas. Además, se ha presentado seis denuncias por presunta desgracia, por lo que podría confirmarse más muertes producto del derrumbe.

Los operativos por encontrar a más personas continuaban anoche, con el cuidado de no generar, producto de las faenas, nuevas desgracias, precisó el alcalde Jorge Sharp. De hecho, en la mañana de ayer, un nuevo derrumbe hubo en el sector, dando cuenta de la permanencia del riesgo.

"Valparaíso es una ciudad que vive permanentemente con el riesgo", expuso el alcalde, quien descartó que se hubiera avisado antes al municipio de peligro de derrumbe.

El ministro de Vivienda y Urbanismo, Cristián Monckeberg, anunció que su cartera pondrá los recursos necesarios para demoler viviendas de Valparaíso que hoy tienen decreto de demolición, así como para el catastro de zonas de riesgo tanto en Valparaíso como en otras comunas.

Aseveró que "la planificación comunal y el determinar o detectar zonas de riesgo tiene que estar establecido en los planos reguladores. Eso en muchas comunas ocurre y en otras no (...) Vamos a avanzar y vamos a buscar la fórmula de apoyar a los municipios".

Añadió que si las familias afectadas por el derrumbe quedan "en vulnerabilidad, vamos a avanzar en otorgarles un subsidio que les permita tener una vivienda definitiva".

El director de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad de Valparaíso, Uriel Padilla, afirmó que -al menos- 1.500 viviendas están con riesgos de colapso en la ciudad.

"Estimamos que, como la mayor cantidad de viviendas está en la parte alta y la mayor cantidad está con su topografía intervenida, menos de mil quinientas no deberían ser", dijo el académico, uno de los autores de un estudio sobre la constructibilidad de los asentamientos urbanos en Valparaíso, que plantea que, 9 años después del terremoto de 2010, es aún un riesgo caminar por el plan de la ciudad puerto.

El subsuelo de la casa siniestrada "no cumplía con las condiciones técnicas y de supervigilancia del mantenimiento de la vivienda desde el punto de vista de las instalaciones de agua potable y alcantarillado", precisó Padilla.