"El turista argentino simplemente desapareció y eso afectó mucho la ocupación"
Rolando Mera, dirigente
turístico de la provincia de Osorno
"La detección de agua es muy segura (…) Y claro, no todos pueden hacer lo que hago"
Diome Poffald, agricultor de La Unión que busca agua con varillas de bronce
Provincial Osorno derrotó por 3 a 2 a Unión San Felipe, en el duelo por la quinta fecha del campeonato de Primera B, logrando su primera victoria como visitante. El comienzo de los Toros fue francamente arrollados, puesto que desde que comenzó a rodar el balón, los pupilos de Cristián Romero empezaron a buscar el arco rival.
Por sus niveles de contaminación en la emisión de las descargas de los residuos industriales sólidos, que se vierten en el río Rahue, la Superintendencia de Servicios Sanitarios entregó un plazo para que las empresas Frigorífico Osorno y Nestlé implementen sistemas de tratamiento dentro de los próximos seis y ocho meses.
Un ambiente de expectación reina en torno al gran duelo de los tradicionales rivales de la zona sur, como son los cuadros de Deportes Osorno y Puerto Montt, en su primer encuentro por el Campeonato de Apertura del fútbol chileno. Para la jornada de hoy en el Parque Schott fueron entregadas nueve mil entradas.
Los últimos años han sido de profundos cambios para la sociedad chilena debido al flujo migratorio. De ser un país que veía a lo lejos la mixtura de comunidades y que se había habituado a caracterizar como algo anecdótico el arribo de extranjeros, mutó rápidamente a una nación que en virtud de su desarrollo político y económico, ha recibido ingentes cantidades de personas que llegan en búsqueda de un mejor futuro para ellos y sus familias. La gran mayoría de quienes apuestan por Chile lo hacen convencidas de que aquí encontrarán las oportunidades que sus países de origen no les brindaban, y la tan necesaria estabilidad para forjar un proyecto de vida con las reglas claras.
El país, qué duda cabe, ha cambiado en los últimos años, y lo seguirá haciendo. Con una migración más ordenada producto de las limitaciones que ha impuesto la autoridad, la incorporación de nuevas culturas le aportará miradas distintas y, necesariamente, fortalecerá la capacidad para aceptar al otro, haciendo de la diversidad algo vívido.
En esta línea es que se inscribe el encuentro de migrantes que se realizó el sábado pasado en el Fuerte Reina Luisa de Osorno. Representantes de siete países (Colombia, Cuba, Ecuador, Haití, México, República Dominicana y Venezuela) tuvieron la posibilidad de reunirse en un mismo espacio y compartir, entre ellos y con los chilenos, sus costumbres, bailes típicos y artesanías, en un fantástico crisol americano. La jornada demostró que hay interés por conocer la diversidad cultural que está incorporando la ciudad y que hay suficiente sustento para más iniciativas de este tipo, siempre con el propósito de acercar las culturas y borrar las odiosas muestras de risible racismo e intolerancia que de cuando en cuando surgen.
Es el momento para que más instituciones de la ciudad, además del municipio, que fue el organizador de la cita en el Reina Luisa, se atrevan, den un paso y generen instancias de encuentro intercultural, que a la sazón es una excelente forma de garantizar el respeto a la diversidad, el conocimiento por lo ajeno y la integración de los recién llegados. Los inmigrantes pueden aportarle mucho más a la zona que la sola variable laboral.
Para qué estamos con cuentos, es harto difícil ser mujer hoy día. Ya no es cosa de desvelarse, cambiar pañales, enseñar a caminar y a rezar. Hoy, además, hay que estar preocupada de compatibilizar el trabajo fuera de casa con la hora del dentista de los niños, estar al día del último descubrimiento tecnológico y la oferta del supermercado, con lo que está pasando en el mundo y lo que está pasando en la propia familia. Y como si fuera poco, hay que verse regia y joven (no sea que la flaca de pestañas largas y pensamientos cortos deje a los hijos huérfanos de padre).
La mujer al poder, cacarean.. ¿Cuál poder?… Todas preocupadas por la igualdad de género, pidiendo más presencia femenina en el trabajo, misma cuota en política, exigiendo igualdad de oportunidades, salarios, etc. (aunque igual pascual se siguen sacando el sostén para vender blujeans).
En fin, por supuesto se agradece lo avanzado en cuanto a derechos, pero hoy algunos sectores están tan obsesionados en seguir pidiendo derechos femeninos que han olvidado primero la palabra deber y, segundo, que para pedir tenemos que estar preparadas para recibir. ¿Y lo estamos?
Por supuesto, hubo una época en que ser mamá era el sueño de toda mujer. Pero eso fue antes que se inventara la píldora, cuando la silicona y el microondas estaban en pañales.
En fin, hoy tenemos lo que tenemos y el mundo está como está, obviamente, con nuestra mitad de cuota de responsabilidad sobre nuestros femeninos hombros. Porque el legislador que promulga una ley, la autoridad que propone el aborto, el abogado que defiende la corrupción, el político que apoya el terrorismo y hasta el propio terrorista, tienen algo en común, una mamá. Desde el más conspicuo al más ignoto, han tenido a esa mujer que les guió en sus primeros años.
Tal vez, por eso hay mucho que celebrar. Además de la capacidad para entregar el sudor de nuestra frente, tenemos, por voluntad divina, la oportunidad de mejorar el mundo con esa exclusiva cualidad: acoger, desde el vientre, sostener, conservar y guiar los primeros pasos de nuestra bendecida antigua humanidad. ¡Y eso merece un brindis!
Vivian Arend