Andreina Céspedes

La Gran Feria Navideña de Rahue Alto se mantiene en calle Chacarillas con Yumbel para ofrecer productos, gastronomía y obsequios a precios accesibles a quienes, a pocas horas antes de Navidad, aún no han realizado sus compras.

Esta actividad es una tradición anual de los vecinos de la zona, quienes por casi 14 años han aprovechado la época para mostrar sus emprendimientos, para lo cual, en 2018, se distribuyeron en 40 stands.

Carlos Guaitiao, uno de los locatarios, se unió a esta iniciativa por décimo año para comercializar artículos como luces, estrellas, campanitas, viejitos pascueros, entre otros.

"Nos ha ido muy bien, estoy agradecido porque el público ha colaborado con las compras. Todos están contentos, por eso nos esmeramos y esforzamos en tratar de arreglar el espacio y trabajar los días que nos dan permiso, aprovecharlos y atender al público bien para que se vayan alegres", manifestó.

Mientras que Mauricio Naigual, dedicado a la venta de vasos de gel y diferentes tipos de juguetes, expresó que estar en la feria "es una motivación, es una pasión, empezamos con un rango de poca gente y lo que hemos logrado es harto".

Aunque el evento está cerca de culminar, el próximo 26 de diciembre, desde que iniciaron con el montaje del galpón el 6 de diciembre los comerciantes se han organizado para que los usuarios disfruten de espectáculos de artistas locales, disfraces y entretenimiento.

Más accesible

Ingrid Mancilla, presidenta de la feria navideña, consideró que este año han recibido resultados positivos.

Informó que el horario para asistir es entre las 11 y 23 horas. "Esto es una fuente de trabajo. También ayuda a las personas que no tienen dinero para bajar al centro a comprar un regalo. Acá lo pueden encontrar a un precio más accesible" dijo.