Amelia Araya: la dirigenta que lucha por la junta vecinal Ricardo Boettcher
DESARROLLO. Fue reelegida por tres años, en los cuales espera concretar las obras proyectadas con su ex marido, el fallecido dirigente Luis Silva. Anhela una vía peatonal para llegar al consultorio.
Hace más de un año falleció su esposo, el dirigente vecinal Luis Alberto Silva, con quien compartió por 36 años. Amelia Araya Quinchel, de 66 años, recogió entonces la posta dejada por su marido y se ha volcado a trabajar por lo que estaba pendiente.
Elegida por sus vecinos para liderar la Junta de Vecinos Corvi o Ricardo Boettcher, ha trabajado con sus dos hijas y hoy preside también el Consejo Vecinal de Desarrollo (en el que siempre se mantuvo en la dirigencia), en los subcentros de la ex escuela 4 y más tarde en el Liceo Industrial.
"Cuando falleció mi esposo me pidieron que continuara como presidenta en la unidad vecinal. Sequé mis lágrimas y me puse a trabajar, lo que fue una extraordinaria terapia", reflexiona.
Agrega que "durante 36 años caminamos juntos y ahora estamos cerrando los proyectos que fueron su preocupación hasta el momento de su muerte, producto del cáncer", rememora.
Ambos proyectaron obras de desarrollo para su sector y esos anhelos se han ido materializando poco a poco. "Estamos haciendo realidad los proyectos que conversamos con Luis Alberto y uno de ellos era el paradero Ricardo Boettcher, que sirve a miles de personas, en especial a los estudiantes que vienen de las poblaciones cercanas y encuentran un techo y un lugar para abordar los buses que los llevan especialmente a Osorno; además, es el punto de acceso a la ciudad y antes no tenía el mejor aspecto", subraya.
Casa de la cultura
El otro anhelo emblemático es un anfiteatro con un escenario de concreto que estará adosado a La Casa de la Cultura, que podría transformarse en el sitio de encuentro de la actividad artística, cultural, social y de reuniones de las más de 240 familias que habitan en la tradicional población Corvi y en la población Llollelhue Sur, que preside Edith Yefi.
Esta obra, con una inversión cercana a los 200 millones de pesos, presenta un avance superior al 60 por ciento y los dirigentes esperan que se entregue en los primeros meses de 2019.
"Ojalá se inaugure durante la celebración del aniversario de la ciudad, en febrero próximo", indica Amelia Araya.
A lo anterior se agrega el Punto Deportivo, que es una multicancha, y la remodelación de la Plaza de Bolsillo en esta población.
El Consejo Vecinal de Desarrollo del sector Corvi, que funciona con el programa Quiero Mi Barrio, tiene 35 socios. Trabaja con las juntas de vecinos Corvi y población Llollelhue, y está dirigido por Yayo Mendoza, como secretario; tesorera Margoth Gatica; y las directoras María José Duhalde y Judith Miranda.
Amelia Araya fue reelegida como presidenta por otros tres años y hoy luchan por una vía inclusiva que permita acceso peatonal sin problemas al consultorio del sector, distante varias cuadras.
Explica que todo lo realizado se planificó en talleres y observando en terreno la forma de hacer los arreglos, lo que suma una inversión que supera los 600 millones de pesos, que hoy se justifican plenamente.
Apoyo
"Hemos tenido suerte en lo que hacemos, pero a eso hay que agregar el apoyo de nuestros dirigentes, de las autoridades y de los profesionales que han trabajado con nosotros. Todo ha sido en beneficio de los vecinos, en especial los niños y jóvenes, y por supuesto personas de la tercera edad, ya que nuestro sector es una de las poblaciones más antiguas de La Unión", asegura.
Agrega que existen otros proyectos que favorecen a sus vecinos y en eso trabajan.
"El mejor reconocimiento es cuando veo a los vecinos contentos y recibo un abrazo", asegura la mujer, quien en diciembre de 2017 fue reconocida como dirigenta social de la región.