Sergio Silva
Con la declaración de Andrés Duval, ex director regional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) partió la segunda jornada del juicio por maltrato animal, delito que la Fiscalía de Río Negro sigue contra el actual trabajador de la empresa Manuka, Gonzalo García, quien junto al imputado -pero no formalizado- Zachary Ward de origen neozelandés, habrían ejecutado a más de mil 500 terneros machos entre 2012 y 2013.
Sin embargo, el relato del testigo de la Fiscalía, Francisco Ehrenfeld, fue el que marcó la audiencia. El profesional del agro de 44 años trabajó en la empresa Manuka, donde fue jefe de producción de seis salas de lechería. Ayer comenzó a prestar declaración minutos después de las 10 de la mañana y se extendió por casi cuatro horas y media.
CRUDA CONFESIÓN y video
Ehrenfeld fue desvinculado de la firma por el ex gerente de producción Zachary Ward, tras regresar de una segunda licencia médica que pidió, debido a que su salud comenzó a verse alterada. El motivo de ello y que reconoció en la audiencia, era haber dado muerte a terneros recién nacidos a golpes de martillo, orden que debía acatar y que venía de su jefe directo, el neozelandés Ward.
El testigo señaló que fue difícil seguir en la empresa, ya que de no hacer lo que se le encomendaba, recibía las amenazas de ser desvinculado por su jefe directo.
La fiscal Leyla Chahín exhibió videos que fueron grabados por el propio testigo, donde se muestran las fosas en las que eran arrojados los animales, incluso algunos aún agonizando. En las crudas imágenes se observa a Ward cuando golpea a un ternero con un martillo. A raíz de su vinculación con el caso, el neozelandés abandonó el país en enero de 2014, luego que fue desvinculado de la firma tras conocerse por la prensa este caso.
Francisco Ehrenfeld terminó de declarar pasadas las 15.30 horas de ayer. A la salida del tribunal, y aún evidenciando nerviosismo, fue tajante en señalar que el único responsable era Zachary Ward, porque "para él, los terneros machos eran un estorbo".
Aceite quemado
El ex profesional de Manuka confirmó lo que minutos antes había declarado ante los jueces, que para dar muerte a los animales se utilizaban cuatro practicas, tres de ellas irregulares y de crueldad para el ganado.
"Para bajar costos, Zachary ordenaba bajar la dosis de eutanasia y completar el resto con aire, o simplemente poner aceite quemado como dosis. Pero siempre la prioridad era martillo, de lo contrario las otras opciones. Él, de manera autoritaria, te decía 'tú lo vas hacer' y si me negaba se molestaba mucho. Esto me dejaba muy mal y de la nada lloraba, quedé sensible y tuve trastorno del sueño, que se mantiene hasta ahora", recordó con pesar.
Estas prácticas por lo general se realizaban en horas de la noche para no levantar sospechas entre los trabajadores y sus familias, ya que muchos de ellos se negaron a realizar estas prácticas, las que finalmente terminaban siendo realizadas por algunos de los jefes de áreas y muy rara vez por veterinarios como lo establece la Ley de Beneficio Animal.
Recuerdo doloroso
"Duele recordar todo esto. Volver a ver los videos fue revivir esos momentos. Yo en un comienzo intenté plantear fórmulas para no matar a estos inocentes terneros, pero no me escucharon. Sabía que esto podría causar riesgos para la empresa y para el resto del personal", detalló.
Ehrenfeld está radicado en Temuco y en entrevista con El Austral reconoció que en todo el tiempo que estuvo en la empresa debió sacrificar a más de 200 terneros.
"Fui obligado a realizar esto en agosto del 2013, y quien debiera estar siendo juzgado es quien era mi jefe directo (...) Zachary es el único responsable de este maltrato animal y generó el problema, mientras que Gonzalo García sólo siguió las instrucciones del jefe, aún cuando apoyaba un poco la metodología del martillo", precisó.
El juicio oral se retomará el lunes a las 9 de la mañana, jornada a la que fue citado a declarar el diputado Fidel Espinoza, quien denunció el tema públicamente hace cuatro años.
"Zachary ordenaba bajar la dosis de eutanasia y completar el resto con aire o simplemente poner aceite quemado como dosis"
Francisco Ehrenfeld, Ex trabajador de Manuka"
"En un comienzo intenté plantear fórmulas para no matar a estos inocentes terneros, pero no me escucharon"
Francisco Ehrenfeld, Ex trabajador de Manuka"