Integrantes de Senderismo Osorno realizan un recorrido por el Amazonas peruano
VIAJE. Grupo de cinco montañistas recorrió recientemente el cañón de Apurimac y las ruinas de Choquequirao.
Un grupo de cinco integrantes del club Senderismo Osorno viajó hasta Perú para realizar un recorrido por el cañón de Apurimac, el segundo de mayor profundidad del plante, además de las ruinas de Choquequirao.
Pía Chánique, Bernardita Segura, Cristina Segura, Felipe Barriga y Roberto Chánique dieron vida a esta travesía que culminó recientemente.
El grupo llegó a Cusco y luego se trasladó hasta Cachora, un pequeño poblado ubicado en el cañón de Apurimac.
"De este poblado nos dirigimos bordeando un filo del cañón hasta el mirador de Capulyoc, donde perdemos la señal de teléfono y dejamos atrás contacto con la realidad y nos comenzamos a internar en lo profundo de este impresionante cañón", comentó uno de los integrantes, Roberto Chánique.
Dura travesía
El montañista dijo que cruzar este cañón considerado el más duro de las rutas Incas desmotiva a los turistas y viajeros, ya que el esfuerzo físico y desgaste es enorme y no hay otro medio de llegar que no sea por esta ruta, a lo que se suma la falta de oxígeno y la dificultad para respirar.
"En sus 62 kilómetros de recorrido y desde que comenzamos a bordear y perfilar este cañón nos impresionó su profundidad de más de 4 kilómetros. En el fondo solo se divisaba un hilo de agua que era el río Apurimac, uno de los principales afluentes del río Amazonas desde el Perú. Y ver hacia arriba los diferentes nevados y glaciares ya era un paisaje maravilloso", agregó.
Tuvieron que bajar de los 3 mil metros sobre el nivel de mar a solo los 1.500, pasando del frío que congelaba en la mañana a un clima tropical de unos 25 grados en la noche.
Posteriormente tuvieron que recorrer cerro serpenteando un muro de casi 90 grados, tramo que lo hicieron en 12 horas, pasando por una zona desértica llena de cactus.
"Así subimos esa pared hasta lograr los 2.900 metros de altura y el poblado de Samaipata, lugar donde levantamos nuestro segundo campamento", dijo el montañista osornino, quien agregó que antes de el anochecer del día siguiente llegaron a la ciudad Inca.
Travesía
Posterior a ello el grupo de Senderismo Osorno siguió camino hasta conocer las ruinas de Choquequirao.
"El ingreso a las ruinas es por un costado de la ciudad hacia una terraza de cultivo que seguimos por unos 300 metros hasta llegar a una bifurcación que nos llevó a la plaza central de la ciudad y para nuestra sorpresa al llegar a nuestro punto de destino, solo encontramos a dos visitantes en todo el lugar", comentó Roberto Chánique.
A la ciudadela la rodea un impresionante sistema de andenes construido sobre laderas prácticamente verticales. Sirvieron como plataformas de cultivo y como soporte de construcción y todo antisísmico.
Comenta que el retorno es mucho más difícil porque se añora la motivación de la ida aunque recalca que a satisfacción es plena.
Comentó que el éxito de este viaje se debe a todos aquellos que apoyaron y lo hicieron posible, como familias, colaboradores, personas que los acogieron en sus hospedajes.
El grupo Senderismo Osorno recorre diferentes lugares del país y una vez al año sale fuera de Chile.
"Desde que comenzamos a bordear y perfilar este cañón nos impresionó su profundidad de más de 4 kilómetros".
Roberto Chánique, Senderismo Osorno"
días duró la travesía que realizó el grupo de montañistas de Senderismo Osorno. 5
kilómetros debió recorrer el grupo, algunas rutas de difícil accesos en Perú. 62