En un 50% aumentó el número de visitantes al volcán Osorno durante las presentes vacaciones de invierno, en relación a lo ocurrido en el mismo período del año pasado.

Al día, son unas 2 mil personas las que acuden a los faldeos del volcán, para disfrutar de la nieve, de las cuales 300 acuden al centro, entre turistas extranjeros y nacionales, así como esquiadores.

Y si bien las cuentas son positivas en el macizo cordillerano, dado que las condiciones climáticas aportaron para que la temporada fuera un éxito, no todo es alegría, dado que se han registrado algunos inconvenientes, que desde la administración del recinto esperan que no se vuelvan a repetir.

Y es que uno de los aspectos negativos es el colapso que se produjo el domingo pasado, dado que muchos de los visitantes no portaban cadenas, elemento que es muy importante a la hora de programar un viaje hasta este centro.

Santiago Vidal, administrador del Centro de Esquí y Montaña Volcán Osorno, subraya el concepto de que se trata de un camino de montaña, razón por la cual se tiene que ir preparados para abordarlo.

Por eso, también -antes de subir- efectivos de Carabineros controlaban ayer que todos los visitantes portaran cadenas.

Chao estrés

Entre ellos, uno de los aspectos más destacados es que el tiempo fue el mejor aliado para el desarrollo de las actividades en la nieve.

"Divino, estoy de vacaciones con los chicos y llegué para visitar la zona. No esperaba tanta nieve; es la primera vez que vengo", relata Mariana Mondini, quien llegó desde Buenos Aires, Argentina, para disfrutar de la naturaleza.

Algo parecido opina Natalia Tapia, de Santiago, quien por primera vez pasa las vacaciones de invierno en este lugar. "Hay que cuidar esta naturaleza bella que nos ofrece el volcán Osorno", recalcó.

Un lugar -además- ideal para olvidarse del estrés que se produce en el día a día.

Maximiliano Palma (7 años) cuenta que la segunda vez que llega al volcán, dado que la primera vez fue en tiempos que no había nieve, dado que era verano. "Al principio tuve miedo, pero después me gustó", relata, tras lanzarse en un trineo.

Para la puertomontina Paola Fernández, es un buen panorama el ir a la nieve. Más todavía si las condiciones climáticas acompañan a los turistas.

En su caso, ayer no fue el único día en que fue a disfrutar de la nieve durante estas vacaciones de invierno.

Colapso

Vidal recuerda que el domingo el camino simplemente colapsó, porque no había control y comenzó a llegar gente que no portaba cadenas. Pero también, otro grupo lo hizo por irresponsabilidad.

De los primeros, describe que se trata de personas que tienen su auto, en su mayoría citycar, que pasean durante todo el año, pero que en este tiempo se encuentran con el inconveniente de que el camino, al ser de montaña, se congela y con ello la vía se complica.

Por eso, califica de "irresponsables" a quienes saben, choferes profesionales, con licencias profesionales, que conducen microbuses y que realizan viajes especiales, con personas que tienen igual derecho de disfrutar de la montaña, pero que al ser particulares no les cuesta nada adquirir un par de cadenas, que le costarán $100 mil, les servirá para muchas ocasiones y se ahorrarán los problemas que les dan a sus pasajeros, dado que se tienen que bajar de estos vehículos en un camino con curva y lleno de hielo, lo que se traduce en un peligro para ello.

Pero no es todo, dado que al quedar paralizados a medio andar, obstaculizan el paso de las agencias de turismo y de los turistas en general. El administrador aclara que no se trata de conductores de 10 empresas que realizan viajes durante todo el año y que previo a sus viajes los contactan y se informan acerca de las condiciones del volcán.

No así quienes tienen una "libre" para recorridos locales, que incluso llegan con sus carteles del trayecto que cubren como medio de transporte y que ejecutan viajes especiales, pero que están fuera del sistema y a los cuales no hay cómo informarles acerca de las condiciones que existen para llegar al volcán.

Pero que -sin embargo- al ser del sur deberían saber lo que es un camino de montaña. "A ellos, derechamente, los acuso de ser irresponsables", enfatiza. Otra medida es que después de las 15.30 horas no suba nadie más.

Más aún si se considera que esta emergencia afectó a unos 50 vehículos, más "un número que no se sabrá nunca de personas que no pudieron llegar. Me llamó gente que viajó con las condiciones adecuadas y se tuvieron que dar vuelta y regresar".

Vidal precisa -asimismo- que este escenario no se produce todos los días, sino que cada vez que la nevada es a baja altura, condición que no se produce tantas veces en el año.

"Una persona que es profesional de la conducción debe saber que cuando sube al volcán, aunque las condiciones sean las óptimas, tiene que venir con sus cadenas, porque es un camino de montaña y las condiciones pueden cambiar en cualquier momento", afirma.