Pintor Rubén Schneider festeja nuevo año con muestra en su ciudad natal
ARTE. Con cuatro décadas de trayectoria a su haber, este artista cuyas obras reflejan la luz y paisajes de sus orígenes, relata su pasión por la costa osornina en la que veraneó siendo niño.
Sus 66 años celebrará el 24 de julio el pintor Rubén Schneider. Y qué mejor que festejarlo Osorno, ciudad en la que nació en 1952, con una exposición inaugurada anoche y que, de manera gratuita, podrá visitar el público hasta el 30 de este mes, en el Centro Cultural de calla Matta.
Y si bien reconoce que su nacimiento en esta zona obedeció a que su mamá "estaba ocasionalmente en Osorno", añade que durante años ha mantenido lazos con esta ciudad y provincia.
Relata que, igual que hoy, vivió su infancia en Puerto Montt, "pero venía harto a Osorno, que me gusta mucho. Aún tengo primas acá", cuenta.
"La costa de Osorno es preciosa", comenta al mencionar que en el verano va a pintar allá, en el encuentro que organiza en Pucatrihue la artista plástica Tessie Bujes.
Con nostalgia, el artista recuerda que siendo muy pequeño, a los 8 años, vacacionó en Pucatrihue, en la casa de un tío. "Más de 40 años después volví y me reencontré con esa zona", cuenta.
Confiesa que es "como un reencuentro con la infancia. Y la verdad es que Pucatrihue no ha cambiado mucho. Está casi como lo conocí cuando era niño", valora el pintor.
A su juicio, eso es fabuloso porque, generalmente, las caletas muy bonitas, se ponen de moda y les pasa lo que le ocurrió a Maicolpué que "es más habitado y más urbano. No digo que eso sea malo, pero prefiero lugares más limpios y originales", sostiene Rubén.
Orígenes
El artista cuenta que comenzó sus estudios en la Universidad de Chile, y no le complicó tener que atravesar casi toda la nación para ir a la sede que se había formado en Arica con profesores de la otrora Escuela de Artes y Oficios. "Fue la mejor etapa que ha habido en este país en las artes", explica.
Hasta ahí llegó para cursar la carrera de Ornamentación Pública, algo así como escultura, que tenía muchos talleres con esos docentes".
Recuerda que era y sigue siendo la ciudad de la eterna primavera. Rememora que venía a su casa dos veces al año y "cuando volvía, era como una invasión visual de verde, que estaba por todos lados".
En esta línea coincide en que el color ha sido uno de los elementos que ha caracterizado su obra, lo que indica guarda relación con los pintores que seguía en esa época, como por ejemplo Gauguin.
Relata que eso también tiene que ver con sus orígenes, pues siempre iba a la caleta de Angelmó y explica que, cuando hay sol, la luz revienta para todos lados, de forma violenta.
"Algunos pintores como Pacheco Altamirano trabajaron esos colores más puros y primarios", acota.
Añade que "casi todas mis series (muestras) han sido bien expresionistas y he trabajado siempre sobre temas como la identidad, la definición del territorio, el paisaje y pueblos originarios". Además, ha abordado temas contingentes, como los movimientos sociales en las calles.
Serie
Hoy, Rubén Schneider llega a Osorno con "Terra-toria en riesgo", muestra que dice relación con que, en alguna medida, las ciudades van perdiendo su identidad.
Subraya que por eso le gusta Pucatrihue, porque ha mantenido su esencia. "En otros lugares se ve mucha alteración del paisaje o los bosques ya no existen. Eso lo veo como algo que se pierde, más que algo que se gana", recalca.
Según comenta, en 1978 empezó a pintar y este año está cumpliendo 40 años de trayectoria.
Expresa que al principio fue más complicado y trabajó en muchas cosas, pues "siempre hay que tener una pata en la tierra para parar la olla".
Sin embargo, en los últimos ha ido soltando esas otras labores y hoy se dedica solamente a la pintura.
Sabe que es de los pocos que pueden vivir del arte, y se siente agradecido de ello.
Al respecto, enfatiza que "eso tiene que ver también con el esfuerzo. He sito tenaz y perseverante y he insistido en lo que me gusta. Entonces, esto es la recompensa".
Pero ese no ha sido el único reconocimiento que Rubén Schneider ha tenido. En 2016 recibió el Premio Regional de Arte por su trayectoria y aporte en esta materia.
"Esto es bonito porque nunca me fui de mi territorio y siempre quise hacer mi historia en mi cuidad y en mi región. Para hacer arte es mucho más fácil irse a Santiago y emerger desde ahí. Este premio es tan significativo porque es un reconocimiento de tu espacio, de la gente con la que te has visto siempre", reflexiona.
Y añade que "el día que uno pare de crear, ya está muerto como artista. Eso tiene que ver también con estar fascinado con la vida, con tu historia y con lo que pase y las posibilidades que tengas hacia adelante", enfatiza.
"Nunca me fui de mi territorio y siempre quise hacer mi historia en mi cuidad y en mi región. Para hacer arte es mucho más fácil irse a Santiago y emerger desde ahí."
Rubén Schneider, Pintor nacido en Osorno"
años han pasado desde que el artista Rubén Schneider dio sus primeros pasos en la pintura. 40
el pintor recibió el Premio Regional de Arte, por su trayectoria y aporte en esta materia. 2016