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Dichos de Ezzati aumentan la tensión entre comunidad católica

IGLESIA. Las palabras del cardenal, que le pidió al obispo local Juan Barros que dé un paso al costado, recibieron el unánime rechazo de partidarios y opositores al líder de la Diócesis de Osorno. Mientras los fieles laicos tildaron el emplazamiento de "vergonzoso", el vocero del movimiento opositor dijo que llega "a destiempo".
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Sólo más tensión, al ya enrarecido ambiente que existe entre los fieles católicos osorninos, aportó el llamado que el jueves pasado formuló el cardenal Ricardo Ezzati al obispo Juan Barros, para que dé un paso al costado.

Caló hondo la exhortación del arzobispo de Santiago entre quienes han estado en contra y a favor del obispo local desde que fuera designado como pastor de la diócesis local en 2015 por el Papa Francisco.

Mario Vargas, uno de los voceros del Movimiento de Laicos de Osorno, contrarios a la designación de Barros desde el primer minuto, dijo que "las declaraciones de Ezzati son impactantes, pero a destiempo... Aparece como una limpieza de imagen, y eso nos parece más escandaloso que no decir nada", sostuvo.

Precisamente este grupo cuestionó desde enero de 2015 el arribo de monseñor a la diócesis local, por su supuesto encubrimiento de abusos a menores que cometió el sacerdote Fernando Karadima, del cual Barros era cercano en la parroquia El Bosque de Santiago.

Vargas acotó que ahora es el momento de escuchar y acatar lo que dirá el Papa en Roma. "No entendemos que nuestros pastores sigan con la verborrea, que el Santo Padre pidió no hacer, y cada vez que hablan 'meten las patas' y dicen cosas estúpidas ", afirmó, en alusión a la carta que mandó Francisco hace una semana, en la cual el Papa pidió perdón y señaló que no tuvo los suficientes antecedentes sobre los cuestionamientos y acusaciones contra el obispo osornino.

Recordó que los laicos trataron de hablar con Ezzati, pero la primera vez, en 2015, no los recibió.

La segunda vez, cuando se reunieron al año siguiente, le pidieron que "interviniera como cardenal en la curia chilena, para que nos diera apoyo en la crisis insostenible que vivíamos en Osorno, por la llegada del obispo Barros, pero él no nos quiso escuchar y adujo que no podía hacer nada por la situación de esta ciudad". Luego, dijo, nunca más tomaron contacto con el prelado.

Vergüenza

José Manuel Rozas, vocero del Movimiento de Fieles Laicos, que surgió en oposición a los detractores de Barros y que se han mantenido "en comunión con la Iglesia", recalcó que "lo que pasó ayer (jueves) fue vergonzoso, contraproducente y desorienta más al laico".

Añadió que fue "muy bochornosa la prueba de la blancura, que es decir que están libres de pecado y no han hecho absolutamente nada y se les ha confundido en esta situación".

Criticó que eso lo dijeron los cardenales Ezzati y (Francisco Javier) Errázuriz, quienes señalaron que "la culpa la tiene el obispo Barros, que se paseó por todas las celebraciones del Papa".

Show

Walther González, que a sus 37 años es el sacerdote más joven de la diócesis y tiene a su cargo la parroquia Jesús Obrero de Rahue Alto, opinó que las declaraciones de Ezzati le parecen pésimas, "porque faltan a la colegialidad, a la comunión eclesial y a lo que pidió el Papa, que fue rezar y callar un poco la boca". Asimismo, confirmó que Barros se encuentra con licencia médica por inconvenientes de salud.

Consultado sobre si el obispo local hablará con los medios de comunicación tras la licencia médica, González fue enfático al señalar que desde que Barros asumió la diócesis de Osorno, el 21 de marzo de 2015, siempre ha hablado con los periodistas, y opinó que "no sé qué más quieren que hable, No sé qué más podría decir. Él habló en Punta de Tralca", acotó.

Además, recordó que "el Papa pide que estemos en un estado de oración, que recemos por esta situación que compete a la Iglesia en Chile, no exclusivamente al obispo Barros; porque si el problema fuese sólo él, lleven a Roma solamente a Barros, pero el Papa llamó a la Conferencia Episcopal entera".

Por eso, instó a los católicos a ampliar su mirada. "Cortemos el show de andar pidiendo la cabeza de quien ha sido un chivo expiatorio durante todo este tiempo de las problemáticas que existen en la Iglesia en Chile".

Crisis

Por su parte, Mario Vargas remarcó que es tiempo que el Papa dé directrices sobre "cómo tienen que dirigir su Iglesia... Ahora, los llamará para que hagan bien el trabajo", apuntó.

Agregó que esperan que solicite "la salida de muchos de ellos, que fueron ineficientes, actuaron en el secretismo de la Iglesia, que desinformaron y mintieron al Papa".

Argumentó que Francisco está en todo su derecho de pedir a estos pastores que den un paso al costado: "entre ellos el cardenal Ezzati, Errázuriz y los de la parroquia El Bosque: Barros, (Tomislav) Koljatic en Linares y (Horacio) Valenzuela en Talca".

Y confían que el Papa tenga "una mirada no sólo en Osorno, sino que en la Iglesia chilena en su totalidad".

Según detalló, desde 2015 vienen denunciando que el Papa estaba siendo mal informado por "el arzobispo de Puerto Montt, Cristián Caro; los obispos de El Bosque y el obispo (René) Rebolledo, que es íntimo amigo de Ivo Scapolo, el nuncio apostólico, y Francisco Javier Errázuriz, quien pasaba la información al Papa. Esta es la cofradía que se armó en Chile para operar con mentiras sobre lo que estábamos viviendo como Diócesis de Osorno, lo que hizo que Francisco se equivocara y dijera que éramos zurdos y tontos".

En tanto, José Manuel Rozas coincidió en que "el Papa fue muy claro al decir que son tiempos donde hay que reservarse, estar en comunión y en profundo estado de oración y discernimiento sobre la situación que se vive a nivel nacional", pues dijo que no es sólo el tema del obispo Barros, sino que también están los casos de los maristas y de la Compañía de Jesús, entre otros.

El vocero de los fieles laicos indicó que "los referentes que debieran dar palabras de aliento y reflexionar se ponen a dar entrevistas".

Rozas agregó que en una reunión en la que participaron Chomalí, Ezzati y Errázuriz con el Papa, "informaron del peligro de lo que pasaba en Osorno". Pero advirtió que en su misiva el Pontífice "no especifica en qué información no le entregaron datos contundentes".

Licencia

El padre González criticó la propagación de informaciones que dijo son falsas, como que el obispo vaya a renunciar o esté en la Región del Maule.

"Creo que monseñor Barros tiene el poder de desdoblarse, pues estuve con él ayer (jueves) y anteayer (miércoles). Ese nivel de mentiras es demasiado", reclamó.

A su vez, el vocero de los fieles laicos coincidió en que es mentira que tras la Conferencia Episcopal de Punta de Tralca, Barros se haya ido a su casa en Santiago a reposar, y contó que participó junto a él en la pastoral juvenil.

Precisó que "por prescripción médica se le pidió tomar un tiempo de descanso, por un cuadro que puede ser de estrés. Dicen que es de depresión, pero eso también está equivocado", afirmó.

Junto con confirmar que está con licencia médica, aunque no le consta la razón ni el período de descanso, González añadió que "a cualquier persona que le corra sangre por las venas, estando sometido a un nivel de estrés y de recibir tanta basura todos los días de su vida, durante tres años, es absolutamente comprensible que se haya enfermado".

Al respecto, Mario Vargas expresó que "no podemos dudar de la situación de enfermedad del obispo Barros, porque lo hemos visto disminuido desde el 2015 en adelante. Se le veía nervioso y ojeroso", agregó.

Añadió que "es importante tener "una mirada más caritativa de parte nuestra".

Escenario

En tanto, el padre Pedro Kliegel precisó que "nuestra búsqueda siempre ha sido de la unidad. Ha tenido quiebres en los últimos años, pero debemos hacer los esfuerzos para reencontrarnos".

Destacó la importancia del encuentro de los obispos con el Papa. "Estamos a la espera de que exista un diálogo entre el episcopado, monseñor Barros y el Santo Padre", opinó.

Señaló que, luego de ello, "quienes somos parte de la Iglesia de Osorno debemos esperar para encontrar luego un camino en común de reconciliación, que es necesaria", y expresó que ésta "siempre es posible cuando hay apertura de todos. Hay que ser prudentes cuando haya un veredicto".

Sobre las declaraciones del cardenal, que instó a Barros a dar un paso al costado, Kliegel dijo que "fue expresión de lo que ya se ha conversado dentro del episcopado. De eso tengo convicción, porque a monseñor Ezzati lo conozco".

"Cortemos el show de andar pidiendo la cabeza de quien ha sido ha sido un chivo expiatorio durante todo este tiempo de las problemáticas que existen en la Iglesia en Chile".

Walther González Párroco iglesia Jesús Obrero"

"Las declaraciones de Ezzati son impactantes, pero a destiempo... Aparece como una limpieza de imagen"

Mario Vargas, Vocero Movimiento de Laicos"

"Lo que pasó ayer (palabras del cardenal) fue vergonzoso, contraproducente y además desorienta más al laico"

José Manuel Rozas, Vocero Fieles Laicos"

"(Declaración de Ezzati sobre Barros) fue expresión de lo que ya se ha conversado dentro del episcopado"

Padre Pedro Kliegel, Sacerdote alemán"

21 de marzo 2015 tomó posesión del cargo de obispo de Osorno Juan Barros, quien ha sido sindicado como encubridor de Karadima por parte de las víctimas del cura de la parroquia de El Bosque.

19 de abril 2018 el cardenal Ricardo Ezzati instó al obispo de Osorno a dar un paso al costado. En 2016 el Movimiento de Laicos le había pedido que interviniera en este tema.

2015 en Roma el obispo Fernando Chomalí se reunió con el Papa y, junto con Ezzati y Errázuriz, le habría informado acerca de los problemas que habían en Osorno tras el nombramiento de Barros.