Denuncian a cuidadores de autos de malos tratos, amenazas y daños a vehículos una vez que los parquímetros concluyen su trabajo
PROBLEMÁTICA. En sectores como la plaza de Armas y la plazuela Yungay aparecen estos trabajadores informales. Los acusan de conductas matonescas si no reciben propina y autoridades no descartan reunión para tratar el tema.
Basta que los parquímetros legalmente contratados se retiren de las calles para que los principales estacionamientos del centro de la ciudad se conviertan en tierra de nadie.
Es ahí cuando aparecen ellos, que cual lobos se adueñan de calles y aparcaderos. Son los llamados "cuidadores" de autos que suelen merodear en sectores altamente demandados por los automovilistas, como la plaza de Armas, la plazuela Yungay y el Mercado Municipal de Osorno.
Se trata de personas que trabajan sin permiso municipal y que en el último tiempo han sido denunciados por usuarios y por trabajadores formales de adueñarse de los estacionamientos.
Los acusan de tener malos tratos hacia los choferes que no les dan propina, de tener actitudes matonescas, de amenazas, de "reservar" espacios para conocidos, de daños a vehículos, de andar ebrios e incluso de traficar droga en plena vía pública. Y si bien, por cierto, no se trata de todos los cuidadores, pagan justos por pecadores.
Legalmente estas personas no pueden exigir un cobro por estacionarse en dichas zonas y en ciertos horarios, pues éstas quedan liberadas de pago después de las 20 horas de lunes a viernes, después de las 15 horas los sábado, y todo el día los domingo.
Testimonios
Andrés Echeverría, quien reside en el centro, es uno de los tantos conductores que pasó un mal rato por culpa de esto.
"Hace un par de semanas, frente al Mercado Municipal estacioné mi vehículo. Antes de bajar se acerca un cuidador y me pregunta cuánto rato me voy a quedar. Le dije que no sabía, ante lo cual me dice si le podía dar propina por adelantado. Yo le dije que no y me dijo que entonces debía irme rápido, porque le quitaba cupos para que se estacionaran otros vehículos", recuerda.
Pero eso no fue todo, pues agrega que "en eso me bajé de mi auto, yo estando con mi hijo pequeño y este hombre empieza a gritonearme y a amenazar con que me iba a pegar, todo esto porque no le quise dar propina por adelantado. Para evitar un mayor conflicto subí a mi hijo al vehículo y me retiré por temor a que le hicieran daño a mi auto. La actitud de este sujeto fue desafiante y matonesca, creyéndose poco menos el dueño de la cuadra, situación que se repite habitualmente en el lugar".
Son peligrosos
Este medio logró obtener una serie de testimonios de trabajadores formales del centro de la ciudad, quienes accedieron a hablar, pero en forma anónima por temor, confirmando que estos sujetos son violentos e infunden miedo a cualquiera que vaya en contra de su forma de "trabajar".
"Las personas reclaman que después del horario de cobro, ellos les cobran y más de lo normal, y si no les dan plata algunos se enojan, porque de repente andan con trago. Son peligrosos", señala uno de ellos.
Otro agrega que "es todos los días ese tema, que les cobran a los conductores y si no les pagan, se enojan, los tratan con groserías, les orinan el auto, toman posesión de las calles. Son agresivos, uno tiene que hacer vista gorda y en el fondo Carabineros no hace nada, tiene que haber un control más estricto".
Otra fuente anónima confirma a El Austral que "cuando no les dan plata rayan los autos, les rajan las plumillas, o cuando no les compran las plumillas, las cambian, se las rompen y a veces por miedo la gente cuando los ve ebrios no se estacionan, se van. La gente no denuncia por miedo. Después de las 15 horas del sábado empieza la chacra, se creen dueños y hasta pelean entre ellos mismos".
Concesionaria
ChileSur S.P.A. es la actual empresa concesionaria de estacionamientos que opera en Osorno, desde donde reconocen estas denuncias y lo complejo que es para muchos de sus trabajadores tener que lidiar con esta situación, aunque se sienten de manos atadas.
Según manifiesta Miguel Ángel Pedrero, representante legal de la firma, "la verdad esto se viene arrastrado hace harto tiempo ya y a medida que pasa el tiempo, más problemas se están suscitando en las calles, producto de gente que cobra y que no están contratados por nuestra empresa".
El directivo asegura que en el pasado han hecho un par de denuncias a la policía, pero que "estamos atados de manos porque la verdad es que hay varios casos de nuestros parquímetros en que los tienen amenazados, y eso es grave".
"Hemos tenido casos de que son matonescos, algunos cuando finaliza el período de la concesión diaria, tratan de cobrar nuestros váucher, entonces está compleja la situación. Más denuncias no podemos hacer y los parquímetros tampoco pueden hacerse parte de esto", reconoce Pedrero.
Llaman a denunciar
Desde Carabineros tomaron el guante en la voz del capitán José Halabi, subcomisario de servicios de la Primera Comisaría, cuya unidad cubre el territorio del centro de la ciudad. Si bien el uniformado reconoce esta situación, advierte que se trata de un problema de carácter nacional y llama a los afectados a denunciar.
"Esto es una realidad que se vive en muchas ciudades del país, pasa que después de las labores de los parquímetros debidamente establecidos, llegan individuos que tratan de ejercer esta labor de mala forma, exigiendo el pago de dinero o efectuando algún tipo de amenazas o daño contra los vehículos en caso de que no accedan a darles dinero", afirma el oficial.
El efectivo sostiene que "nosotros estamos llanos a recibir todo tipo de denuncias al respecto. En estas situaciones Carabineros está en la obligación de infraccionar a quienes ejerzan las labores de parquímetros sin permiso municipal".
Un llamado similar hace el alcalde subrogante de Osorno, Hardy Vásquez, quien asegura que "en este caso el rol fiscalizador básico es de Carabineros, ya que esto ocurre en la vía pública".
El personero es tajante respecto a que los conductores no tienen ninguna obligación de pagar dinero a estos cuidadores, pues no están facultados bajo ningún tipo de norma para cobrar.
Tanto Carabineros como el municipio se mostraron llanos a reunirse para coordinar futuras acciones y soluciones.
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