Osorno comúnmente tiene mucho humo en algunas épocas del año. Pero siempre es para los meses fríos y su olor es a leña. Nada muy nuevo.
Tampoco es nuevo para nuestra zona el olor a asado o parrilladas. Pero la presencia de humo en verano y un aroma que hace explotar las papilas gustativas de felicidad, sumado a un buen clima, es casi el éxtasis.
Así se sentían ayer los integrantes del jurado, los chefs Álvaro Lois, Juan Luis Dolarea y el francés Yann Yvin, junto al eximio asador argentino Bernardo Borgeat, quienes tuvieron la compleja tarea de dirimir al vencedor de la segunda versión del concurso "Osorno Asador", durante la tarde de ayer en un Parque Chuyaca que se llenó de espectadores, muchos de los cuales se transformaron en comensales.
La tarea era "compleja": había 120 asados de estomaguillo que degustar.
Vencedores
Al momento de anunciarse el primer lugar, los ganadores gritaron un par de justificados chilenismos y se abrazaron de felicidad a un costado del escenario principal.
Se trató del binomio compuesto por osorninos: el ingeniero Antonio Kindley y su amigo, el funcionario de Gendarmería, Ányelo Castro, ambos de 33 años.
El par de muchachos, que recibieron un premio de un millón y medio de pesos, precisaron que fue la primera vez que participaron en el concurso y que no esperaban este destacado lugar.
Asimismo, compartieron la razón de su triunfo en conversación con El Austral. "El secreto es súper simple. Dejamos 24 horas antes la carne sumergida en leche entera, dos litros, tapada. Después la sacamos un rato antes, para que se ventile. Antes de colocarla al palo, le pusimos sal y ají cacho de cabra. En seguida, la pusimos con carbón y madera nativa. Por último, la rematamos con un poco de harina tostada", reconoció Kindley.
Ante la consulta de cómo aprendieron esta receta, indicaron que es una absoluta creación de ellos. Prácticamente hicieron una analogía de la leche y la carne, aunque también revisaron algunas preparaciones que tuvieran que ver con ambos productos, tan típicamente relacionados con Osorno.
El segundo lugar fue para el concursante Javier Poblete, quien se llevó 700 mil pesos. Cerró el podio José Chaparro, quien obtuvo 500 mil de la moneda nacional. Ambos ganadores también tomaron con bastante felicidad el lugar obtenido.
Jurados
De los cuatro jurados que participaron en esta ocasión, dos se repitieron el plato: Bernardo Borgeat y Yann Yvin. Los dos estaban felices de volver a la ciudad y al Chuyaca.
Borgeat dijo que "estoy muy contento de poder estar en este concurso muy importante y que ha ido creciendo (...) y los participantes de este año han traído técnicas más novedosas, que no las habíamos visto el año pasado, algunos con ahumadores y otros con algunos aliños más extraños".
Por su parte, el francés Yann Yvin, con su particular acento extranjero y francoparlante, dijo que este certamen "no tiene nada de 'miegda', por lo que para Osorno es un orgullo, ya que este es un evento para compartir. Es lo que más destaco, porque los asados son para estar con los amigos, son para juntarnos. Cuando veo esta fiesta con mucha gente, de verdad, me hace vibrar el corazón".
Claves
Para el otro jurado, el chef local José Luis Dolarea, la clave del triunfo fue "que siempre en este tipo de concurso, todo pasa por el valor agregado, pero respetando la carne. Mucha gente quiere ponerle algo adicional, pero se olvida que la carne es la que se tiene que lucir. Entonces, cuando se busca el equilibrio entre lo adicional y respetando el sabor de la carne, es lo que marca la diferencia", manifestó.
Novillo
Una de las particularidades del concurso de este año fue que desde el sábado comenzó a asarse un novillo entero, que finalmente terminó de prepararse ayer.
Los afortunados que lo probaron, que no fueron pocos, dijeron que era un "verdadero manjar de los dioses".
millón y medio de pesos se llevó la pareja ganadora de la segunda versión del "Osorno Asador". Un
participantes compitieron por los tres premios que tuvo el certamen. Todos de muy alto nivel. 120