Pareciera que los chilenos, y en general los seres humanos, hemos ido perdiendo la capacidad de escuchar; todos creemos tener la verdad en nuestro ADN y por eso no hay necesidad de escuchar la postura de otros. Esto no es menor y ha significado que se ha ido perdiendo el respeto por todo tipo de autoridad (incluida la de los padres), la que debe asumir un rol destacado en la conducción, orientación y ejecución de múltiples acciones. Sin un orden establecido y sin dirección, a los seres humanos, ya sea individual o grupalmente, se nos dificulta avanzar y desarrollarnos.
¿Qué ha pasado en Chile y en el mundo en general para llegar a esta situación? Me atrevo a señalar que esto ha pasado porque hemos ido asumiendo una cultura de muchos derechos, que se nos ha ido concientizando que ese es el objetivo principal de nuestro paso por la tierra. Lamentablemente, esos derechos se remiten a aspectos más bien materiales, de acceder a bienes de consumo o de bienes durables, cuestión que está muy bien, pero sin olvidar otro tipo de derechos que trascienden a los señalados.
Es bueno escuchar; siempre oír a personas con autoridad para ello, nos hace bien para provocar cambios positivos, primero en cada uno de los que reciben ese mensaje y por efecto multiplicador, en el medio en el cual nos desenvolvemos. No hay otro secreto, los cambios en la sociedad deben necesariamente partir por uno mismo.
Los chilenos tenemos en los próximos días una gran oportunidad de escuchar un gran mensaje, el mensaje que generosamente nos trae el Papa Francisco que le exige un viaje de 14.425 kilómetros. Como habitantes de Osorno, tenemos el privilegio de desplazarnos sólo 250 kilómetros para encontrarnos con el Pastor de la Iglesia Católica en el mundo y escuchar su palabra, su mensaje. A cambio nos pide sólo nuestra disposición y buena voluntad para acoger su palabra. Independiente de nuestra religión, de nuestra postura política y en general sobre la vida, siempre hace bien escuchar y, más aún escuchar la voz del Papa que se hará sentir el próximo miércoles 17 de enero desde la Región de La Araucanía.
Sergio Hermosilla Pérez