Fue casi como en la primera mitad de la década del '90, en una época gloriosa del Provi en Primera División y, además, siendo animador de recordados campeonatos nacionales. Años en que la camiseta blanca con vivos azules, amarillo y rojos, era un panorama habitual en los compactos de goles por la televisión y que todo el mundo podía ver, antes de que fueran privatizados.

Y en esa línea, apelando a la nostalgia, con un buen marco de público en el Parque Schott, el miércoles se enfrentaron las escuadras de Osorno y U. de Chile, en su variante de "todos los tiempos".

El resultado fue anecdótico, sin embargo, favoreció al Provi por la cuenta mínima, en un encuentro que hasta en su camiseta evocaba mejores tiempos, ya que era una réplica noventera.

Un bálsamo para la hinchada taurina, que pudo revivir en parte un gran pasado, a la par de un presente triste, tras la consumación del descenso del plantel profesional.

El encuentro fue organizado por la Corporación Deportiva del club y contó con ayuda de la Municipalidad y otros auspiciadores.

personas aproximadamente, llegaron al Parque Schott a ver el encuentro. 5.000

a la misma hora el plantel profesional estaba despidiéndose de Segunda. Paradoja