Paola Rojas

En el primer lugar de los Chardonnay del país se ubicó el vino de producción local Ribera Pellín, que se elabora en el sector de Pilmaiquén, al lado sur del río del mismo nombre en la comuna de San Pablo, una de las nuevas áreas privilegiadas del país para producir determinadas cepas y vinos, principalmente Pinot Noir y otras variedades de vides blancas.

En este caso la guía creada por el periodista especializado Patricio Tapia, la cual indica la calidad de los vinos año a año en el país, calificó con 94 puntos al Chardonnay local y le otorgó la calidad de Vino Revelación del año 2017 en la publicación, cuya finalidad es orientar a los amantes de este producto en cuanto a lo que ofrece el mercado nacional.

En el emprendimiento vitivinícola participan tres socios, uno de ellos es el dueño de los terrenos, otro es quien entregó su basta experiencia en el rubro, además del gerente general del proyecto.

Revelación del año

El gerente general de la viña, Rodrigo Moreno, explicó que luego de un proceso donde se van probando los vinos, que comienza en septiembre, este mes es cuando se entregan los resultados que aparecerán en la nueva guía, donde el vino local logró 94 puntos de un máximo de 100.

Aclaró que como cada año las condiciones de producción cambian y los puntajes también, apareciendo su producto en la edición de 2018 que estará disponible en diciembre. Allí aparecerá este Chardonnay como el vino revelación del año en su tipo.

Moreno señaló que desde 2013 postula este vino a la guía Descorchados, apareciendo desde 2014 hasta ahora.

El Chardonnay se hace desde el 2013 en la viña de San Pablo, pero según Moreno, en la primera incursión en el certamen Tapia respondió que le faltaba tiempo.

"Ese mismo vino que me dijo que le faltaba ahora le encantó, de hecho lo tuiteó cuando lo estaba probando, le tomó una foto y señaló 'estoy probando un vino de San Pablo a 900 kilómetros al sur de Santiago. Un Chardonnay simplemente de otro planeta'", expresó el productor.

Moreno explicó que esta iniciativa es un concurso, ya que los vinos compiten, pero a diferencia del sistema de medallas solo participan las grandes viñas por los costos que implica.

Pero este no es el único logro de la viña durante este año, ya que en marzo el reconocido crítico vitivinícola británico, Tim Atkins, eligió al espumante de San Pablo como el mejor de Chile, otorgándole 95 puntos que lo ubicaron en el primer lugar de su publicación.

"Vamos a dedicarnos harto al espumante, lo haremos todos los años y los vinos cada dos o tres, dependiendo del clima, del calor, de cómo venga la fruta y con eso iremos tomando las decisiones", explicó.

Moreno aseguró que antes de sacar las producciones todos los años, apuestan solo por la calidad del producto.

Blancos y tinto

Gracias al trabajo realizado por esta viña y los pioneros en la zona, la viña Coteaux de Trumao, perteneciente a los hermanos Christian y Olivier Porte y ubicada en la localidad del mismo nombre (valle del río Bueno), es que Osorno pasó a formar parte del mapa vitivinícola nacional, que antes llegaba solo hasta la zona del Itata, donde incluso tiene denominación de origen.

La producción de la viña que elabora el Chardonnay comenzó a formarse el 2000 y no fue sino hasta 2009 cuando dieron el paso para hacer un vino y que la gente lo probara.

"Antes eran puros experimentos, dimos con los manejos de la viña, porque uno se demora un año en hacer un experimento", manifestó.

Precisó que sus productos por ahora son los vinos tranquilos: el Chardonnay, blancos de la zona (ensamblaje) y Pinot Noir (tinto).

Los vinos se encuentran en lugares especializados, como el restaurante Terruá o se obtienen de trato directo. La idea es que estos productos se vendan dentro de la Región y que aquí existan nichos donde se vendan productos de la zona como el blanco o el mismo Chardonnay, que son originarios de zonas de Francia con condiciones muy similares a las que existen en la provincia.

Rubro incipiente

Patricio Mejías, agrónomo y experto en temas vitivinícolas del Inia Remehue, explicó que el Chardonnay es una cepa blanca que se cultiva principalmente en climas que no son calurosos, suelos con buen drenaje sin excesos de agua, que requiere un gran cuidado sanitario, debido a que es muy susceptible al oidio, que es una enfermedad fungosa.

El experto detalló que aparte del Chardonnay, las cepas que se desarrollan bien en la zona son el Pinot Noir y otras blancas en menor medida.

Adelantó que con el cambio climático, en el verano se conseguirá tener un clima suficiente mente seco como el que necesita la uva para madurar, pero por el momento las uvas deben sacarse lo antes posible, lo que permite tener una cosecha que sirve principalmente para fabricar espumantes.

Mejías señaló que de acuerdo a los registros del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), actualmente la superficie en la provincia con plantaciones de uvas alcanza las 6,3 hectáreas, concentradas en las comunas de San Pablo y San Juan de La Costa.

Añadió que en el caso de las vides, se trata de un rubro más restringido por el momento, ya que su rentabilidad es menor.

El investigador indicó que probablemente las compañías que producen vinos en la zona centro-sur invertirán, en un futuro no muy lejano, en la Región de Los Lagos, si es que los productores que ya están haciendo vitivinicultura, junto con la investigación que se realice, lleguen a entregar resultados satisfactorios.

En la Región actualmente hay seis viñedos que producen vinos, de los cuales cuatro lo hacen de forma comercial, mientras que los otros dos aún están en etapa de experimentación.

"Vamos a dedicarnos harto al espumante, lo haremos todos los años y los vinos cada dos o tres".

Rodrigo Moreno, Gerente general viña Ribera Pellín de San Pablo"