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El "desordenado" trayecto hacia el rubro gastronómico en Mackenna

URBANISMO. Si bien la avenida, entre el Cruce Lynch y Colón, creció como un barrio residencial, donde destacaban enormes casonas, en las últimas dos décadas vivió un giro comercial que partió con las automotoras, siguió con el rubro agrícola y que ahora derivó en una variada oferta de cafés, pub y restaurantes. Si bien hay posturas disímiles sobre su ordenamiento, comerciantes y expertos coinciden en el nuevo "aire" que adquirió la arteria.
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Ferreterías, pubs, restaurantes, un café, varias automotoras, estación de servicio, un banco, un nuevo centro de eventos, además de viviendas y hasta casas patrimoniales, son sólo una parte de las múltiples caras con las que la avenida Mackenna espera a quienes transitan por esta enorme arteria que cruza la ciudad, adornada por una fresca alameda con juegos en medio de sus brazos entre el Cruce Lynch y calle Colón.

Este tramo original, al que de a poco se le ha ido sumando la nueva vía sur hacia el poniente, desde sus inicios tuvo un marcado acento residencial, pero que en al menos los últimos 20 años se ha ido modificando de forma vertiginosas, convirtiéndose en uno de los sectores más dinámicos de la ciudad en cuanto a la generación de nuevos locales y servicios.

Las automotoras fueron las primeras en ver una oportunidad en los espaciosos terrenos que fueron dejando antiguos negocios, como la Fábrica de Arados Schulz.

Luego fue el turno del rubro agrícola, con ferreterías, farmacias veterinarias y venta de neumáticos. Y en la última etapa, que se enmarca aproximadamente en la última década, fue el despertar de la gastronomía, con restaurantes, pub, cafés y centros de eventos, otorgándole un ambiente más bohemio, un símil en menor a escala de calle Irarrázabal en Santiago o Plaza Ñuñoa, pues también se le da un énfasis al valor arquitectónico de las construcciones.

Buena mesa

Precisamente Nicolás Pacheco es el dueño y chef ejecutivo del pub Barrio Lindo, ubicado a la altura de Zenteno, frente al restaurante de comida china Chung Hwa. El profesional gastronómico explicó su interés por instalarse en Mackenna: "queríamos salir del epicentro (de la bohemia) que es Portales; primero, porque encuentro que es un poco peligroso; y segundo, porque el público al que apuntamos quiere estar un poco más tranquilo", detalló sobre su determinación.

"La apuesta es que la avenida empiece a crecer en algún momento como sector gastronómico. Ahora se están abriendo nuevos locales y estamos hablando con otros dueños para seguir potenciándolo en esa dirección", complementó el joven empresario de este pub, que viene a sumarse a la oferta que ya desde hace varios años entrega la Taberna Pirata en Mackenna al llegar a Ecuador.

Además están los restaurantes Chung Hwa y el Fogón Mar y Tierra, que tienen una data de tres y un año, respectivamente. En su caso también se ha sumado una atractiva oferta. Patricio Azócar es el chef ejecutivo y dueño de Café Nómade, ubicado en la esquina de Mackenna con Eduviges.

Según explicó, dicho local está funcionando hace dos años. "Nos vinimos pensando en la nueva imagen que está tomando Mackenna, donde si bien todavía quedan algunos tramos por terminar, creo que el tema gastronómico y bohemio de Osorno viene para acá", detalló Patricio.

Para este empresario, el giro comercial del rubro automotriz al turístico se debe principalmente a la remodelación del bandejón que ha permitido reflotar un paseo familiar, peatonal y deportivo con la ciclovía y las máquinas de ejercicios.

"La ubicación es privilegiada porque pasa la locomoción, tienen terraza, hay estacionamientos sin costo, lo que es una ventaja comparativa con los locales del centro. Eso es algo que los propios empresarios gastronómicos están notando. Por eso están abriendo un local de eventos y una hostal al frente, además está el cementerio y el liceo cerca", plantea Azócar.

Para el académico y arquitecto del Departamento de Arquitectura de la Universidad de Los Lagos, las ciudades son grandes elementos orgánicos que crecen día a día.

"La ciudad obedece a ciertas complejidades programáticas, que son el resultado de su desarrollo económico productivo, que por lo general está un par de pasos más adelante que los instrumentos de planificación y de ordenamiento territorial", explicó el experto.

De hecho, planteó que estos servicios del Estado son lentos, burocráticos y poco eficientes cuando se trata de "activar y generar barrios de manera sostenible en el tiempo y el espacio de la ciudades".

Uno de los principales instrumentos de planificación es el plan regulador, que si bien puede direccionar la definición de un barrio en torno a su uso industrial, habitacional y/o comercial, no puede determinar u orientar el tipo de empresas que se van a emplazar, ya que responde a la lógica de la oferta y demanda del libre mercado.

"Hoy día debemos diseñar instrumentos de planificación de complejidades ágiles y eficientes que se articulen desde las comunas, provincias e incluso regiones y viceversa. Así visualizaremos barrios con identidades patrimoniales y de otras como sustentables, respetuosos de los habitantes y del medio ambiente", detalló el académico.

Alto impacto

Sin embargo, pese al desorden o la falta de instrumentos de planificación para orientar el destino de un sector, pensando en el turismo por ejemplo, el arreglo de la avenida fue sin duda una iniciativa pública que cambió el panorama comercial de Mackenna.

Así lo sostuvo el alcalde Jaime Bertín: "En Santiago todo el mundo sabe que en la calle 10 de Julio están los repuestos de vehículos; eso es monótono. En cambio, encuentro espectacular tener la diversidad de un espacio donde crece todo espontáneamente o como la gente estime conveniente. Puedes ir al banco y al lado tienes un café, un restaurante o una automotora".

Asimismo, el jefe comunal sostuvo que el plan regulador no orienta una avenida en el sentido de que vaya a ser exclusivamente de restaurantes o automotoras.

"Lo único que clasificamos nosotros son las actividades macro; en el caso por ejemplo de un barrio industrial, no podría tener viviendas cerca o comercio. Eso vemos nosotros, pero qué tipo específico, no", remarcó Bertín.

Agregó que otro aspecto que podrá variar el destino de la calle Mackenna es su próxima anexión con el nuevo brazo por Ramón Freire, lo que seguramente hará que muchos más autos transiten por esta vía.

"Esfuerzos atomizados"

Frente a ello, el urbanista Hugo Fuentes sostuvo que si bien la transformación de Mackenna ha sido positiva, considera que igualmente es criticable tanta espontaneidad y que debería haber planes más elaborados para consolidar una ciudad en cuanto a su identidad.

"Estas cosas de pensar una ciudad a nivel general pasa por un instrumento ordenador como el plan regulador, pero a nivel de planificar barrios por ejemplo hay instrumentos como los seccionales, que son mucho más ágiles y eso permite definir un barrio", planteó el arquitecto.

Sin embargo, advirtió que el problema de fondo es que los esfuerzos se llevan a cabo "de manera atomizada", por lo que no se coordina con otros barrios o tejidos urbanos de la ciudad.

Por ejemplo, respecto al bandejón central, opinó que "me parece que ahí se debió haber pensado mejor el espacio público. Hoy día parece una cosa media decorativa. El problema es que hacemos las cosas demasiado atomizadas, pero aun así es una de las arterias más hermosas de Osorno desde el punto de vista urbano", recalcó el académico.

En lo que están de acuerdo los entrevistados, es que entre los aspectos a ser mejorados, se cuenta la posibilidad de generar estacionamientos subterráneos y desarrollar el turismo patrimonial.

Ello, según los locatarios, potenciaría la oferta gastronómica y de la bohemia, atrayendo a nuevos emprendedores a un barrio que aspira convertirse en una nueva alternativa para los osorninos.

"El orden programático ha ido cambiando con el tiempo. Originalmente había una serie de automotoras y venta de neumáticos que fueron arrendando o comprando estas casas grandes, pero ahora la cosa se está reprogramando por sí sola. Hay más locales de gastronomía por ejemplo. Bajo el concepto de una ciudad sustentable y caminable tendrían que ir saliendo las automotoras de ahí", cerró Fuentes.

"Nos vinimos pensando en la nueva imagen que está tomando Mackenna, donde si bien todavía quedan algunos tramos por terminar, creo que el tema gastronómico y bohemio de Osorno viene para acá"

Patricio Azócar, Dueño Café Nómade"

Al tradicional restaurante de comida china Chung Hwa que hace más de dos año se radicó en esta zona, hace poco el Fogón Mar y Tierra se sumó para ofrecer platos típicos.