De acuerdo con lo que ha revelado una investigación del Instituto Nacional de Derechos Humanos (Indh) en diversos centros del Sename, casi el 50% de los niños sigue sufriendo vulneraciones. El organismo visitó entre febrero y abril de este año 171 centros en todo Chile, que comprenden el 83% del total de la red del Sename, para entrevistar a niños, niñas y adolescentes que están bajo el resguardo de ese organismo, concluyendo que la mitad de ellos sufre maltrato al interior de los centros, como abuso y explotación sexual, maltrato físico o sicológico, descuido o trato negligente.

Desde hace años que el Sename enfrenta fuertes críticas, sin que hasta ahora se hagan los cambios que se requieren con urgencia. Los primeros cuestionamientos surgieron tras la muerte de Lissette Villa en un centro de la comuna de Galvarino, en abril de 2016 y revelaron que el panorama al interior del organismo -desde hace años criticado-, era de mayor magnitud que lo que se creía.

Considerando los últimos acontecimientos, pareciera que a Sename lo persiguen los escándalos y ese juicio tiene bastante asidero, pero el país no puede permitir que miles de menores continúen padeciendo abandono ante la incapacidad que han mostrado sus familias y el Estado en otorgarles la protección necesaria.

Y con razón el gobierno ha argumentado que no se le puede culpar de todo, porque ha habido una secuela de incumplimientos en las últimas administraciones. Sin embargo, ya basta de explicaciones y de acusaciones, porque es necesario tomar con urgencia las medidas para reorientar el Sename. Chile reconoció la Convención sobre los Derechos del Niño, mediante una ley publicada en el Diario Oficial del 27 de septiembre de 1990.

Los desafíos son muchos, pero no basta con que el Estado haya ratificado los postulados de la convención internacional ni con celebrar el Día del Niño una vez al año. Lo que se requiere es un compromiso como sociedad, para asumir que los niños y niñas son sujetos con derechos y por lo tanto no pueden ser vulnerados.

La educación superior técnico profesional (ESTP) tiene por propósito formación de personas para el mundo del trabajo e independientes de su modelo educativo, las instituciones buscan satisfacer las necesidades del mercado laboral.

Lo anterior suena coherente si conocemos las necesidades actuales y futuras del mundo del trabajo, lo que hasta fines del siglo XX fue bastante predecible, pero entrando a éste siglo, nos encontramos con que algunos roles ya desaparecieron y otros desaparecerán, en consecuencia ¿Qué hay que enseñar (aprender) para formar los técnico y profesionales del siglo XXI?.

El Foro Económico Mundial estima que de aquí al 2020 se perderán 5 millones de puestos de trabajo por la tecnología, que impactará principalmente a conductores y operadores de máquinas.

Sin embargo ésta reducción de puestos de trabajo generará oportunidades en otros ámbitos, como analistas y programadores del internet de las cosas o arquitectos de nuevas realidades tecnológicas (como la virtual) y para científicos y analistas de datos. Dado lo anterior, ¿Cómo se forma los técnicos y profesionales del futuro?

Lamentablemente la educación no tendrá oportunamente los perfiles requeridos desde el mundo del trabajo, por lo que será necesario romper los paradigmas actuales. La ESTP deberá, en consecuencia, formar para principalmente "aprender a aprender", deberá centrar sus programas para desarrollar capacidades en los estudiantes que los haga profesionales flexibles y conscientes de que deberán reciclar sus conocimientos cada cierto tiempo, para adquirir nuevas habilidades que les permitan ocupar las vacantes de los nuevos empleos.

Las competencias actitudinales serán fundamentales en la formación, pero no exclusivas. Los principios, fundamentos y leyes que rigen cada disciplina, seguirán siendo las bases fundamentales que permitirán adquirir con facilidad nuevos conocimientos o nuevos usos de aquellos conocimientos antiguos, tal vez en formatos distintos a los libros que conocemos, pero con la misma vigencia.

Ramón Rubio

director ejecutivo AIEP Osorno.

30 años | 17 de julio de 1987

Estricto control a escuelas públicas de la provincia

En la provincia de Osorno no queda ninguna escuela en el sector estatal. Todas han pasado al área municipalizada. Las dos últimas, que correspondían a las que funcionan en las penitenciarías de Osorno y Río Negro, también han quedado bajo administración de la corporación edilicia. La disposición rige desde el año pasado.

20 años | 17 de julio de 1997

Preocupante aumento de hurtos en Osorno

16 robos y diez hurtos, de ellos dos con violencia, hubo entre el 1 y al 10 de julio en Osorno, lo que evidencia un preocupante promedio de casi dos acciones delictivas diarias, de acuerdo con las estadísticas que maneja la Primera Comisaría Urbana de Carabineros. Las cifras, en igual periodo de 1996, fueron 12 robos y 10 hurtos.

10 años | 17 de julio de 2007

Sano y salvo apareció ayer esquiador perdido

En buen estado apareció a las 11.45 horas de ayer, tras cuarentena y dos horas de cara a la muerte, el joven coyhaiquino Marco Andrés Sandoval de 25 años, al extraviar la ruta de regreso al complejo de Antillanca, cuando esquiaba en los faldeos del cerro Huaique tras ser sorprendido por nevazones y densa nubosidad.