Entre partituras y cuentas: el complejo presente del histórico Carolina Klagges
CONSERVATORIO. La irrupción de nuevas academias de música, la falta de apoyo externo y los gastos propios de funcionamiento han mermado sus arcas. Sin embargo, descartan su cierre.
Con 85 años de recorrido y un numeroso contingente de alumnos que ha egresado de sus aulas, el conservatorio Carolina Klagges de Osorno, ubicado en calle Conrado Amthauer 874, vive momentos complejos de financiamiento, pero que sin embargo, no son razón para un eventual futuro cierre, según enfatiza el director del recinto, Claudio Broussaingaray.
Según expone este profesor de piano, una de las razones sería la explosiva aparición de nuevas academias de música: "Estamos cobrando hace tres años lo mismo, no hemos subido la tarifa y no me parece caro. En Santiago, Valdivia o en Temuco, los precios son infinitamente más caros (...) no podría juzgarlos, tienen una base, pero les falta mucho en cuanto a pedagogía. A lo mejor, no tienen la experiencia que tenemos nosotros".
A este problema se suma además la falta de financiamiento, que antes era provisto por diversas instituciones, específicamente la Municipalidad de Osorno y la Universidad de Los Lagos. Sin embargo, hace cinco años que ya no se recibe un solo peso de otros organismos.
¿qué pasó?
En el caso de la Universidad de Los Lagos, este plantel resolvió seguir caminos propios, creando su propia escuela y orquesta denominada Academia de Artes y Cultura, dirigida por Gladys Moreno.
Al respecto, Moreno agrega que "al tomar la determinación de formar esta academia, obviamente que iba a tener un programa de trabajo interno, hacia la comunidad universitaria (…) no había un vínculo directo con el Carolina Klagges y la universidad. Solo era un apoyo económico".
Fue un hito de separación que se suma a algunos compromisos que nunca se materializaron entre el conservatorio y la Municipalidad de Osorno. El director, Claudio Broussaingaray, rememora que antes el gobierno comunal entregaba aportes al establecimiento e incluso les ofrecieron trasladarse a una casona que finalmente fue demolida.
Un ofrecimiento que aún persiste, según el alcalde de Osorno Jaime Bertín, aunque con algunas condiciones: "como municipio no tenemos ningún problema en hacernos cargo del conservatorio, ellos tienen que simplemente acercarse, hacernos la propuesta, decirnos cuánto cuesta y hacer un convenio, algo que nos una, pero con la única diferencia de que pasaría a llamarse Conservatorio Municipal Carolina Klagges".
Una denominación que desde la institución están dispuestos a aceptar, salvo que se respete la actual estructura interna del histórico conservatorio. Aunque tienen algunas dudas al respecto: "mientras alcance para el arriendo de esta casa, todo bien, pero qué es lo implica, qué estatus tendremos, el hecho de que tenga denominación municipal no es ningún inconveniente, mientras mantengamos la tarifa, lo que entra en dinero para mantener también a los profesores", precisa Broussaingaray.
Costos
Mantener el funcionamiento del conservatorio es la parte más compleja. Cada alumno paga una suma de $55 mil mensuales en promedio. Hay 45 estudiantes inscritos que dejan en caja $2 millones 500 mil, única entrada mensual para el recinto.
De esta cifra se van 450 mil pesos en el arriendo de una casa que no cuenta con calefacción central, por lo que se debe recurrir a diversas estufas eléctricas. Sumado a las bajas temperaturas invernales, que deben calefaccionar un recinto derechamente frío, se gastan 145 mil pesos en energía.
"No se compran estufas a gas porque condensan humedad. Al ocurrir esto, dañan la madera y la vida útil de los instrumentos que tenemos, sobre todo los pianos", agrega Claudio Broussaingaray.
Y eso no es todo: la mantención de los pianos, que se debe realizar por lo menos una vez al año, cuesta 150 mil pesos. Habiendo cinco de estos, la suma asciende a un gasto de $750.000 que aún no se realiza. De momento, estas revisiones son hechas por los mismos profesores del conservatorio.
Además, se deben considerar los pagos a los profesores y otros gastos. "Estamos trabajando de una forma bastante quijotesca", indica el director.
Concierto en el cav
Ajenos a todos estos avatares, los más pequeños alumnos del Carolina Klagges se presentaron durante la tarde de este martes en el auditorio del Centro de Atención al Vecino de la Municipalidad de Osorno, en calle Bilbao.
Se trató de un concierto de mitad de año, de los estudiantes de la profesora del conservatorio Nubia Seguel.
La docente cuenta que una niña osornina de 12 años ya comienza a destacar. Se llama Paz Méndez, un talento que se podría sumar a la larga lista del conservatorio.