Bladimiro Matamala
La joven kinesióloga Victoria Hinostroza, nacida y criada en la localidad de Costa Río Blanco, titulada en la Universidad San Sebastián y con diplomado en hipoterapia en la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, cree ciegamente que para sanar cualquier enfermedad es necesario conocer primero cómo está nuestro cuerpo, nuestro corazón y alma.
"Sanar con caballos es exactamente eso, comprender que para avanzar en la vida tenemos que comenzar por ventilar emociones, quitarnos esas capas de dolor y sufrimiento y estar ligeros y brillantes", sostiene. En ese sentido plantea que la hipoterapia es la disciplina de tratamiento kinésico en la que se utiliza el caballo como ayuda terapéutica activa, donde el tratante se encarga de supervisar su ejecución según el estado del paciente.
Convencida de todo aquello, Victoria Hinostroza contó que con la ayuda de sus padres Víctor y Mónica, construyó e implementó las instalaciones necesarias para desarrollar un centro de hipoterapia, precisamente en Costa Río Blanco, ubicada a unos 6 kilómetros de la villa de Riachuelo y a 20 de la ciudad de Río Negro.
Detalles del proyecto
Allí dio vida al "Centro de Hipoterapia Andaluz" (fonos 983568795 y 944707051) de aproximadamente 13 hectáreas, donde se entrelaza una amplia zona verde con el bosque nativo y a escasos metros corren las aguas cordilleranas y cristalinas del río Blanco.
Cuenta con picadero techado y otro abierto circular, sala de recepción, estadía, evaluación y tratamientos para los usuarios. Y para las actividades terapéuticas mantiene los caballos suficientes, mansos, fieles y obedientes. Y por supuesto el material específico, riendas de ejercicios, balones, aros, varas, bandas elásticas, cascos, etcétera.
"Este centro está abierto y disponible para todas las edades, pero como amo a mi familia, a mis caballos y a los niños, quienes acaban de inaugurar nuestras instalaciones son los 12 alumnos y alumnas del Programa de Integración Escolar (PIE) de la Escuela Río Negro, que presentan algunas necesidades educativas permanentes y transitorias, los que asisten los lunes y miércoles, que según advierto, hasta ahora están fascinados y quieren continuar hasta diciembre", comenta.
Beneficiados
Tanto la directora de la Escuela Río Negro, Susana Silva, como la coordinadora del PIE la especialista Ariela Valderas, coincidieron en valorar el aporte del Centro de Costa Río Blanco.
"Debemos comentar primero que en 2016 nos ayudó mucho en esto el Regimiento Arauco, del cual estamos muy agradecidos, pero este centro marca la diferencia en el sentido que la atención para cada niño es personalizada y en este primer mes ya hemos notado algunos avances. Ha sido una buena decisión la de nuestro Daem de utilizar estos servicios profesionales de la hipoterapia, que además son locales y cercanos", expresaron.
La directora añadió que los niños se envían desde la escuela a las 14 horas en movilización especial a sus sesiones y retornan sus hogares a las 16,30, contentos y felices.
Susana Silva agregó que la hipoterapia es un complemento a los programas de atención, rehabilitación y educación que brinda el plantel, ahora mediante la intervención del caballo, con el fin que los educandos logren una mayor autonomía en la vida diaria. Quienes asienten en calificar como un acierto la hipoterapia en Río Negro, fueron los padres de los menores.
Así por ejemplo, Jacqueline Soto, madre de Cristóbal de 7 años, dijo que la vida de su hijo "hoy es distinta". Por otro lado, Verónica Vera, mamá de Yaritza (8 años), admitió que ha bajado un poco la hiperactividad de la niña y que espera ansiosa cada sesión con los caballos.
Ximena Vera, madre de Alexis de 6 años, también opinó que estoy "muy agradecida de esta oportunidad que nos da la escuela y esperamos que continúe el programa porque le ayuda y sirve a los menores. Los saca de su rutina y dicen que aman a su tía Victoria", narró.
Como se aprecia en este corto inicio del "Centro de Hipoterapia Andaluz" de Costa Río Blanco, los niños -a partir de ahora se espera sumar adultos-, reafirmarán sus lazos con el ambiente natural, siendo otra de las ventajas del local su ubicación.
En el proyecto la terapeuta es una persona formada específicamente en el área de la salud kinésica y especialista en terapia con caballos, que luego de titularse como tal, retorna a casa para servir a su comunidad.
Trabaja con pacientes con patologías como Síndrome de Down, autismo, parálisis cerebral, hiperactividad, y déficit intelectual en todos sus grados. Cabe destacar que a los adultos mayores también se les permite esta modalidad de la hipoterapia para estimular su funcionalidad y autonomía.
Hipoterapia
Según detalló la kinesióloga, existen distintas variedades de esta disciplina: "Se cuenta la hipoterapia básica, donde la persona está sentada sobre el caballo, dejando que éste le transmita sus movimientos multidimensionales; asimismo existe la hipoterapia combinada, donde el paciente recibe los estímulos del caballo y realiza los ejercicios específicos designados por su kinesiólogo, según el diagnóstico; y por último está la hipoterapia avanzada, donde el paciente es capaz de llevar las riendas", comentó.
hasta las 16.30 son las sesiones de los alumnos, los cuales luego retornan a sus hogares. 14 horas