Barberías suman adeptos entre los osorninos con nuevos estilos y cortes
TENDENCIA. Hombres y también mujeres se atreven cada vez más a salir de lo común para tener un aspecto moderno y rebelde. El corte preferido del momento es el fade o rebaje en "degradé", que es muy usado por futbolistas y artistas.
Superficialidad, preocupación o vanidad... llámele como usted quiera, lo cierto es que las barberías están en boga al rescatar una antigua tradición con toque d frescura. Por lo mismo estos locales cada día ganan más adeptos entre jóvenes y adultos osorninos, que cansados de las prestobarbas, los cuellos irritados y los cortes tradicionales, han decidido acudir con los especialistas en el acicalamiento para innovar el look.
Las diferencias entre las tradicionales peluquerías y las nuevas barberías no pasa sólo por el tratamiento del vello y los materiales -donde destaca la navaja-, sino porque apunta a un público masculino, donde la música, el estilo y la decoración del espacio distan mucho de una peluquería unisex.
"sebest barber king"
Sebastián Barrera (23) es barbero profesional, tiene dos capacitaciones, una en Santiago y otra en La Serena, donde compartió con HighClass, uno de los próceres en la materia. Su local se llama Sebest Barber King y está en Francisco Bilbao a la altura de Cochrane.
"En el mundo de la barbería se trabaja al detalle, sólo varones, muy pocas damas. A ellas se les hace más diseño, mientras que en hombres se trabaja el perfilado de la barba, corte de pelo moderno y también diseño al detalle", explica Barrera, que empezó con este emprendimiento hace un año.
Aquí el corte cuesta entre $10 mil y $15 mil, mientras que todo lo relacionado con la barba vale $5 mil. Aunque para algunos pueda parecer caro, lo cierto es que el local de Sebastián se llena y prácticamente hay que pedir hora.
Según los estudios adquiridos por el estilista, las barberías vienen de la era de los faraones egipcios para quienes el vello facial era considerado impuro, por lo que solicitaban a hombres vinculados a la religión que los afeitasen.
Clayton Mazzochi, bartender brasileño radicado en Osorno, dice que "Sebastián está cambiando el estilo de los osorninos, como más fashion. Es bonito lo que hace porque cuida la belleza de uno y la estética que es muy importante. Yo quiero algo moderno, pero lo dejo a su gusto, porque le tengo confianza. Hoy día la degrades es lo que más se lleva".
Local 41 - vida loca
Jonathan Bahamondes (25) y Emanuel Fuentes (18) trabajan como barberos en el local 41 de la galería Rombocol. Vida Loca se llama el espacio, donde también se hacen tatuajes. Aquí llegan muchos jóvenes, sobre todo escolares a pedir el famoso "fade" o degradado que está inspirado principalmente por músicos y futbolistas como Arturo Vidal, Eduardo Vargas y Alexis Sánchez.
Ambos, en su momento, aprendieron a cortar el pelo en el Ejército, mientras cumplían con su servicio militar, ahora se han especializado en esto.
"Antes el tema era más como los pokemones, con los pelos para un lado o con visos, pero ahora (la moda) es el corte degradado o low como le dicen, que en realidad es otro tipo de corte", cuenta Fuentes.
"Aquí como tenemos internet wi-fi nos vamos fijando en los últimos cortes de los futbolistas", dice Bahamondes, que lleva ocho años desarrollando este oficio que aprendió cortando cabellos y bigotes a cabos y superiores del Ejército.
"Algunos me pedían la partidura para el lado que se profundiza con navaja o máquina para marcar bien la línea y hacer que se vieran más formal", agrega Jonathan.
Por otra parte, Fuentes comenta que si bien los escolares son los que más concurren, cada vez más adultos y mujeres se están atreviendo con los rasurados en degradé. Los precios van entre los $5 mil y $3 mil para cabello y barba, mientras que cejas y líneas van entre los mil y 2 mil pesos.
Galería prat
En ese sentido, Anthony Valentino, de Santiago, quien tiene una barbería en la comuna de La Cisterna y hace siete meses abrió un local en la Galería Prat comenta que "acá viene más gente de edad que se retoca harto la barba, que viene por un trabajo más elaborado en ese sentido. Acá vienen abogados, doctores, todo tipo de caballero".
Sobre el balance en estos primeros meses, Anthony explica que el éxito se debe en parte a que "acá había un barbero que antiguamente era bien conocido, era Marco el barbero, un canadiense, él se volvió a su país y decidí venir para acá y la verdad que me ha ido muy bien", ya que la clientela que se atendía con el norteamericano continuó su tratamiento con él.
"Este es un espacio para el caballero, el varón. Antes ibas a una peluquería y te tiraban para el lado, porque es un corte más barato y preferían hacer un tinturado por ejemplo, entonces aquí uno está más cómodo, puede hablar cosas de hombres", explica Anthony.
Agrega que el hombre sureño se está preocupando cada vez más de su aspecto, aunque también las mujeres se están acercando a las barberías para looks más radicales como diseños laterales y en la nuca.
en promedio $4mil