Humor en Viña del Mar I
El humorista colombiano "Mono Sánchez" dejó la noche del miércoles una difícil tarea a los humoristas chilenos, al lograr las dos gaviotas de premio por su actuación carente de los garabatos propios de los nuestros. Curiosamente, la primera humorista de este festival explotó el garabato como complemento indispensable para hacer reír a los chilenos, e igual logró las dos gaviotas.
Queda claro que el recurso de los garabatos por los humoristas chilenos es irrelevante, y su empleo sólo sirve para transmitir hacia al exterior la ordinariez de nuestro hablar. ¿Podrá algún ente estatal relacionado con la cultura y educación nacional el obligar la suspensión de garabatos en transmisiones tanto de TV como radio, por ser el Estado dueño del control aéreo nacional? No hacerlo es coludirse en este aspecto de mala imagen internacional respecto de nuestro hablar ordinario.
El Gobierno obliga a las radios -bajo su jurisdicción- la transmisión diaria de un 20% de música o actividad nacional equivalente, y bien podría aplicar su autoridad en el aspecto que comento.
David Benavente
Humor en Viña del Mar II
La rutina del desconocido "humorista" Juan Pablo López en la noche inaugural de la versión 57 del Festival de la Canción de Viña del Mar ha sido una muestra más de lo fácil que está siendo el burlarse gratuitamente de nuestras instituciones. En esta ocasión fue el turno de nuestras Fuerzas Armadas, ya que el comediante tomó al Ejército de Chile como columna vertebral de sus bromas y desagravios, con chistes burdos y populistas sobre el gasto y modernización de las FF.AA., así como también denigrando al soldado chileno, mofándose de su falta de heroísmo y compañerismo, valores que están muy lejos de la realidad.
¿Acaso no analizará que detrás de cada soldado chileno hay familias involucradas que ven con rabia detrás de los televisores, sin tener derecho a defenderse ni menos a replicar? Es deber moral defender a nuestras Fuerzas Armadas, que hacen una profesional tarea desde la soledad del altiplano en el norte hasta el frío de la Antártica, los mismos que son los primeros en socorrer a nuestros compatriotas cuando son azotados por incendio o desastres naturales.
Al reírse del soldado chileno se mofa de los soldados que nos dieron la independencia, así como de los que marcharon por el desierto, murieron por la patria y se llenaron de gloria.
Fernando González
Humor en Viña del Mar III
Humor triste: me refiero a la rutina del humorista en el primer día del Festival de la Canción de Viña del Mar, y que obtuvo la manida gaviota de plata y de oro, aplaudido por un público emocionado por una crítica social, del tipo pobres y ricos, empresarios y trabajadores, jefes y empleados y toda esa dialéctica ya conocida que trata de separar a la sociedad en clases sociales enfrentadas en la llamada lucha de clases.
Llegó al extremo de buscar el desprestigio de las FF.AA. de Chile ante el público, uno de los objetivos permanentes de ideologías políticas utópicas. El arte de hacer humor creativo para hacer reír no consiste en abanderizar a las personas en cosas comunes y corrientes, como: todos sienten que tienen un jefe, o son pobres en comparación y que otros tienen privilegios. Es difícil que este humorista triste se mantenga en las preferencias, porque para cambiar la rutina necesita un talento artístico que sólo lo tienen los grandes ya conocidos. Los voladores de luces son efímeros.
Marcos Concha Valencia
Garabatos en el lenguaje
Para muchos chilenos, entre los que me incluyo, el expresarse y dirigirse a las personas, con garabatos, apodos y otros calificativos poco académicos, se ha transformado en algo tan normal que lo hacemos sin importarnos las personas ni el lugar donde estamos.
Nuestra lengua madre se ha tergiversado de tal manera que poco a poco hemos ido creando una nueva forma de comunicación, que solamente nosotros entendemos. Lo más grave de esta situación es que las nuevas generaciones están creciendo con la incertidumbre de no saber realmente cuál es nuestro idioma, y podemos escuchar a los niños desde muy pequeños expresarse más en un perfecto "chileno" que en castellano o español.
No se trata de ser mojigatos, sino que ser ubicados en el tiempo y el lugar. En lingüística: Norma es el conjunto de usos habituales que los hablantes de una lengua llevan a cabo en la vida cotidiana. Sin embargo, según mi opinión, hay que ser cuidadosos.
Jorge Valenzuela Araya
Calles intervenidas
Se acerca el inicio de clases, y continúa el descalabro de calles intervenidas en Osorno.
Esteban Meza