Incendios forestales y campamentos
"Si un incendio ocurriera hoy en día en las laderas, poco y nada se podría hacer"
Junto con lamentar este terrible episodio por el que está atravesando nuestro país, especialmente las familias afectadas por las llamas en la zona centro, quisiera poner en alerta los riesgos a los que se enfrentan, también, las familias de campamentos de Osorno y la Región.
Hoy en día, muchas de las laderas de cerros de las ciudades son también el hogar de familias que habitan campamentos en zonas de riesgo. Tomar la decisión de ir a vivir a un lugar así no es fácil, pues se exponen a peligrosos derrumbes, falta de conectividad y un pésimo acceso para los vehículos de emergencia. Si un incendio ocurriera hoy en día en las laderas, poco y nada se podría hacer, y esto ha sido demostrado en variadas ocasiones con anterioridad.
Además, la materialidad de las viviendas de las familias es precaria: según la Encuesta Casen 2015, el 0,2 por ciento de las viviendas a nivel nacional se encuentra en la categoría de materialidad "irrecuperable", no obstante, la Encuesta Nacional de Campamentos dio cuenta de que el 27,8% de las viviendas se encuentra en esta situación, superando por cerca de 30 veces el nivel nacional.
En esta misma línea, el 71,9% de los hogares es considerada como recuperable y sólo el 0,2% se encuentra en condiciones aceptables.
La política habitacional tiene que dar un giro, y junto con ella, las políticas medioambientales; tenemos que avanzar en la planificación y estructuración de las ciudades, en relación a la articulación entre territorio y sus respectivas comunidades. No podemos hacer que la vida de niños, mujeres, hombres y adultos mayores dependa de las decisiones basadas netamente en el desarrollo económico de una región o de un país. Debemos ser capaces de mirar el Chile de mañana, con energías limpias y autosustentables, con mejores condiciones de vida no sólo para las personas, sino que también para nuestra flora y fauna.
Que este lamentable hecho sirva para que abramos nuestros ojos, para que pensemos de una mejor manera el Chile que queremos, para que pensemos en las demás familias que hoy necesitan soluciones a problemas urgentes, y que las vidas que hemos perdido no sean en vano.
Giovanna Moreira Almonacid, directora regional de Techo-Chile