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Con dispositivos que liberan feromonas el SAG evitará la proliferación de la lobesia botrana

PREVENCIÓN. El insecto ataca principalmente a la uva y es una amenaza para los cultivos de arándanos y ya se han producido algunas detecciones en el sector del terminal de buses, por lo que se apela a la colaboración de instalar trampas en casas.
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Paola Rojas

Con la instalación de confusores sexuales, que tienen la finalidad de emanar feromonas para evitar la reproducción de una plaga que podría afectar las plantaciones de arándanos de la zona, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) desarrolla actualmente un plan para prevenir la proliferación de la lobesia botrana, más conocida como "polilla de la uva".

Así lo declaró el director provincial de esa entidad, Andrés Duval, quien explicó que para poder hacer efectiva esta tarea, se debe contar con la colaboración de los osorninos, ya que estos dispositivos deben ser instalados principalmente en árboles de viviendas particulares, esto porque pese al clima, en la ciudad muchas casas cuentan con parrones en sus sitios.

Control de la plaga

El director del SAG explicó que este programa de prevención se debe aplicar en todos los lugares del país que sean susceptibles de la aparición de esta plaga.

Precisó que por razones del cambio climático, las temperaturas en la zona han sido muy altas, lo que favorece a que la plaga pueda establecerse, lo que es un riesgo para las plantaciones frutales y por ello se están instalando estos sistemas de vigilancia, donde se verifican si hay capturas o no del insecto.

"Efectivamente desde el año pasado tuvimos capturas, pocas, pero habían. Pensamos que estas capturas son producto del traslado de frutas desde la zona norte, porque la plaga no viene volando, sino que adentro de la fruta", explicó el director del SAG.

La trampa tiene un atrayente que sólo acerca a la lobesia botrana. Estos sistemas ya tuvieron una experiencia de instalación en el sector de Rahue, donde se produjeron algunas capturas.

"Este año hemos tenido más capturas; de lo contrario, el insecto puede establecerse acá si encuentra un hospedero, porque es específica de la fruta, especialmente de la vid y de otros como arándanos, que es una de las especies que queremos proteger", detalló.

El confusor sexual produce, sobre todo en machos, que los insectos se desorienten, ya que las feromonas que emanan evitan el apareamiento entre machos y hembras.

El área que se está cubriendo con los confusores sexuales es el entorno del terminal de buses.

"Esto significa ir casa por casa donde hay un posible hospedero como vid o cerezos. Por eso estamos sensibilizando a la comunidad para que nos dejen entrar", remarcó Duval.

Los funcionarios están debidamente identificados con las casacas del SAG y además con sus credenciales. El procedimiento sólo significa instalar en árboles de los patios algunos de estos dispositivos.

Trabajo en terreno

Javier Molina, coordinador regional de lobesia botrana del SAG, explicó en terreno que hay tres cuadrillas en las cercanías del terminal.

Señaló que hasta el momento han habido pocos inconvenientes para ingresar a las viviendas.

"La mayoría de las personas nos han dejado entrar a sus casas para instalar estos confusores. Lo hacemos tanto en plantas ornamentales como en algunas estructuras que consideramos adecuadas para su instalación", dijo.

Esta instalación consiste en 50 puntos por hectárea de la superficie determinada por mapa, lo que abarca casi 50 casas por hectárea. Se estima que son 26 hectáreas para instalar en una primera etapa que termina este martes 20 de diciembre.

La segunda etapa, cuya fecha de partida está aún por definir, pretende instalar en localidades priorizadas con dos hectáreas cada una.

El trabajo de la segunda etapa, por tratarse de una superficie menor, se estima que será más rápida, por lo que la operación concluiría antes del 30 de diciembre.

Esta técnica se mantendrá por tres temporadas consecutivas y están en relación a la cantidad de capturas que se realicen, las que hasta el momento indican que no hay una plaga instalada, explicó el experto.

"Estamos asumiendo que la plaga no ha llegado, pero es una medida preventiva para evitar que se instale dentro de la ciudad, donde hasta la fecha llevamos 15 detenciones en trampas y no se han detectado ni huevos inmaduros ni larvas, y por eso es muy importante el apoyo de la comunidad".

hectáreas se considera abarcar con trampas en la primera etapa de instalación. 26

casas aproximadamente se pretende dejar con confusores que son totalmente gratuitos. 50