Carolina Silva
La Navidad para los nueve pequeños de la escuela rural María Luisa Bombal del sector de Polloico -comuna de Osorno-, se llevó a cabo el pasado lunes 12 y contó con la presencia de la fundadora de la escuela en 1968, Cristina Moraga, además de la autoridad provincial de Educación, Eliana Theil, más el cuerpo docente y técnico del establecimiento.
Sin embargo, existe una persona que siempre ha apoyado a la escuela y sus alumnos, pese a que no trabaja en ella ni es apoderado de ningún menor. Se trata de Jaime Paredes, un querido benefactor que todos los años entrega regalos a los niños del establecimiento para Navidad.
De vuelta
El periodista y fotógrafo de profesión, quien volvió desde Nueva York a vivir a Chile al sector rural que lo vio nacer, precisó que a través de esta acción quiere aportar con un granito de arena a las familias de Polloico que menos tienen.
"Me fui a Estados Unidos a vivir y trabajar. Siempre vine para las navidades por mis vacaciones, por eso hace unos 20 a 25 años que entrego unos regalitos para los niños del sector, ya que es algo muy emotivo para ellos", expresó Paredes, quien sin vestir de rojo y blanco, se transforma cada diciembre en un improvisado viejito pascuero.
Agregó que "me gusta ayudar porque son familias de pocos o muy escasos recursos. Es gente muy humilde y sana, por lo que si yo tengo para dar un poquito, lo hago. Algunos me llaman rico, pero no se trata de eso, aquí hay que tener corazón y buena voluntad", precisó.
El premio a la mejor asistencia con un 100% y al primer lugar de tercero básico con promedio 6,3 fue para Isabel Vargas, quien recibió como obsequio una bicicleta entregada personalmente por Jaime Paredes.
"El miércoles pasado supe que había salido con el primer lugar y me gustó mi bicicleta, me parece muy linda. La voy a usar para salir a pasear", indicó Isabel, quien estaba muy feliz por su regalo.
La profesora encargada de la escuela rural María Luisa Bombal en Polloico, Elba Garcés, reveló que los niños se sienten contentos por el aporte desinteresado que realiza el filántropo.
"Los niños están muy felices de tener a don Jaime como su viejito pascuero. Cuando él vivía en Estados Unidos, todos estaban a la espera del día que llegara. Encuentro que es un gran aporte la alegría de Navidad que él le entrega a los niños y eso se lo agradecemos como comunidad", precisó la docente.
Río Negro
En la escuela de la localidad de Chahuilco también se vivieron momentos de emoción por el arribo de otra "viejita pascuera". En este caso se trata de Cristel Eggers, quien durante los primeros días de diciembre le celebró la Navidad a los cinco niños que allí estudian junto a sus familias.
"Hicimos la Navidad bien en familia. Algo pequeño, pero no por eso menos emotiva. Hubo un almuerzo en conjunto con el Centro de Padres, profesores y hermanos de los mismos alumnos, cosa que se extendió hasta las 20 horas porque hicimos un asado. Por supuesto les entregamos sus regalitos correspondientes a los niños, premios al primer lugar, al mejor amigo, así que todos salieron premiados", comentó Eggers.
La benefactora de la comuna rionegrina es conocida en el sector como la "madrina de Chahuilco". Ello se debe a una promesa que le hizo a su padre. Según reveló Cristel, su padre le dijo "nunca te olvides que esa escuela la construí yo y tienes que quedarte a cargo de esto porque no se puede perder. Tienes que ser la madrina de la escuela y todo lo que se haga en la comunidad"..
"Hicimos la Navidad bien en familia. Algo pequeño, pero no por eso menos emotiva y entregamos regalitos a los niños".
Cristel Eggers, "Madrina de Chahuilco""
alumnos tiene la escuela rural María Luisa Bombal de Polloico, hasta donde llegó Jaime Paredes. 9