Secciones

250 personas participan en programa Vida Sana de Río Negro

E-mail Compartir

Con 250 personas incorporadas entre niños, adolescentes y adultos se desarrolla el Programa Vida Sana en el Centro de Salud Familiar de Río Negro, cuyo objetivo es realizar intervenciones en los hábitos alimenticios y en la condición física de las personas para prevenir enfermedades como la Diabetes Tipo 2 e hipertensión arterial en grupos de mayor riesgo.

Una de las principales cualidades es su rol preventivo e intervención temprana, ya que parte desde los 2 años, facilitando la adopción de hábitos saludables en los niños, donde a diferencia de lo que ocurre en la población adulta es más fácil moldear y generar cambios. La información la dio a conocer la profesional a cargo, Katherin Filcún, quien sostuvo que los ejes transversales son la intersectorialidad, promoción de la salud, fomento de la participación social, trabajo comunitario y con el equipo de salud.

Las 250 personas participan de los beneficios tales como la actividad física, controles de salud por médico, nutricionista y sicólogo, talleres por dupla nutricionista-sicóloga, entre otras.

Entre las personas incorporadas este año a la estrategia están los grupos de futbolistas amateur, educadoras del Jardín Espiguita y funcionarios del Cesfam rionegrino.

Biblioteca se enfoca en los formatos digitales para promover la lectura

LABOR. El recinto rionegrino cuenta con casi 8 mil volúmenes, no obstante, realizan capacitaciones en el área urbana y rural. Los adultos mayores son los más interesados en aprender.
E-mail Compartir

Bladimiro Matamala

La sociedad rionegrina ha modificado el consumo de los libros y hábitos de lectura, donde la irrupción de la Internet en los hogares al parecer ha implicado un cambio radical en el bagaje cultural.

Y si bien la Biblioteca Pública 137 tiene 7.754 textos a disposición de la comunidad, con volúmenes para todos los gustos, edades y necesidades del saber, incluyendo quienes siguen cursos superiores, el presente y futuro a la era digital, donde resalta el programa Biblioredes, que de acuerdo al encargado de la biblioteca, Marcelo Adriazola, emergió en 2002, "con el objetivo de transformar a las personas en agentes de desarrollo cultural y social desde las bibliotecas públicas y el ciber espacio, y así superar el aislamiento gracias a la Internet y las nuevas tecnologías digitales".

Está presente en 425 planteles de este tipo en el país, donde se cuenta con computadores de última generación con acceso a Internet y capacitación gratuita a las personas en contenidos y desarrollos digitales.

En la consulta relativa al tema de la lectura entre los vecinos de Río Negro, queda claro que si bien las personas admiten que no son adictos a hojear las páginas de los textos, sea por nula costumbre, motivación o por el poco tiempo que disponen, sí están interesadas en acceder a la computación, lo que fue confirmado por las mujeres del programa Jefas de Hogar y por otras emprendedoras adultas y adultas mayores, quienes reconocieron el servicio que presta la Biblioteca Pública 137, donde han participado en varias capacitaciones.

Muchas admiten que están partiendo desde cero, "perdiendo el miedo al computador y familiarizándose con el mouse".

En la localidad de Los Castaños, por ejemplo, Noemí Coronado explicó que sus hijos ya "dejaron el nido" y que ahora se da tiempo para ella.

"Soy una emprendedora y trabajo de sol a sol, me dedico a las frambuesas donde me va bien, pero me he dado cuenta que necesito la alfabetización digital para fortalecer el negocio y en eso estamos. Eso sí, creo que los cursos han sido muy cortos", agregó.

Su vecina Gladys del Carmen Aros reveló estar más al tanto de lo que ofrece Google y que se esfuerza por internarse en las redes sociales, apelando ahora al apoyo de su hijo Derwin.

En Buenaventura, la presidenta de la Junta de Vecinos, Cecilia Saldivia, quien también participó en las jornadas de computación, abogó por un mayor acceso a la conectividad.

"Esta es una exigencia que nos plantea el mundo en que vivimos y por lo tanto tenemos que mejorar mucho en dotar de tecnología a nuestros sectores rurales, no sólo en favor de los adultos, sino de la juventud, que cuando retorna a casa por las tardes no tiene acceso a la Internet", dijo.

Fieles a los libros

Pese a la irrupción de los formatos digitales, todavía hay adultos y estudiantes que prefieren los libros, como Paulina Ramos y Patricio Román Ojeda, socios juveniles de la biblioteca a quienes les agrada leer semanalmente, algo que combinan muy bien con sus estudios, cultura general, ortografía y redacción.

Y por la tercera edad, los que más se motivan son los educadores y sus colegas en retiro, una de ellas es la escritora local Herta Vásquez.

"Es nuestra socia más activa tanto por la lectura como por el uso de la internet", manifestó el bibliotecario, quien detalló que en sus estanterías cuentan con libros de física, química, matemática y biología que son más difíciles de adquirir para los usuarios.

"Hasta hace unos años nos enviaban libros desde Santiago, pero ahora hacemos mérito a través de nuestra gestión y una evaluación que contiene 10 metas, por lo cual recibimos aportes extraordinarios en dinero, que luego invertimos en textos de enseñanza media y superior", agregó Adriazola.

Una familia dedicada a la música ranchera

MONTEVERDE. El clan Arismendi.
E-mail Compartir

No es novedad que la música mexicana está desde hace mucho tiempo en suelo chileno, pero sí es algo digno de contar lo que sucede con este arpegio en la cordillerana localidad rural de Monteverde, limítrofe entre Río Negro y San Juan de la Costa, donde Omar Arismendi la continua difundiendo en los grandes eventos comunitarios y en el seno familiar, casi siempre acompañado de sus hijas Nancy y Patricia, desde que eran muy pequeñas.

Y de eso han pasado algunas décadas. En la actualidad las dos formaron sus propias familias en Osorno y Santiago respectivamente, pero cuando surge algún acontecimiento familiar, las distancias se acortan y se vuelven a juntar gracias a la música.

Don Omar en el acordeón, Nancy y Patricia en la guitarra, talento más que suficiente para hacer bailar hasta los más recatados con los alegres compases.

Por estos días se reunirán para celebrar otro gran acontecimiento familiar: los 52 años del matrimonio Arismendi. Y lo harán a toda orquesta.

Cultores de la cueca se lucieron en muestra El Patagual de Olmué

FOLCLORISTAS. Pertenecen al conjunto Años Dorados de Río Negro.
E-mail Compartir

Felices de la experiencia vivida en Olmué retornaron a Río Negro Elena Montes y Luis Ponce, la pareja de cueca adulta mayor que representó a la comuna y Región de Los Lagos en la XIII Muestra Nacional de Cultores Naturales de Cueca desarrollada en El Patagual de Olmué, Región de Valparaíso.

Ambos son integrantes del conjunto folclórico Años Dorados y contaron que no tienen compromisos familiares, pero que les une "el cariño y apego por el baile nacional que nos nace desde el alma".

La más eufórica es Elena porque, según dijo, el hecho de subir a ese importante escenario ya fue un premio y un orgullo "mi felicidad fue mayor". Claro, porque resultó elegida reina del masivo encuentro por los cuequeros varones que llegaron desde todas las regiones del país.

"Y eso por sus cualidades personales y por su enorme simpatía", explicó la presidenta del conjunto, Zita Rosas, quien junto a los integrantes del grupo, acompañó a los cuequeros hasta Olmué en un bus especial.

El evento fue organizado por el club de cueca Ramón Angel Jara y no fue competitivo exactamente, sino de rescate de las raíces folclóricas chilenas. A la cita acudieron exponentes de la cueca minera, cueca porteña, cueca del sur y cueca chora, entre otras tendencias.