Robo e incendio en casa de suegra de alcalde de Osorno
¿En qué fallamos los padres para que nuestros hijos salgan a delinquir y cometan actos atroces, como desvalijar una casa en el campo, provocando su incendio intencional para encubrir el delito, y en la ejecución de estos actos mostrar una falta total de compasión al amarrar a los perros que vivían ahí y meterlos a la casa para quemarlos?
Estos tipos de 16 y 17 años son plenamente conscientes de lo que hicieron (en jerga antigua, con pleno discernimiento) y así deberían enfrentar a la justicia. Ambos delitos, por haber sido cometidos en lugar habitado o destinado a la habitación, tienen una alta penalidad y así lo entiende el legislador, pero en el caso de nuestra Ley Penal Adolescente, esa penalidad es fuertemente morigerada, en parte por razones incomprensibles y obsoletas en ordenamientos jurídicos más modernos.
Con buen criterio el juez de garantía de Río Negro, atendido un gran cúmulo de pruebas incriminatorias, en audiencia de formalización decretó su internación provisoria en Puerto Montt por el tiempo que dure la investigación.
Como familia afectada perseguiremos una condena penal, ojalá ejemplarizada y disuasiva de conductas deleznables como éstas. Ser adolescente no puede ser sinónimo de un actuar irracional o de impunidad delictual, ser adolescente significa tener sueños y proyectos de futuro, perseguir ideales y el perfeccionamiento personal.
Siempre resultará ultrajante que entren a robar a nuestro espacio más íntimo, nuestra casa, pero la impotencia, rabia, dolor e incomprensión aumenta mil veces cuando en un acto malvado e irracional provocan su incendio y destrucción total. Más aún, si era la casa que por décadas albergó a las reuniones familiares, a entrañables veranos pasados con nuestros hijos y fue el lugar donde estaban atesorados nuestros más preciados recuerdos. Esa es nuestra gran pérdida, lamentablemente irreparable
Familia Teuber
Conductores ebrios
Ya dejó de ser una novedad el hecho de que un determinado conductor de un vehículo motorizado choque con otro o atropelle a determinada persona dentro del radio urbano o en carretera. Ya dejó de ser novedad, salvo el caso de que las víctimas sean superiores a 20 o más; por ahí el conductor se pone un poco nervioso y luego del choque huye del lugar para luego de un tiempo prudente presentarse al tribunal, aduciendo que no se dio cuenta, menos si andaba con o sin olor a trago.
El conductor que causó el accidente, hoy por hoy, ni siquiera queda detenido un día, sólo le prohiben que vuelva a atropellar a su víctima de nuevo, y además le notifican que a la vuelta de tres meses lo citarán acompañado de su abogado.
Es triste y lamentable observar a diario por los medios televisivos y de la prensa escrita, la cantidad de víctimas que deambulan por las calles o carretera apoyados en un bastón, trémula mano, o sobre una silla de rueda. Siempre serán un peligro para los peatones, minusválidos, ancianos, no videntes, señoras embarazadas o con un niño de la mano. Además, fuera de conducir su vehículo a patadas, está el celular pegado a la oreja.
Guido Bello Martínez
José Piñera y las AFP
José Piñera, el "Urdemales" de las AFP creadas en los 80 sólo para civiles (no para militares, que siguieron en Capredena financiada en un 80% por los contribuyentes), escribió el libro "El Cascabel al Gato", donde explicaba el fenomenal sistema de "ahorro individual" del trabajador. Aseveró allí que las "pensiones vitalicias" llegarían al 70% del último sueldo, suficiente para vivir tranquilos.
Eso en el país de las maravillas. No en éste, donde de suyo la gente de a pie no tiene empleo estable ni altos ingresos a lo largo de toda su vida y que en edad mayor suele ser despedida por necesidades de la empresa.
La realidad: los pensionados por vejez, a 2013, reciben en promedio 168.891 pesos, apenas un 34% del último salario. Las AFP, en tanto, depositarias por ley de los ahorros de los trabajadores, en los últimos cinco años han duplicado sus utilidades un 111%, pasando de $268.535 millones en 2010 a $ 568.754 millones en 2015 (Fundación Sol). En el período, las seis administradoras existentes sumaron ganancias por ¡$2 billones!
¿La solución para mejorar las pensiones?, declama sonriente el ex ministro Pérez Mackenna?, que la pongan los trabajadores aumentando su tiempo de cotizaciones, o sea, más edad laboral. Genial. ¿Quién gana?
Gaspar Millas del Río
Interpelación a ministra
La presentación de la ministra de Justicia en la interpelación en la Cámara de Diputados no fue más que un resumen de los últimos dos meses de noticias aparecidas en la prensa sobre el Sename y Gendarmería, lo que confirma que se informó por la prensa.
Mauricio Pilleux Dresdner