Protocolo Comercial de la Alianza del Pacífico abre oportunidad a las Pymes
INTERCAMBIO. A través de ese instrumento, se presenta un nuevo escenario para que esos emprendimientos abran mercados y tengan mayor presencia en el proceso exportador.
A partir del pasado 1 de mayo, entró en vigencia el Protocolo Comercial de la Alianza del Pacífico (AP), que busca estimular el comercio y las inversiones entre los países miembros de esta instancia de integración.
De esa forma, Chile, Colombia, México y Perú pueden intercambiar, libres de impuestos, un 92 % de los productos que comercian entre esos cuatro mercados.
Esa ventaja se traduce en una oportunidad para la materialización de negocios a pequeña y mediana escala, en la que las Pymes chilenas pueden ser protagonistas para llegar a esas tres economías.
La internacionalización de las Pymes es una de las cuatro áreas temáticas fundamentales definidas por la AP para abordar con los 49 países observadores, además de Educación; Ciencia y Tecnología e Innovación; y el Comercio Exterior.
Importación nacional
En la inauguración del Primer Encuentro Ministerial de la Alianza del Pacífico y sus Estados Observadores, realizado ayer en el Hotel Cumbres de Puerto Varas, el canciller Heraldo Muñoz habló acerca del encadenamiento productivo que se puede generar a raíz de este Protocolo. "El tratamiento nacional que se está dando a las importaciones, puede generar cadenas regionales, incluso de conexión global de valor. Eso es importante para nuestros empresarios", subrayó.
En sus palabras, el ministro chileno hacía mención a la acumulación de origen, mediante la cual todos los productos de elaboración propia, son considerados nacionales en esos países. Así, se facilita la exigencia de la norma de origen para entrar a esos mercados con arancel cero. "Esta flexibilidad que considera a lo importado como nacional, debe ser aprovechado en el futuro", agregó.
El canciller Muñoz resaltó que el fin del boom de la exportación de commodities "nos obliga a mirar en el horizonte, a cómo agregamos valor a nuestras exportaciones, cómo agregamos conocimiento e ideas, de modo de no estar sujetos a los vaivenes de la economía internacional y a la demanda por los recursos naturales".
Sobre el aporte de los países observadores, Muñoz dijo que "tenemos que ser capaces de que (las Pymes) estén mucho más presentes en el ámbito de la Alianza del Pacífico y de América Latina en general, donde representan una parte reducida del comercio internacional. Ahí hay un esfuerzo donde podemos aprender especialmente de algunos de los países observadores, que tienen un mayor recorrido y una mayor presencia de las Pymes en su comercio internacional".
Rol de prochile
La seremi de Economía, Carmen Gloria Muñoz, opinó que ProChile ya está apoyando en ese proceso a través de Exporta Pyme. "Creemos en su potencial exportador. Nuestra economía tiene que diversificarse y aumentar el valor agregado de los productos. No podemos seguir produciendo sólo materias primas", expuso.
Por ello, dijo esperar "que las Pymes puedan tener cada vez más especialización y producir bienes con valor agregado. Para eso, están los instrumentos de fomento productivo, tanto de Sercotec, Corfo y el apoyo de ProChile".
Mientras que Carlos Stange, presidente de la Cámara de Comercio de Puerto Montt, sostuvo que este mayor impulso al poder exportador de las Pymes debe incluir líneas de capacitación que puedan ofrecer esos organismos estatales.
"Necesitamos que ProChile nos ayude a exportar, sobre todo servicios", dijo, pero se quejó que "las facilidades no están dadas en eso".
Aunque reconoció que "las Pymes no vemos estos convenios globales con la facilidad con que se nombran", advierte que de prosperar "es una oportunidad, porque nuestro mercado es muy reducido. La vía de crecimiento es a través de convenios internacionales, siempre y cuando vayan acompañado de un desarrollo país", puntualizó.
Foch Metayer, pequeño empresario de Puerto Varas y ex integrante de la AseCh Los Lagos, afirmó que "uno de los lineamientos del país debería ser un apoyo irrestricto a las Pymes" y reclamó que "en la mayoría de los casos nos quedamos en el eslogan".
Postuló que si se busca un desarrollo sostenible del emprendimiento, es necesario ampliar las tradicionales líneas de financiamiento estatal.