Paola Rojas
Luego de la intoxicación sufrida por más de 80 niños de la Escuela Carlos Condell la jornada del jueves, ayer por la mañana se realizó una reunión en dependencias de dicho establecimiento donde participaron fiscalizadores de la Autoridad Sanitaria, el director de la escuela y supervisores de la empresa Nutriplus, además de las manipuladoras de esta última.
El jueves, de los 80 menores que presentaron problemas de salud, la mitad fueron trasladados a diferentes recintos asistenciales de la ciudad debido a un intenso dolor abdominal, tras la ingesta de una ración de porotos con tallarines proporcionados por la empresa de alimentación. Según los menores, sintieron un gusto y olor a cloro, lo que les provocó vómitos.
Posteriormente a la intoxicación, se decretó la suspensión de las actividades de la escuela, las que se retomarán a partir del martes.
Comida
El director del establecimiento, Eduardo Canales, señaló que en la reunión también participó un grupo de apoderados para conocer cuáles fueron los procedimientos que se cursaron durante la emergencia.
En la oportunidad se expuso a la comunidad escolar que las clases se retomarán el martes y con ello no se interrumpirá la entrega de alimentación a los menores, pero que momentáneamente se proporcionará alimentación fría, es decir, que no se preparará en la cocina de la escuela.
"Queremos darle la tranquilidad a los papás porque esto fue un hecho fortuito, nunca antes había ocurrido en nuestra escuela", recalcó el director del establecimiento.
Además fue categórico en decir que es la primera vez que se produce una situación como esta en la escuela, a diferencia de lo que dicen algunos padres a través de las redes sociales, sobre que sus hijos sufren permanentemente este tipo de hechos en relación a la comida que se les da a los niños y que atentaría contra su salud.
Mientras se realizaba la reunión, el personal de la Autoridad Sanitaria se dedicó a tomar muestras al interior de la escuela para adjuntarlas a la investigación que se lleva a cabo por este hecho.
Apoderados en Tensión
Tras ocurridos estos hechos, la postura de algunos de los padres de los niños afectados fue solicitar la renuncia del director, como también de las manipuladoras encargadas de la comida, tal como lo declaró uno de los apoderados de séptimo básico, Aníbal Ruiz.
"Vamos a pedir la renuncia del director y también de todas las cocineras de la escuela", dijo el padre.
Entre las presentes se contaba la jefa del Departamento de Administración de Educación Municipal (Daem), Karen Vera, quien confirmó que la próxima semana se seguirá entregando alimentación a partir del martes, pero sin usar la cocina.
Vera aclaró que frente a la solicitud de los padres se accederá a trasladar a las manipuladoras a otros lugares.
"Ellas son las más perjudicadas en todo este proceso, ya que aún no se establecen las responsabilidades", señaló.
Con respecto a la salida del director, Vera explicó que esta situación no amerita una decisión de este tipo, ya que él junto a su equipo desarrollaron el procedimiento acorde a los protocolos. No obstante se realizará la investigación, a lo que se suma que es un cargo elegido por alta dirección pública, y si en este caso cumple con el convenio de desempeño, no es posible removerlo del cargo.
Paralelamente el Daem colaborará con la investigación, y luego de ello esta unidad municipal también comenzará un proceso investigativo para corroborar que todos los procedimientos están de acuerdo a lo planificado.
La jefa del Daem aseguró que no hay ningún alumno en condición de gravedad.
Por su parte los profesores del establecimiento llamaron a los apoderados a reestablecer la confianza en la escuela y reiteraron su compromiso a seguir los protocolos y el curso de la investigación.
"Queremos darle la tranquilidad a los papás porque esto fue un hecho fortuito, nunca antes había ocurrido en nuestra escuela".
Eduardo Canales, Director Escuela Carlos Condell en Rahue Alto
470 alumnos tiene la escuela Carlos Condell y de ellos aproximadamente 360 reciben alimentación.