Bladimiro Matamala
María Eugenia Solís Díaz es una conocida y amena locutora sabatina en la estación Purranque FM, activa dirigenta comunitaria y asesora ad honorem casi permanente de las familias más vulnerables, que confían en ella sus consultas y esperan a veces un buen consejo y orientación sobre los temas más diversos relativos el aparato público; incluso, esperan una palabra de aliento en los momentos difíciles de sus vidas, una sana amistad.
Divorciada, madre de dos hijos -Cecilia de 21 y Diego de 12 años-, es también funcionaria de salud e incluso se ha desempeñado en algún momento en el ámbito de la justicia y vivienda.
Mujer que a su vez es presidenta de la junta de vecinos Renacer de la población Unión y Esfuerzo y del comité de mejoramiento en la centenaria ciudad.
Se trata de una historia de esfuerzo y perseverancia, ya que María Eugenia Solís ha luchado tanto por su familia como por la comunidad de Purranque.
-¿Qué le ha significado su experiencia en la radio?
-Primero, permítame agradecer la oportunidad que me brinda el director de la radio Purranque FM, Cristián Labra, y el apoyo de mi colega Víctor Santana y de todo el personal de la emisora. Y respondiendo su pregunta diría que me permite continuar creciendo como mujer, porque es un privilegio estar en contacto con los auditores, recibir sus llamadas, conocer sus inquietudes y acompañarles de algún modo en la solución de sus problemas.
¿Es un motivo necesario en su vida el contacto diario con la gente?
-Absolutamente. Y no tiene nada que ver con algo técnico, sino que con favorecer y cultivar una mirada más humana de la vida. Saber escuchar, conversar y ser solidaria. En lo personal el día a día para mí no es una rutina en el servicio de Some de nuestro Cesfam, que es donde trabajo. Es un agrado y doy gracias Dios por eso.
-¿No le motiva incursionar en la política, pensando en que tiene un buen soporte como es la cercanía con la gente ?
-No me tinca. Paso por ahora. La política está muy desprestigiada en nuestro país. Además, siento que debo continuar cumpliendo mis funciones habituales en la salud municipal y como voluntaria, vecina y amiga en mi barrio y población. Por algo me eligieron su presidenta.
-¿Cómo resume sus logros más importantes como mujer?
-Ser mamá y papá al mismo tiempo no ha sido fácil. A mis 48 años no he tenido tiempo para el relajo, pero he logrado criar y sacar adelante a mis dos hijos, con mucho sacrificio. La mayor está por titularse en enfermería nivel superior. Y en lo personal después de mucho tiempo en el servicio público pasé a la planta hace dos años en el Cesfam de Purranque, mediante concurso público, y estoy asumiendo en la actualidad un nuevo desafío como alumna de la carrera Técnico en Trabajo Social, jornada vespertina, en la Universidad Santo Tomás. Allí me he propuesto seguir creciendo. Y contar sólo cómo una anécdota, que aunque soy mechona ya me nombraron delegada del curso (sonríe).
-¿Cómo define usted a la mujer purranquina de hoy?
-Trabajadora, emprendedora y de mucho esfuerzo. Tengo muchos ejemplos cercanos de aquello. Son alegres y creativas.
-¡Qué mensaje le entrega a las mujeres, considerando su historia de esfuerzo?
-Que jamás dejen de luchar y soñar. Pese a que hay de dulce y agraz, creo que vale la pena vivir. Somos el bastión principal de nuestras familias y decirles que no tengan temor en asumir nuevas responsabilidades. Somos capaces, creativas e inteligentes y si queremos, con perseverancia, siempre vamos a conseguir lo que nos propongamos.
"Es un privilegio estar en contacto con los auditores, recibir sus llamadas, conocer sus inquietudes y acompañarles de algún modo".
María Eugenia Solís