Ricardo Cifuentes
Cada sábado, a partir de las 7.30 horas, comienza la actividad que reúne bajo el recinto techado de la calle Ramírez en La Unión, a 200 chacareros y pequeños productores agrícolas provenientes de los sectores más apartados de la comuna, que durante siete horas ofrecen sus productos a miles de visitantes.
La feria libre, o de los chacareros, comenzó en los años 70 con un comité que reunía a los pequeños productores de hortalizas, en un galpón ubicado en el sitio adquirido a la familia Keim.
El presidente del Comité de Pequeños Chacareros, Víctor Manqui Nauco, recuerda que tuvieron hasta los planos para hacer realidad la remodelación y ampliar la actividad no sólo el sábado, sino para que vaya rotando cada día, para dar espacio, "por ejemplo, a la feria de las pulgas, que haría del lugar un recinto de trabajo para decenas de personas que buscan espacios para vender su mercaderías", precisó.
No ha sido fácil mejorar las instalaciones, "por diferencias que escapan a los chacareros y a su directiva", aclara.
Su anhelo es tener un recinto donde funcione lo que ellos llaman una feria modelo, con instalaciones que la transformen en un atractivo turístico con cocinerías o restaurantes que ofrezcan comidas típicas de la zona y artesanías.
Son más de 3.000 metros cuadrados que permitirían también albergar a los feriantes de la calle.
El dirigente, junto a la pro-tesorera, Elena Villanueva, dijo que cobran 700 pesos por el uso de los mesones de venta, dinero que usan para financiar el aseo, el cuidado y la seguridad; y el saldo sirve para pequeños adelantos, aunque el sueño es el cambio completo.
"Queremos darle un valor turístico al entorno y disminuir la cantidad de comerciantes que deben quedarse a la intemperie en días de lluvia o frío, como sucede hoy en las calles Ramírez, Sargento Aldea, Lau Maturana y hasta en Arturo Prat", enfatizó.
Falta techo
En el exterior, más de 200 chacareros, pequeños productores, comerciantes de ropa, de antigüedades, artesanías en madera, alimentos, quesos, entre otros productos, provenientes no sólo de La Unión sino que de comunas vecinas y hasta de Osorno, venden en la calle, previo pago de un derecho municipal.
Lorena Ramírez Solís, que comercializa papas por kilos o por sacos, indicó que cada sábado, desde hace 10 años, se instala en Sargento Aldea y sueña con tener un techo que les proteja cuando llueve; cerca suyo, Ana Patricia Gómez con envases repletos de frutillas, agregó que son 8 años en el lugar; y más abajo, un veterano de la calle, Milton Guerra, que suma más de 30 años ubicado en la esquina de Ramírez con Sargento Aldea, reiteró que es necesario un techo que les resguarde en verano e invierno.
"Hasta ahora siempre que vienen elecciones nos llenamos de promesas, pero finalmente cero".
ASOCIACIóN GREMIAL
El dirigente Víctor Manqui señaló que son 140 chacareros los que conforman su agrupación y para este mes contemplan la creación de la Asociación Gremial de Ferias Libres, con participación de dirigentes de Santiago y Valdivia, para lo cual tendrán una reunión el 28 de abril en el salón parroquial de La Unión.
"Soñamos con tener una feria modelo y si todos nos ponemos de acuerdo, lo vamos a conseguir, tenemos la voluntad y la idea es mejorar las condiciones de todos, del feriante y del comprador", concluyó Manqui.
'70 fue la década donde nació la feria de calle Ramírez, en un galpón ubicado en el sitio de la familia Keim.
200 feriantes y hortochacareros de diversas localidades rurales venden sus productos en la feria.