Mejorar las condiciones y equilibrar las relaciones al interior de las empresas resulta un acuerdo esencial para Chile. Y lo estamos abordando desde la Reforma Laboral que se discute por estas horas en el Parlamento. Porque a diferencia de lo que algunos señalan respecto del clima de inversión del país, organismos internacionales como la Ocde, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional han planteado que el conjunto de reformas que este Gobierno ha impulsado son esenciales para la estrategia de desarrollo de Chile.
Al concluir sus primeros dos años de gestión, el Gobierno de Michelle Bachelet ha consolidado su sello transformador. Cada uno de los logros y los desafíos que se vienen para este segundo tiempo, como la Reforma Laboral, están dirigidos a mejorar las condiciones de vida de la gente.
Lo dijimos y lo seguimos sosteniendo con resultados: mientras la Reforma Tributaria persigue financiar el gasto social y permanente desde el aporte de quienes ganan más; los avances en salud con el plan de infraestructura hospitalaria, la ley "Ricarte Soto" y el Fondo Nacional de Farmacias, buscan resignificar lo público en un área esencial.
La Reforma Educacional es la gran base para construir un Chile mejor. Finalizamos con la selección escolar y la gratuidad en la educación básica, media y universitaria tiene rostros y domicilios en nuestra región. La profunda reforma al sistema electoral, el fin del binominal y las leyes que fortalecen la democracia y la hacen más ciudadana; y la amplia Agenda para la Transparencia y la Probidad en los negocios y la política, están creando un nuevo estándar para restablecer confianza.
Hay algunos que quisieran negar los logros que hemos ido construyendo, pero los hechos se imponen por sí solos. Nuestro desafío inmediato es despachar y poner en ejecución la Reforma Laboral y la despenalización del aborto en tres causales; seguir materializando el plan de infraestructura y de construcción de viviendas; avanzar en la agenda de seguridad pública; y realizar un amplio proceso participativo para contar con una nueva Constitución, entre otros grandes propósitos.
Lo principal es asegurar que todos estos logros sean una experiencia real para cada una de las familias de Chile y nuestra región. Eso es un acuerdo esencial.
Francisco Reyes C., seremi de Gobierno