Sergio Silva
Ala espera de la resolución de la Tercera Sala de la Corte Suprema, que determinó por unanimidad la aplicación de todas las vacunas correspondientes al pequeño osornino Mateo, de cinco meses, cuyos padres se niegan a que reciba las dosis, se encuentra la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Salud de la Región de Los Lagos, sin la cual pueden hacer efectivo el dictamen.
Así lo indicó la propia seremi Eugenia Schnake, quien indicó que para vacunar al menor "debemos contar con la resolución judicial cuya notificación escrita aún no llega y sin ella no podemos realizar la inmunización del lactante".
La Corte Suprema informó a comienzos de mes la ratificación del fallo de la Corte de Apelaciones de Valdivia, que ordenó al matrimonio de Héctor Higueras y Yesenia Farías, padres de Mateo, a que le apliquen todas las vacunas que le corresponden a su corta edad, a lo cual se niegan, ya que consideran son "innecesarias".
Schnake señaló que una vez que llegue el documento a jurídica van a trasladarse hasta el hogar de la familia en la población Schilling de Osorno, donde expondrán los argumentos y solicitarán inmunizar al menor.
Sin embargo, señaló que existe la posibilidad que ellos se nieguen a la medida. "De ser así, estaríamos frente a un desacato, algo penado por la ley. Nosotros sólo nos limitaremos a que ellos firmen un acta que será reenviada a la corte, expresando la negativa de la familia y serán ellos quienes deberán ver la forma de concretar la vacunación", sostuvo Eugenia Schnake.
La autoridad regional de Salud no quiso confirmar o descartar el uso de la fuerza pública para hacer efectivo el dictamen judicial y manifestó que "siempre buscamos la manera de educar y disminuir los riesgos para la salud de la población. El niño ya tuvo una enfermedad la cual podría haberse evitado si tuviera las vacunas que le corresponden", sostuvo.
Y agregó que "el Código Sanitario y la Convención de Derechos del Niño y el Decreto 6 de 2010 establece la obligatoriedad nacional del plan de inmunización".
Notificados
Firme en la postura de rechazar las vacunas para su hijo, pese al dictamen judicial de la Corte Suprema, se encuentra Héctor Higueras.
El joven padre señaló que la tarde de ayer le llegó una carta certificada del tribunal en la cual se le informa de la resolución adoptada.
"Mira, nuestra postura se mantendrá pese a toda acción judicial que se generó tras la denuncia de las autoridades de salud. La carta llegó recién hoy (ayer) y cuando regrese a la casa vamos a leerla con calma, pero insisto, no vamos a permitir que sea vacunado", aseveró.
Consultado respecto del uso de la fuerza pública para concretar la inmunización de su pequeño hijo, Héctor Higueras se limitó a señalar, sin entrar en detalles, que se acogerá a la ley 20.584 de los Derechos y Deberes de los Pacientes.
Denuncia
La seremi de Salud recordó que el caso comenzó luego de que la directora del Hospital Base San José de Osorno, Verónica Wall, interpuso un recurso en la Corte de Apelaciones de Valdivia ante la negativa de la pareja para que su hijo reciba la vacuna BCG, que protege contra la tuberculosis.
El fallo del tribunal valdiviano fue favorable para el recinto hospitalario, sin embargo los padres del menor mantuvieron la negativa al tratamiento.
Ello generó que se recurriera a la Corte Suprema, donde los jueces de la Tercera Sala del máximo tribunal falló por unanimidad para aplicar la inmunización a Mateo.
"Ahora deberán aplicarse otras vacunas (4 dosis) de acuerdo al programa de vacunación para un niño de cinco meses", expresó la autoridad de Salud, quien reiteró que una vez que se recepcione el fallo judicial, un equipo de profesionales irá a la casa del menor para cumplir la orden.
"Nosotros sólo nos limitaremos a que ellos firmen un acta que será reenviada a la corte, expresando la negativa de la familia".
Eugenia Schnake, Seremi de Salud
Diciembre de 2015 la Corte de Apelaciones de Valdivia ordenó vacunar al recién nacido contra la tuberculosis.
17.30 horas de ayer la familia del menor habría recepcionado en su hogar la carta del fallo judicial.
5 meses tiene el pequeño Mateo, a quien sus padres se niegan a vacunar.