Verónica Salgado
Los pobladores de los seis campamentos ubicados en Rahue Alto, despertaron la mañana de ayer con el ruido de las máquinas que trabajaban para mejorar el sistema de conexión a la red de agua potable de los asentamientos, lo que permitió que luego de más de una semana vuelvan a tener el vital elemento en sus hogares.
Personal municipal en conjunto con los pobladores revisaron y conectaron las tuberías de PVC a un nuevo sistema de arranque, lo que generó mayor potencia al agua para que pueda abastecer la totalidad de las 600 viviendas emplazadas irregularmente en el sitio municipal.
La solución fue entregada por el municipio luego de los tensos momentos vividos el lunes, donde un incendio destruyó dos mediaguas y un taller, dejó damnificados a cuatro personas y provocó protestas de los pobladores en avenida Real.
Las manifestaciones buscaban que personal municipal y de la empresa sanitaria Essal entregaran una solución inmediata a la carencia de agua, cosa que se resolvió pasadas las 21 horas del lunes.
Trueque
La solicitud de los vecinos fue escuchada y el arranque que abastecía de agua al sector, que tenía un diámetro de 1,5 pulgadas, fue cambiado por uno de 2 pulgadas que entrega agua al parque Arnoldo Keim.
Para realizar estos trabajos se debió utilizar una máquina excavadora, la cual removió la tierra para localizar el punto de conexión de ambos arranques y realizar el trueque.
Así lo explicó Héctor Subiabre, jefe del Departamento de Operaciones del municipio, quien precisó que paralelo a los trabajos con la excavadora un grupo de dos gásfiter revisó las red central de agua potable para asegurar que no existieran fugas que pudieran afectar la distribución adecuada del agua.
"Con esto esperamos que el agua tenga la suficiente presión para distribuirse por la mayoría de los hogares. También dejaremos en mejores condiciones el camino de acceso a los campamentos", dijo el funcionario municipal.
El hecho de mejorar el estado de calle Esperanza, el principal acceso a los seis asentamientos irregulares, es para evitar situaciones como las vividas el lunes con el incendio donde los vehículos de emergencia y los carrobomba no pudieron ingresar, lo cual dificultó mucho su labor.
El funcionario municipal también detalló que el parque Arnoldo Keim fue conectado al arranque de menor potencia, ya que el agua es utilizada mayoritariamente para riego, por lo tanto, la fuerza no es tan necesaria como en los terrenos de los campamentos.
Medidores
Los dirigentes y pobladores se mostraron conformes con la solución, aunque insistirán con buscar una alternativa definitiva para evitar situaciones complejas y que se han repetido en los últimos cinco años.
Danilo Calixto, dirigente del campamento Por un Futuro Mejor 3, explicó que lamentablemente muchas veces se deben realizar protestas para dejar en evidencia las precarias condiciones en las que viven.
"Nosotros sólo queremos tener las mismas condiciones de vida que cualquier familia de Osorno y también podemos pagar por servicio de agua potable y tener un medidor, eso es lo que solicitaremos al alcalde", dijo el dirigente.
Precisó que las familias tienen claridad que es una toma irregular y que esperan optar a la casa propia, pero que eso no condiciona solicitar servicios básicos para mejorar la calidad de vida.
Ana María Manríquez, presidenta del campamento Alberto Hurtado, señaló que el diálogo ayudó mucho para encontrar una solución a la falta de agua en los seis campamentos, pero precisó que aún falta arreglar el tema de manera regular.
"No queremos nada gratis y podemos pagar nuestra agua tal como hacemos con la luz, pero para eso tienen que instalar medidores individuales y esa es nuestra meta. Este lugar donde vivimos es momentáneo porque trabajamos para tener nuestra casa propia, pero debe ser un paso digno y el agua no se le niega a nadie", manifestó la dirigente.
Los seis campamentos se encuentran emplazados en un terreno municipal que fue ocupado de forma irregular por un grupo inicialmente de 80 familias hace más de seis años. Actualmente hay 600 familias distribuidas en una zona de laderas que no es apta para construir, según el plano regulador, por peligro de derrumbes y alta presencia de quebradas.
Por lo mismo, la Superintencia de Servicios Sanitarios (SISS) precisó que para realizar la instalación de medidores se debe solicitar una autorización para la ampliación del territorio operacional de la Empresa de Servicios Sanitarios de Los Lagos (Essal) en la comuna.
Ello, debido a que actualmente Essal tiene sus puntos de conexión sólo hasta la avenida Real y es necesario generar nuevos puntos para conectar redes de alcantarillado que van asociados a la instalación de agua potable.
A eso se suma que las diversas autoridades comunales, provinciales y regionales han señalado en reiteradas ocasiones que la solución es que las familias sean erradicadas del sector.
600 familias fueron afectadas por la falta de agua durante más de una semana en seis campamentos.