Joven químico farmacéutico instala su propia "botica" en Río Negro
EMPREDIMIENTO. Se trata del primer local de su tipo en la comuna, que se suma al actual almacén farmacéutico. Se ubica en avenida Buschmann y ofrece los mismos productos de las grandes cadenas.
Satisfacción existe en la comunidad rionegrina por la reciente apertura de una farmacia en la ciudad, negocio que se suma al almacén farmacéutico, el cual expende determinados medicamentos.
Se trata de la "Botica del río", que funciona en la avenida Buschmann. Su propietaria es la joven químico farmacéutico osornina Jéssica Niepel Vives, titulada en la Universidad San Sebastián de Concepción, quien trabajó durante 5 años en Santiago antes de venir al sur. Dijo que está feliz de retornar a casa para quedarse.
"Antiguamente las farmacias se llamaban boticas y eran atendidas por químicos farmacéuticos que eran sus dueños, que es mi caso. Además, como se habla mucho por estos días del tema de la colusión y alza de los precios, la gente siente a veces cierto rechazo a las farmacias. Consideré que botica era más amigable y acogedor. Y lo de río, bueno, por Río Negro, por el hermoso curso de agua que atraviesa la ciudad. Me encanta la comuna y su gente", reconoció.
"Me parece muy bien que exista una farmacia, era un suplicio tener que viajar hasta Osorno a comprar un medicamento, aparte de la pérdida de tiempo", indicó Raúl Vega, proveniente de Riachuelo.
"Vine al Cesfam por un remedio y ahora quiero comprar algo para protegerme del sol. Bien acogedora está la botica, contenta por Río Negro. Nos hacía mucha falta de verdad", comentó Norma Henríquez, vecina de la ciudad.
Inversión
La joven profesional indicó que el costo de la inversión ha sido alto, por lo que agradece el apoyo de su padre.
Detalló que para abrir el local debió regirse y cumplir con varios códigos sanitarios, como contar con paredes y pisos lavables, muebles, extintores y en general lo relacionado con la prevención de riesgos. Los medicamentos deben estar en estanterías y nada en el suelo, contar con refrigeradores para los que tienen cadena de frío, "por lo tanto esto implica mucho tiempo e inversión a la hora de partir y no ha sido fácil reestructurar el espacio físico para atender. Compro los medicamentos al contado y tengo que vender a un margen acotado que me permita ir recuperando lo invertido y a la vez abastecer el local. Estoy consciente de que este proceso será lento, pero dispuesta a caminar junto a la comunidad. Y que los vecinos se acostumbren que en su ciudad existe una botica, que en realidad es una farmacia".
-¿Cuál es su opinión con respecto a las farmacias populares?
-Creo que las autoridades municipales deben entender el concepto, que si bien es un beneficio para los pacientes crónicos, no es libre, es decir, no se extiende a toda la comunidad. El sistema es bien complejo y además deben sufragar los servicios de un farmacéutico y en ese sentido no son muchos los colegas que desean trabajar en comunas pequeñas.
Genéricos, bioequivalentes, perfumería y gran parte de los medicamentos y productos que exhiben y venden las farmacias de cadenas tiene la "Botica del Río" a disposición de las familias rionegrinas.
El local atiende de lunes a viernes, de 10 a 16 horas, y de 16.30 a 20. Los sábados de 10 a 14 horas. Y acaba de instalar un teléfono de contacto para los medicamentos de mayor urgencia: el 064-2-361845.