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Agua estancada en la pileta y basura genera molestia de transeúntes en la plazuela Yungay

MAL ESTADO. El agua de la fuente presenta un color verdoso y expele olor putrefacto. A ello se suma el descuido de las áreas verdes y los daños que generan los propios usuarios, quienes arrojan desperdicios en cualquier parte del paseo público.
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leonardo.yevenes@australosorno.cl

Mientras espera la llegada de su esposa y de su hija, Óscar Mella aprovecha de sentarse en un banco de la plazuela Yungay, ubicada frente al mall Portal Osorno, en Ramírez con Prat, protegido por uno de los árboles del lugar, a modo de capear las altas temperaturas de este mes. Atento a la llegada de sus familiares, Óscar apenas se da cuenta de que está prácticamente rodeado de desechos como envases de jugo vacíos, palitos de helados y papeles de helados. Incluso, el mismo banco en el que está sentado este hombre que trabaja en Carozzi, presenta evidentes signos de suciedad de palomas que le da un color más blanquecino que el habitual.

La descripción es parte del escenario común que presenta la céntrica plazuela osornina, que destaca por su estratégica ubicación, ya que se encuentra en medio de prácticamente dos emblemas de Osorno: el mercado municipal y el mall, el centro comercial más visitado de la ciudad.

A Óscar particularmente le molesta el estado en el que está habitualmente este espacio público, donde también destaca la suciedad de la pileta que "decora" el lugar, cuya agua presenta un avanzado grado de putrefacción con un fondo sucio y musgoso que le da una tonalidad de color verde.

Carlos Medina, jefe de la Dirección de Aseo y Ornato del municipio, indicó que referente al aseo de la plaza, se trabaja especialmente en dos turnos durante el día, los cuales comienzan a recolectar residuos de aceras desde calle Ramírez, hasta llegar precisamente a la plazuela Yungay. El recorrido comienza a las 7 de la mañana y culmina aproximadamente 45 minutos más tarde en este espacio. Luego se repite la acción -en el mismo recorrido- a las 9.10 para terminar 50 minutos más tarde.

Entre los argumentos que esgrime Medina para explicar el descuido de esta emblemática plaza, está la cantidad de vendedores ambulantes que hay en el sector y en el descuido propio de la gente que no deposita la basura en los receptáculos correspondientes.

"Es una plaza que nos cuesta mucho mantener limpia debido a la gran cantidad de público que llega y donde siempre hay alguna manifestación o actividad en la que participa harta gente", dijo.

Para Medina, la clave de la mantención de la plaza que se hace durante los siete días de la semana, está en la misma educación de la gente, quienes teniendo el mobiliario a disposición para depositar los desechos en todo Ramírez y en la misma plaza, no lo hace.

Incluso, explica el encargado de aseo del municipio, existen barridos nocturnos y de lavado de aceras y bancos del lugar, aseo que se lleva a cabo todos los días.

En cuanto al descuido que presenta la pileta, Medina explica que justamente esta tarea no le corresponde a la Dirección de Aseo y Ornato y sí a la Dirección de Obras que dirige Ángela Villarroel, la cual tiene la tarea de limpiar todas las piletas de la ciudad.

"Sé que existe un equipo especial dedicado a ello, debido al cuidado que se debe tener con las instalaciones eléctricas que hay en las piletas".

Lamentablemente fue imposible obtener respuesta de la titular de Obras para saber sobre el deplorable estado de la pileta de la Yungay, que por cierto, contrasta enormemente con la pileta de la plaza de Armas, que sí está limpia, bien mantenido y con las luces funcionando.

Descuido

La señora Nancy lleva cinco años atendiendo uno de los kioskos que se encuentra en la plazuela Yungay. Por lo mismo, conoce muy de cerca lo relacionado con el movimiento que día a día se genera en este emblemático espacio público del centro.

Cuando se le pregunta acerca de la evidente suciedad que presenta la plaza, Nancy no duda en culpar a los transeúntes y a los visitantes casuales del espacio, como responsables del desorden.

"Si usted mira aquí (señala con el dedo) puede ver varios envases de helado tirados, siendo que la gente tiene todas las posibilidades de haberlos depositado dentro del basurero que está ahí, pero no lo hacen", comenta con molestia.

"Lo que sí puedo afirmar es que quienes limpian, siempre están presentes barriendo o sacando la suciedad. El problema es que a la gente que viene a descansar aquí le da lo mismo estar sentados cerca de la basura y arrojarla en cualquier lugar. Es mala educación de los usuarios", afirmó tajante.

2 veces al día se realiza el barrido de la plazuela Yungay, no obstante, en el municipio señalan que la gente no coopera con el aseo.