Los barristas detenidos por los desmanes en Valparaíso quedaron en libertad
FORMALIZACIÓN. Once de los 18 detenidos no podrán ingresar de forma temporal a los estadios.
Once de los 18 detenidos el domingo por los incidentes ocurridos en Valparaíso quedaron ayer en libertad tras ser formalizados en el Tribunal de Garantía de la ciudad puerto por infracción a la Ley de Derechos y Deberes en el Fútbol Profesional por parte de la Fiscalía local.
Los hinchas, no obstante, quedaron con prohibición temporal de ingresar a los estadios, según radio Cooperativa.
De los detenidos, ocho son hinchas de Colo Colo y tres de Santiago Wanderers. Todos fueron formalizados por desmanes reportados fuera del Estadio Elías Figueroa, pues Carabineros no retuvo a nadie de los que generó violencia dentro del recinto deportivo.
En la audiencia, ocho de los formalizados fueron acusados por desórdenes públicos, mientras que dos por maltrato de obra a Carabineros. Estas 10 personas no podrán ingresar a ningún estadio de fútbol profesional por 60 días, periodo en que se realizará la investigación de los hechos.
Los dos delincuentes formalizados por maltrato de obra a Carabineros enfrentarán un juicio simplificado, según consignó radio ADN. La audiencia se realizará el 27 de enero próximo.
El otro barrista formalizado, también por desórdenes públicos, tenía una causa pendiente, por lo que quedó con la prohibición de entrar a estos recintos por un año.
Ninguno de los detenidos quedó con arraigo o prisión preventiva debido a la baja penalidad de los delitos por los que fueron formalizados.
El bajo número de detenidos, pese a la magnitud de los incidentes, generó críticas en el mundo político y deportivo.
El ex DT de Wanderers, Jorge Garcés, consideró que ello "es el reflejo de toda la descoordinación que se produjo, tanto de las autoridades (como de) Carabineros". "La policía entró a actuar tarde y, más que poder solucionar el problema, solo lo aplacó un poco", señaló el ex técnico a La Segunda.
El DT de Colo Colo, José Luis Sierra, lamentó que lo que esperaban que fuese una fiesta se transformara en un espectáculo triste. "Queda un sentimiento de tristeza, el fútbol perdió, sin lugar a dudas. Era una fiesta, todos debíamos disfrutar más allá de quién terminara ganando el campeonato, pero fue triste lo que sucedió, pues no es el marco que uno espera para un final de campeonato, ni para ningún partido", expresó.