Gratuidad, becas, créditos y presupuesto
"Que se establezca la gratuidad para las instituciones estatales, al fin y al cabo es el Estado el dueño de ellas".
Cinco son los problemas que presenta la gratuidad en Educación Superior y que se reconocen transversalmente. Discriminación entre estudiantes de una misma condición de vulnerabilidad, un gran sesgo anti regiones, una gran incertidumbre en las instituciones que podrían acogerse a las exigencias del gobierno para acceder a ella por no estar claro el futuro marco normativo, además de los convenios de desempeño, la imposibilidad de cumplir presupuestariamente y, un punto muy relevante, una fuerte discriminación en contra de la educación técnico- profesional, la de mayor crecimiento en los últimos años y, sin duda, una de las más necesarias.
La Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) estima en 600.000 la necesidad de técnicos/profesionales para los próximos años. Por otra parte, mientras en Europa existen 3 técnicos/profesionales por cada universitario; en Chile, la proporción es de 3 universitarios por cada técnico/profesional, situación que gracias a las políticas implementadas a partir de los años '80, con un gran aporte del sector privado, se ha ido revirtiendo progresivamente. Hoy la matrícula total de la Educación Técnica/Profesional iguala a la matrícula Universitaria.
La discusión actual (que es financiera y no de calidad) está centrada en la gratuidad. Además de los cinco problemas mencionados, hay que considerar que el Estado no tiene ninguna posibilidad en el corto o mediano plazo de absorber la gran demanda por educación superior, tanto en Universidades como en CFTs o IPs, ni por temas financieros ni, aún más importantes, de gestión.
¿Cuál es la solución más razonable en el estado de circunstancias en las que nos encontramos hoy día? A mi juicio, que se establezca la gratuidad para las instituciones estatales, al fin y al cabo es el Estado el dueño de ellas y los limitados recursos con que cuenta debe asignarlos a sus instituciones. Para el resto de las instituciones se debería mantener el sistema de becas y créditos que hoy existe orientados a los estudiantes vulnerables y no a instituciones, que tanto éxito han demostrado tener, reconocido incluso internacionalmente.
Víctor García Ossa Economista, Rector Santo Tomás Osorno