Secciones

Municipio estudia instalar un cinerario por colapso de cementerio

PROBLEMA. El camposanto municipal de Rahue Alto copará su capacidad máxima para nuevas tumbas de aquí a dos años, por lo cual la administración baraja opciones como la compra de terrenos adyacentes, el saneamiento de sepulturas abandonadas y la habilitación de nuevas áreas dentro del recinto de calle El Salvador.
E-mail Compartir

Leonardo Yevenes Ch.

Dos años como máximo es la capacidad que tiene el Cementerio Municipal de Rahue Alto, ubicado en calle El Salvador, para recibir nuevas tumbas, debido a que actualmente el camposanto tiene casi 30 mil tumbas, repartidas en cuatro hectáreas de terreno.

Así lo explica el administrador del Cementerio, Héctor Geisser, quien afirma que el recinto simplemente colapsará en dicho periodo.

Por lo mismo, entre las alternativas que se barajan para solucionar el problema de espacio, considerando que año a año se sepultan a alrededor de 500 personas en promedio, está la posible adquisición de terrenos adyacentes al recinto; el saneamiento de sepulturas que al día de hoy llevan varios años sin mantención o preocupación por parte de los familiares; o la habilitación y utilización de nuevas áreas dentro del mismo cementerio.

Eso sí, una de las más innovadoras es la posible instalación de un cinerario o crematorio en el recinto municipal, que sería el segundo de su tipo en la ciudad, ya que existe uno en el Parque Valle del Cedrón (ubicado en la Ruta U-400 al mar), perteneciente a la Fundación Cristo Joven, que fue inaugurado en 2009.

Estudios y costos

Geisser indica que el mismo alcalde Jaime Bertín ya está al tanto de la necesidad que existe de habilitar un servicio que ayude a paliar la alta demanda de espacio que ha registrado en los últimos años el camposanto, lo cual se debe al bajo costo que tienen las tumbas para los usuarios y las múltiples mejoras que ha tenido bajo la actual administración del municipio.

"Por lo mismo, el alcalde ya solicitó a la Secretaría Comunal de Planificación (Secplan) que se haga un estudio acerca de la factibilidad de instalar un cinerario en el cementerio de Rahue Alto, para así aprovechar mejor el espacio en el cementerio", indicó.

Geisser afirma que con un servicio así funcionando, se barajarían dos alternativas que permitirían ocupar menos espacio en el ya estrecho cementerio rahuino. Entre ellas, que los propios familiares se lleven los restos del difunto para que luego sea trasladado al lugar que ellos estimen conveniente o bien que los mismos restos creamos sean depositados en una ánfora y luego llevados a un columbario (columnas de grandes proporciones), donde se depositarían los restos cremados, minimizando al máximo el poco espacio restante.

Al respecto, el alcalde Bertín indica que este plan le interesa de gran manera al municipio, por lo que ya se están llevando a cabo los estudios correspondientes para una virtual instalación.

"Actualmente nos encontramos en la etapa de factibilidad para saber cuánto nos costaría instalarlo y ver cuáles son las indicaciones sanitarias necesarias para que funcione, las que pueden ser muchas", señala.

Una vez logrado avanzar en esta etapa, dice la autoridad, queda ver el tema de los costos, los que tendrían que ser asumidos por el mismo municipio y ver si la entidad posee los fondos necesarios para llevarlo a efecto.

Todo este proceso se debería a que la autoridad municipal está consciente de que en los últimos años el número de tumbas solicitadas ha ido en aumento, tanto por traslados desde otros recintos como por la demanda de un recinto que ha requerido de mucha inversión durante la actual administración.

"Si llegásemos a concretar el cinerario, no sería con el objetivo de hacer negocios, claramente. Lo que nos interesa es mejorar el servicio que le entregamos a la comunidad. Me plantearon esta idea desde la administración del cementerio y si es factible realizarla, no veo inconvenientes. Por ello ya estamos trabajando en el tema", detalló la autoridad comunal.

Tumbas con deudas

Desde hace más de un año que la administración del camposanto trabaja en el catastro y reconocimiento de tumbas, estudio que señala que el 70% de las tumbas que hay en el lugar tienen problemas con la mantención económica.

Héctor Geisser señala que las sepulturas tienen un costo de mantención de 4.200 pesos anuales, pero a pesar de ser bajo, la mayoría se encuentra con deudas por parte de los familiares de los difuntos.

Por lo mismo, desde 2014 se realiza un catastro total con el fin de contactar a los responsables de las tumbas, para que regularicen sus deudas, ya que de no prosperar esta acción el mismo municipio se encargaría de reubicar los restos que se encuentren en las tumbas olvidadas o dejadas a su suerte y de esta manera contar con más espacio.

"Estamos efectuando la notificación a quienes corresponde, específicamente dos notificaciones donde informamos del problema que se está presentando. Las notificaciones tienen un plazo de 30 y 60 días respectivamente, con el fin de entregar el tiempo necesario a los familiares para que se acerquen y regularicen el tema, que es lo que deseamos", indicó el funcionario municipal.

Eso sí, admite Geisser, el proceso se estaría realizando con calma y con la idea de que la gente pueda acercarse a sanear su deuda.

"Aquí todo es conversable y si una persona tiene un problema de deuda, por ejemplo, que equivale a diez años, de todas maneras se puede llegar a un arreglo de pagos que le acomode. La idea es que podamos solucionarlo. De no lograr contactar a los responsables y si ha pasado mucho tiempo, el municipio se hará cargo de este nuevo espacio", aseveró.

El pago y regularización del estado de cada sepultura resulta vital para el municipio, ya que con lo recaudado se costean ítems como la mantención del recinto, la limpieza y el pago de guardias de seguridad.

"En los últimos años hemos dedicado grandes recursos al cuidado del camposanto. Se reemplazó una reja que había -y por la que se colaban hasta animales adentro- por un cierre perimetral con panderetas. También contamos con 50 focos alógenos que iluminan el recinto por las noches, debido a que antes cualquier persona entraba al cementerio a cometer vandalismo o beber y próximamente se instalarán cámaras de vigilancia que nos permitirán cuidar aún más al único cementerio municipal que existe en Osorno", indicó.

Nombre borrado

Con un pequeño tarro de pintura en una mano y un pincel en la otra, Miguel Ángel Barrera camina decidido por el cementerio municipal rahuino directo hacia una sepultura a la cual ya se le está borrando el nombre, debido primero a las intensas lluvias de invierno y actualmente por los fuertes rayos del sol que han presentado los últimos días de octubre.

Según Miguel Barrera, que lleva dos años asignado desde el municipio a trabajos de mantención del camposanto, son muchas las sepulturas que se encuentran prácticamente abandonadas en el recinto, donde con el tiempo van perdiendo limpieza, parte de sus estructura y en casos como este, incluso el nombre de quien se encuentra sepultado.

"Aquí en el cementerio se habla de varios proyectos que se vienen con el fin de ampliarnos y de que tengamos otras opciones para ubicar más restos", señala Miguel, quien comenta también sobre la posibilidad de construir un cinerario municipal en el recinto, que él espera pueda concretarse para el próximo año.

Asimismo está al tanto de la idea de que el cementerio pueda ampliarse hacia nuevos terrenos, aunque no tiene la certeza hacia qué dirección irá a tomar este espacio.

Antes de despedirse y caminar rápidamente para alcanzar a pintar el nombre que el tiempo borró, Miguel Barrera advierte que tienen todo listo para recibir a las cientos de personas que llegarán hoy, Día de Todos Los Santos, a ver a sus familiares fallecidos en el cementerio rahuino.

"Si llegásemos a concretar el cinerario, no sería con el objetivo de hacer negocios, claramente. Lo que nos interesa es mejorar el servicio que le entregamos a la comunidad".

Jaime Bertín, Alcalde de Osorno

"Todo es conversable y si una persona tiene una deuda, por ejemplo, que equivale a diez años, de todas maneras se puede llegar a un arreglo que le acomode".

Héctor Geisser Administrador del cementerio

70 por ciento de las sepulturas que se encuentran actualmente ubicadas en el Cementerio Municipal de Rahue Alto registran deudas impagas por mantención.

2 notificaciones recibirán los familiares o responsables de las tumbas impagas o abandonadas, antes de que se tome la decisión de retirarlas por el municipio.

20 son los cuadros (o sectores) que hasta el momento han sido totalmente catastrados y donde se registra un promedio de entre 4 a 5 mil sepulturas abandonadas.

Roberto Brodsky y su cruda mirada a la clase media chilena

Este escritor vive en Washington desde hace 8 años. Vuelve a Chile en cada primavera, hasta un poco antes de Navidad. Acaba de lanzar su novela "Casa chilena", con la historia de un hombre que vende a una inmobiliaria la propiedad en la que pasó su infancia. En un café de Ñuñoa, el autor que ganó el Premio Jaén y el Altazor por el guión de "Machuca", habla de cómo es la vida acá, allá, y de la soledad que causa WhatsApp .
E-mail Compartir

El escritor ROBERTO Brodsky se crio con más cine que libros y en total cuenta que ha vivido en 20 casas en su vida.

Cuando niño vivió en dos casas de Ñuñoa. Ambas detrás de un cine. De adulto, en 1973, partió al exilio con su padre. En Buenos Aires armó y desarmó tres casas. En Caracas habitó cuatro casas. En Barcelona, tres. Cuando regresó a Chile armó tres casas más. Finalmente, con su mujer habitó cuatro casas hasta que finalmente se fue a Estados Unidos, a levantar otra casa más. En total: 20 casas.

Brodsky dice que pasa pegado a internet en estados unidos.

Por Andrea Lagos G.

"Si no más", dice Roberto Brodsky en el café California de Ñuñoa. Es primavera. Está en Chile y antes de que sea Navidad volverá a Estados Unidos, donde vive con su familia.

El plan inicial era vivir afuera tres años, pero se fue quedando y ya lleva ocho años radicado en Washington.

Allá, Brosky hace clases en la Georgetown University y escribe.Al llegar, terminó "Bosque Quemado" (novela del exilio vivido junto a su padre que ganó el 2007 el premio Jaén).

Cada primavera regresa a Chile para dictar un curso sobre memoria y política. En una de esas vueltas, presentó su flamante novela "Casa chilena" (Random House). El libro está escrito en segunda persona y es la historia de un hombre que vuelve a su país para vender la casa de su infancia. Para lograr concretar el negocio con una inmobiliaria, debe desalojar a un ex matrimonio de amigos que se niega a abandonar la propiedad. La trama cruza a un esposa online, a un amigo enfermo del corazón y a una amante que toca el acordeón, come sushi y también se cambia de casa. Todo, en un barrio de clase media destruido por grúas y retro excavadoras.

-¿Qué significa "la casa" para ti? -Es la Patria, si quieres. La madre patria. O la madre-madre, la mamá. En mis casas siempre hay una madre. Y en ésta, hay una infancia y un crecimiento.

-¿Cómo es tu casa de infancia?

-Muy parecida a la de la novela. Me crié en Ñuñoa, en una familia súper ñuñoína de clase media: con un hermano, papá y mamá. Salíamos a la calle a jugar a la pelota con los amigos, a andar en bicicleta en la plaza, a subirnos al muro. Vivíamos en una calle sin salida, detrás del cine Hollywood.

-¿Cómo era ese teatro?

-Genial, un viejo cine-teatro ubicado en Irarrázaval. Ahora allí venden ropa usada. Hacían rotativas desde las 11 de la mañana hasta las 7 de la noche. Yo me metía en la mañana y no salía hasta la noche con los ojos hinchados de ver películas.

-¿Te criaste con más películas que libros?

-Sí, el Cine Hollywood era mi referente. Pasaban casi puras películas de vaqueros.

-¿Tú héroe era Clint Eastwood?

-Él vino después, mi ídolo vaquero era John Wayne.

-¿Qué era un vaquero para un niño de tu época?

-Era como el Skywalwer de ahora, pero con caballo y pistola.

-¿Tú tenías pistola?

-Una Navidad me regalaron una pistola chica de vaquero. ¿Conoces el vaquero de Toy Story? ¡Ese era mi vaquero!

-¿Te tocó vender la casa de tu infancia, como el protagonista de tu libro?

-No precisamente esa casa, pero sí vendí otra. Así somos los escritores: mezclamos, confundimos realidad con ficción. Y mentimos, por su puesto.

MUCHAS CASAS

-Entre tanto cambio de casa, ¿has perdido mucho?

-Baúles llenos de libros.

-Tu casa de la infancia, ¿existe aún?

-Sí. Cuando estaba tomando apuntes para la novela, la visité. Me paseaba, caminaba por Ñuñoa y me fui a la casa que estaba detrás del Teatro Hollywood. Vi la terracita donde jugábamos y aún estaba el tanque de parafina para encender la Comet con que se temperaba la casa.

-Tomas apuntes. ¿Qué más haces para escribir?

-Tengo una libreta donde pego papelitos y recortes. Y nunca digo "voy a escribir una novela", porque si no, no escribiría nunca más nada. Es un rollo muy grande empezar a plantearse "una nueva novela".

-¿No haces cómo Isabel Allende. que cada 8 de enero enciende una vela y se pone a escribir?

-Yo no prendo la vela y se me ocurre la idea, no, no, (se ríe) nada de eso. Yo estoy siempre anotando, pegando boletos, boletas, recortes, cosas que no tienen sentido ni significado. Pero de pronto hay algo que me llama más la atención que otra cosa y allí parte todo.

-Tu libro tiene hartas escenas como si fuera de película. Escribiste junto a Wood "Machuca". ¿Se te cuela el cine en los libros?

-Trato de mantenerlo a raya, porque si no, me pongo a escribir un guión. Y eso es un problema. Más allá de que la historia esté llena de imágenes, trato que el lenguaje sea el que mueva la historia y dibuje ese mundo.

-¿Qué prefieres hacer, un guión o un libro?

-Es distinto. El guión te lo encargan para algo. Yo tengo 20 mil ideas de guión, pero si no hay nadie que lo filme, no sirve. Lo escribo sólo si alguien lo va a filmar de verdad. El guión es una pega mucho más dura que una novela. Porque tienes que mezclar los soportes: literatura, dramaturgia, y además escribir en imágenes pensando siempre que hay una cámara, un narrador.

-En "Casa chilena" hay una cámara sobre los personajes. Pareciera.

-Surgió así. La primera persona (yo) habría sido de un narcisismo insoportable. La segunda persona (tú) interpela al lector y al protagonista. Como un espejo. Para que el protagonista sea seguido por el lector. Y lo pueda juzgar.

-Hay varias otras cámaras.

-El personaje está en suspenso. Algo en su vida se está cerrando. Tiene a su mujer lejos y se comunica con ella a través de Skype. Tiene a su amigo en la clinica. Y él ve por YouTube la misma operación que le hacen al amigo.

-¿Y ese link existe?

-Sí, en YouTube se ve exactamente la operación que le hacen al enfermo en el libro.

-Tú que estás allá lejos, en Estados Unidos, ¿te lo pasas en línea mirando cosas?

-Totalmente. Veo las noticias, pegado a Internet.

-Como dices en tu novela: "Estamos solos y aburridos".

-Yo creo que estamos más solos que antes. Y creemos que estamos más entretenidos, porque tenemos el WhatsApp y el Facebook y esto y lo otro. Pero no estamos más entretenidos. Estamos super solos. Desesperadamente solos.

-¿Por qué pasa eso?

-Porque se han debilitado los lazos de verdad: la familia, la amistad, el cariño.Las comunicaciones nos deberían unir, pero ¡mentira! Nos hacen estar más separados. Mira este cafetín: toda la gente está mirando sus celulares, sentados uno frente al otro.

-Lo mismo ocurre en las casas.

-¡Yo lo veo en mi familia! Cada uno en su computador.

-Mándales mensajes por chat.

-¡Lo hago! (Se ríe).

-¿En Estados Unidos es más frenético?

-No, en Chile se vive como si mañana no hubiera posibilidad alguna de comunicación. Como si viniera una hecatombe que nos dejará incomunicados para siempre. Están todos con furor y angustia comunicándose por el coso. Da la sensación de que la gente se siente muy lejos y con la certeza de que el país se va a hundir, o va a venir otro terremoto, o se va a caer la montaña, o va a venir la ola y nos va a tapar. Hay una sensación de catástrofe permanente.

-¿Pero es falso o real?

-La sensación es súper real. Después del último terremoto, el piso siguió moviéndose durante una semana. Entonces está el mar, la montaña, la tierra y vamos tuiteando. Es la sensación de precariedad permanente lo que nos mueve.

-¿Cómo se ve Chile desde fuera?

-Lejos y aislado. Hablamos sólo de nosotros mismos. Laconversación es para adentro.

-¿Y en Estados Unidos?

-Al menos en Washington, hay mucha inmigración: latinomericanos, asiáticos, afroamericanos. Allá cada cambio de temporada se hace un fiesta del vecindario. Todos llevan algo. Llegan los más raros: pakistaníes, chinos, sirios. No se puede hablar sólo de ti, se habla del mundo: Del último bombardeo a Siria o del mundial de Rugby. No es que sean todos intelectuales.

-Tú, ¿qué llevas a la fiesta del vecindario?

-La Paula (su mujer) lleva queque o empanadas hechas por la Violeta.

-¿Cómo es ser escritor en Estados Unidos?

-No tienes que explicarte ni disfrazarte. Yo acá en Chile, por ejemplo, si quiero pedir un crédito no puedo decir que soy escritor, sino periodista. Si eres escritor te van a averiguar la vida entera y no te van a dar el crédito. No está validado.

-¿Y allá, en Estados Unidos?

-Me peguntan de qué género escribo: cine, ficción, periodismo, drama, ensayo o autoayuda. Nadie te mira raro. A un escritor lo tratan igul que al caballero que sirve el café. El caballero que sirve el café es tratado igual que el médico. No hay diferencias de mirada sobre el tipo de trabajo que hace uno. Si haces tu trabajo bien, te respetan completamente.

-¿No te dan ganas de escribir sobre gringolandia?

-No, pero llevo un diario gringo.

-¿Andan zombis por la calle como sale en las series?

-No, pero pasan cosas raras.

-¿Como qué?

-Un día llegué a mi barrio en Washington con mis cabros chicos. Teníamos que arreglar el baño. Y contraté un maestro que empezó a perforar el muro con un taladro. En eso llega un vecino súper acelerado gritando: "¡Roberto, Roberto! ¡Mira!". Del techo estaba saliendo humo. "¡Chucha, qué pasó!", dije yo. Y era que con el taladro el maestro incendió un cable y posiblemente el techo estaba comenzndo a incendiarse. En seguida, el maestro llamó a los bomberos y al minuto, exactamente como pasa en las películas, empezaron a sonar las sirenas y a llegar los carros bomba. En un minuto, ocho carros bomba.

-¿Y se estaba quemando?

-No. Era solo una chispita, pero entraron rompiendo todo.

-¿Se ve gente loca en Estados Unidos?

-Se ve gente loca, pero allá pasan por normales.

-O sea que acá estamos menos locos.

-Acá estamos locos de otra cosa.

-¿De qué?

-De culpa.

Antes de perderse por Irarrázaval, Roberto Brodsky dibuja una casa en un cuaderno de apuntes. Su casa tiene las ventanas chicas y sobre ella flamea una bandera chilena, sin la estrella.

"La casa es la patria. La madre patria. O la madre-madre, la mamá. En mis casas siempre hay una madre. Y una infancia".

fotos: alfonso gonzalez

encontacto

E-mail Compartir

@Gustavo_green21

Noche de ocio, al fin descanso!!! @ Osorno, Region De Los Lagos

@frecondodiadel1

#llanquihue #Osorno sur de #Chile auténticos paisajes desde una perspectiva de relajó y gratitud.

@vivo_osorno

Sinceramente este dia aparte de ser vacaciones para los estregados trabajadores es un dia perdido Nada que celebrar en Osorno

@Cristian_Yefi

Entrar y salir de Rahue desde y hacia Osorno, en las mañanas y en las tardes, es y un caos.

@fernandabce96

Feliz en casa <3 fds en Osorno =) #comidarica

@Frolivera

Después de una semana de pega, un relajo con el daddy yankee #osorno

@deejaycarlosmix

Día de relajo viendo #liganacional desde #osorno

@Braulio____

Ultima noche, pero aún quedan dos turnos mas para salir de vacaciones!!

@alejandro_lagos

Espectacular el día en #Osorno con sol otra cosa, me gusta me gusta !!