Tumba griega era un monumento para general de Alejandro Magno
Después de tres años de excavaciones, arqueólogos griegos creen haber develado el misterio en torno a la tumba de Anfípolis, un sepulcro de la era alejandrina del que se llegó a especular que podría contener incluso los restos del propio Alejandro Magno.
Los expertos, a cargo de la arqueóloga Katerina Peristeri, profesora de la Universidad de Salónica Jrysa Paliadeli, llegaron a la conclusión de que se trata de un monumento construido en memoria de Hefestíon, uno de los generales de Alejandro Magno.
Según Peristeri, la tumba fue construida en el último cuarto del siglo IV a.C. en honor al citado general, amigo íntimo de Alejandro Magno.
Los científicos a cargo de la investigación llegaron a la conclusión de que se trataba de un monumento para Hefestíon, después de haber descubierto en la tumba dos inscripciones, las que incluyen tres especies de rúbricas que dicen: "parélavon" (recibí); el monograma del general de Alejandro Magno y la firma "And" que se atribuye a otro general de Alejandro, Antígono. Peristeri cree que estas inscripciones constituyen un "contrato de construcción", lo que destaca, a su juicio, la importancia del monumento.
Desde un principio se había barajado la posibilidad de que la tumba, de no ser de Alejandro o algún familiar suyo, habría pertenecido a un alto general.
Los arqueólogos creen que de esas inscripciones se puede deducir que el monumento fue construido por Antígono -por orden de Alejandro Magno- para Hefestíon, quien murió un año antes que el emperador.
Paliadeli destacó que otro argumento, y es que "con seguridad podemos atribuir la construcción del monumento de Anfípolis al último cuarto del siglo IV a.C o a los primeros años del siglo III". "Se ha hecho un trabajo importante. Hay mucho trabajo aún por hacer y en los próximos años debatiremos los nuevos hallazgos y sus interpretaciones", recalcó.
3 años llevaban investigando este monumento los científicos de la Universidad de Salónica de Grecia.
2014 en noviembre del año pasado los arqueólogos hallaron los primeros restos mortales en la tumba de Anfípolis.