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La mitad de usuarios de programa Vida Sana bajó de peso en 2014

beneficio. La iniciativa de salud que implementa el municipio tanto en niños como en adultos, ha logrado mediante actividades físicas y terapias con profesionales buenos resultados. Director de Escuela Socorro de Señoras señala que para mejorar los índices hay que mejorar la alimentación que se entrega en los establecimientos.

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Cristina Silva lleva casi un año y medio a cargo del programa Vida Sana que mantiene el Departamento de Salud del municipio osornino; y en estos casi 18 meses de trabajo ya han logrado generarse resultados en la comuna en relación a los índices de sobrepeso y obesidad en los poco más de 300 adultos y niños, pero especialmente en los menores con los que se trabajó durante 2014.

Según la nutricionista que desarrolla labores en el Cesfam de Quinto Centenario, a fines del año pasado ya lograron bajarse los Índices de Masa Corporal (-IMC-, que dice de la relación entre el peso y la estatura del individuo) en un 50% de los chicos y adultos que se han tratado en el programa. Los resultados se basan en la medición del perímetro de cintura, indicadores de azúcar y colesterol, presión arterial y en el IMC individual.

Un dato que entrega fuerza al resultado es que durante el año pasado se entregaron 300 cupos para que estudiantes que presentaban índices de obesidad o sobrepeso, se inscribieran en el programa que otorga ayuda en el ámbito nutricional y de ejercicio; y debido a los buenos resultados conseguidos en aquel periodo, este años los cupos aumentaron en un tercio, es decir, a 400.

Lo mismo los montos que fueron destinados a financiar el programa durante este año (aportados por el Ministerio de Salud, pero administrados por los municipios locales) los cuales aumentaron con el fin de cubrir una demanda que crece sostenidamente en la comuna y que están destinados a cubrir ítems como toma de exámenes, recursos humanos o materiales de trabajo.

Gracias a los resultados obtenidos, igualmente se pudo ampliar el rango etario con el que se trabajó hasta el año pasado, donde se abarcaba a personas desde 6 a 54 años; en cambio este año se llegó a un rango de edad de 2 a 64 años, ya que los adultos también se encuentran contemplados en los lineamientos del programa.

Dentro de los análisis que se realizan, se debe determinar una baja de los índices en cada uno de los exámenes que se llevan a efecto y a fines de agosto se debe realizar el primer "corte", para en diciembre efectuar el segundo y último anual.

"Debemos cumplir con una serie de metas que nos piden y para eso se desarrolla un completo programa de controles donde vamos monitoreando a nuestros usuarios y observando que vayan cumpliendo tanto con sus visitas al sicólogo, al médico o nutricionista, pero también a los talleres de actividad física, para concluir a fin de año con las mediciones de peso", aclara Silva.

Sobrepeso

Dentro de las clasificaciones que se mantienen en base al nivel de obesidad, la nutricionista indica que existen las categorías Normal, Sobrepeso y Obesidad y que estas se miden a través del IMC; por ejemplo, un adulto debe mantenerse en un rango entre 19 y 24 para ser catalogado Normal, pero pasado 25 se llega a Sobrepeso y con 30 a Obesidad y pasado 40 a Obesidad Mórbida.

En cuanto a peso o kilos, Silva señala que estar sobrepasado en dos kilos es equivalente a Sobrepeso, y de 4 a 5, Obesidad.

En cuanto a los adolescentes y niños, la nutricionista explica que sería un poco más complicado de medir, ya que debido a la variable del sostenido crecimiento que experimentan, es más difícil catalogarlo de manera general, por lo que hay que ver cada caso de manera individual.

"Es algo que en ellos puede ir variando mes a mes, por eso no se puede dar una cifra fija en niños o adolescentes", explica la profesional del Quinto Centenario.

En el Cesfam indicaron que son las mujeres las que sufren más con el tema de la obesidad que los hombres, en el caso de niños y adolescentes.

Y en adultos la tendencia es la misma, aunque las cifras que se manejan en el Cesfam también indican que son menos los hombres que asisten a este programa y, por lo tanto, proclives a realizarse exámenes o tratamientos de este tipo.

Si bien el programa se destaca por intervenir en el aspecto nutricional de los niños, también se enfoca fuertemente en el ejercicio físico. Por lo mismo, se exige a quien se inscribe en el programa, una asistencia a 96 sesiones anuales, las que se desarrollan sobre todo en el mismo Cesfam, pero también en los establecimientos donde se lleva a cabo el programa y donde un profesor se encarga de realizar las actividades.

Eso sí, indica Silva, muchas veces factores como el clima, la poca ayuda que reciben los menores por parte de sus propias familias en el tema activo o alimentario, hace que fallen en el desarrollo del programa.

"Hemos detectado que las familias juegan un rol principal en todo esto. Si el entorno que rodea a los niños no lo apoya o no le colabora a seguir en este proceso, es muy difícil que puedan cumplir con las metas que se autoimponen", concluyó la profesional.

Porcentaje

Hace dos años, Carlos Martínez, director de la Escuela Sociedad Socorro de Señoras de la Quinto Centenario se encontraba muy consciente del nivel de obesidad que presentaban la mayoría de sus estudiantes. Mediante la toma de exámenes de talla y peso a gran parte de los estudiantes, se dio cuenta que tan solo en un caso presentaba problemas de bajo peso; todos los demás tenían índices de sobrepeso.

"No recuerdo exactamente la cifra, pero si la media nacional indicaba que un 50 por ciento de los estudiantes en Chile presenta sobrepeso, nosotros teníamos un 70% con sobrepeso y obesidad", señala.

Por lo mismo, el establecimiento comenzó a tomar todos los programas que le aportasen a bajar estos números y uno de ellos fue el Vida Sana, en 2014.

Para Martínez, trabajar con el programa que administra el municipio osornino ya es un éxito, pues se han podido incluir los dos primeros niveles en un programa donde la actividad física y la nutrición están siendo vistas desde muy temprana edad.

El director señala con orgullo que gracias al nivel de metas que imponen los diferentes programas que tomaron, con el fin de implementar un estilo de vida saludable en los alumnos, han superado la media nacional.

Incluso, cuenta que hasta en el salón de Parvularios lograron, a través de un proyecto, adjudicarse máquinas especialmente adaptadas para pequeños de esa edad, con el fin de que los menores puedan ir tomando el ejercicio físico como una actividad entretenida y habitual en sus vidas.

Aún así, Martínez es sincero e indica que los resultados hasta ahora no han sido los que él hubiese querido. No por el manejo del programa en sí, sino más bien por los hábitos de los mismos estudiantes, especialmente en el tema de la nutrición, lo cual les impide que progresen.

Por lo mismo, se decidió intervenir y alejar todos aquellos puestos de comida rápida y golosinas que rodeaban al establecimiento.

"El problema está realmente en la manera cómo nos alimentamos. Es cosa de ver todo lo que te venden en la calle y te das cuenta hacia el camino donde nos dirigimos. Si te fijas, en el centro ves a perritos callejeros prácticamente 'inflados'. Eso ocurre porque comen la misma comida chatarra que nosotros", explica el director del establecimiento.

A su juicio, los problemas también tienen relación con la alimentación que se entrega en los establecimientos en la actualidad. Ello, porque detecta que a sus estudiantes les molesta tener que comer colaciones demasiado repetitivas.

"Es cosa de ver que el galletón que se entrega es el mismo desde hace tres años. Es lógico que los chicos se aburran y busquen comer por otro lado. Eso influye mucho en los malos hábitos", advierte.

Por otro lado, la asistente social del recinto educacional, Carolina Franco destaca que el trabajo se realiza en la escuela Sociedad Socorro de Señoras durante el horario de clases, "lo que nos permite que puedan cumplir con todas sus actividades. De lo contrario sería más complicado que los estudiantes tengan que volver en otros horarios".

El ejercicio es uno de los factores que contribuye a que una persona no sufra de sobrepeso.

La nutrición es el factor más importante al momento de fomentar hábitos de vida sana. Y equivale a un 70 por ciento de un programa.

50% de los

usuarios del programa Vida Sana logró reducir sus mediciones de IMC durante 2014. De esta forma, el programa creció un tercio más durante este año.

2 kilos

por sobre el peso ideal se cataloga como sobrepeso en una persona. Cuando va de cuatro a cinco se considera obesidad y más allá, obesidad mórbida.

70 por ciento

aproximado de los estudiantes del Colegio Sociedad de Socorro de Señoras de Rahue Alto presentaba índices de sobrepeso u obesidad hace dos años.