Artesano en madera pierde sus herramientas en incendio que consumió su taller en Rahue
emergencia. Héctor Cayo Manquel de 51 años, trabajaba en la parte posterior de su casa donde realizaba sus trabajos. El inmueble que habita junto a su familia fue afectado por las llamas al igual que una casa vecina.
ssilvav@australosorno.cl
"Yo estaba durmiendo y desperté con los gritos de incendio de mi hermana que se percató del fuego. Salimos todos de la casa y gracias a los vecinos pudimos sacar las cosas del primer piso a la calle".
Así recuerda los angustiantes momentos que vivió la madrugada de ayer Jeremías Cayo Huanel (15 años) junto a sus padres y una hermana, tras despertar abruptamente con el fuego que arrasaba el taller que su progenitor Héctor Cayo mantenía en la parte posterior de su casa, ubicada en calle Asturia al llegar a 12 de Octubre en población Quinto Centenario.
ALARMA
Fue a las 5.40 de la madrugada cuando la estudiante de 21 años de la carrera Ed. Diferencial de la Universidad de Los Lagos, Yesenia Cayo Huanel, se levantó de su cama para preparar su jornada de actividades.
Según cuenta su hermano Jeremías, "ella vio una claridad que la sorprendió. Al correr la cortina de su pieza, vio que el fuego ya había destruido el taller de mi padre. Cuando salí a la calle vi a los vecinos que se comenzaron a juntar en el frontis de nuestra casa para ayudar a sacar las cosas del primer piso", expresó.
Tras la emergencia, el joven alumno de primer año del Liceo Carmela Carvajal colaboró la mañana de ayer en el retiro de escombros junto a un cuñado.
MOLDURERO
Héctor Cayó se dedica desde los 13 años a trabajar la madera. Con los años y gracias a su trabajo logró levantar su taller en Rahue Alto, el cual hace cerca de cinco años fue afectado por un incendio. Desde esa época determinó, según comentó su esposa María Cristina Huanel, habilitar un taller en el patio de la casa.
"Con mucho esfuerzo y sacrificio salió adelante con su oficio. Muchos le dicen artesano de la madera, pero él es moldurero. Se dedica a realizar los marcos de los cuadros y de los espejos. Lamentablemente este incendio destruyó todas sus herramientas que son vitales para desempeñar su trabajo", comentó su mujer.
De acuerdo a las estimaciones, las pérdidas entre herramienta y material ascienden a los 4 millones de pesos sólo en el taller. A ello la familia debe sumar los daños ocasionados en el segundo piso de su casa.
Ayer el jefe de hogar debió ser trasladado al Hospital Base San José, al presentar un cuadro de intoxicación al intentar sacar un cilindro de gas que estaba en su taller. Producto de ello, además sufrió quemaduras menores en la espalda.
Tras ser examinado y curadas las lesiones por el fuego, el hombre fue dado de alta y ayer realizaba junto a su familia las labores de limpieza para comenzar con la reconstrucción.
DAÑOS EN CASA VECINA
Con el 40 % del techo dañado resultó la casa de la vecina Nelly Arriagada, quien ayer observaba los trabajos de reparación que efectuaba en el hogar su hijo y su pareja.
"Tuve miedo, pero por suerte el vecino tiene una especie de cortafuego que impidió que las llamas causaran más destrozos en mi casita que habito por más de 20 años. El susto que pasé no se lo doy a nadie", expresó la mujer quien ayer fue visitada por integrantes de la Pastoral Social de la Parroquia Espíritu Santo, quienes recaudaron durante la mañana abarrotes para ayudar a las familias afectadas.
"Siempre estamos presentes en situaciones como ésta, apoyando a las familias afectadas en emergencias, entregando alimentación", comentó Magda Webar, integrante de la pastoral social.
Ayer las dos familias afectadas agradecieron a los vecinos, en especial a Marco Matamala quien es voluntario de la Sexta Compañía de Rahue, y quien reportó la emergencia a la central de Bomberos.
El vecino se levanta todos los días cerca de las 5.30 de la mañana para trabajar en un colectivo. Ayer se percató de los gritos de auxilio y al salir a la calle observó que la casa de la familia de Héctor estaba ardiendo en la parte posterior.