Comida de campo, hospitalidad local, actividades y arquitectura rural son algunas de las características que identifican la ruta del Camino Real, que une a Osorno con la comuna de Río Negro. Inmersos en sus campos, las personas que viven en esta ruta, donde se mezclan las tradiciones de la etnia huilliche con las culturas hispana y alemana, se sumergen en una vida campestre llena de actividades diarias, como atender el ganado, el gallinero o la huerta.

En esta ruta son bienvenidos los turistas, a quienes los emprendedores ofrecen tranquilidad, naturaleza y todas las bondades que ofrece el campo y que ya no existen en la vida urbana. Mucho quisieran, por cierto, llevarse un "trocito" de este mundo, que está más cerca de lo que parece.