La doble vía hará desaparecer históricos locales del cruce Lynch
construcción. Los dueños de edificios y casonas de tiendas como La Porteña, la ferretería El Timón y botillería El Tigre deberán demoler sus estructuras. Acusan que desconocen los plazos de expropiación y montos que recibirán.
veronica.salgado@australosorno.cl
Un fuerte cambio en el casco histórico del tradicional barrio comercial de Lynch viene asociado a los trabajos de mejoramiento de avenida Juan Mackenna, ya que debido a las obras emblemáticas casonas que albergan a tiendas como La Porteña, la ferretería El Timón y la botillería El Tigre serán demolidas.
Sus propietarios relatan las sensaciones encontradas que enfrentan: por un lado, alegría por la concreción de un proyecto vial que arrastra más de 30 años de espera y que desde marzo de 2013 se encuentra en ejecución
Pero también significa para ellos abandonar casas que no sólo han sido su fuente laboral por más de 40 años, sino también han desarrollado su vida familiar en ellas.
La preocupación que enfrentan actualmente va asociada a la poca información que manejan sobre fechas y los montos en dinero que recibirán por las expropiaciones.
Según explicaron, sólo tienen claridad de los metros cuadrados de sus propiedades que les serán expropiados, gracias a una conversación realizada en marzo de 2013. Sin embargo, desde entonces no tienen nuevos antecedentes y sólo han visto máquinas que trabajan en el frontis de sus locales comerciales.
Según explicó personal del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) y de la empresa Cosal encargada de la obra, el proceso de expropiaciones en avenida Juan Mackenna y calle Lynch parte la primera semana de julio de este año y desde ese momento comenzarán las conversaciones y tasaciones de las propiedades a intervenir.
Sin información
Una de las tiendas afectadas es La Porteña, que durante más de 50 años ha estado emplazada en la calle Lynch, altura del cruce. Su propietaria, Rita Hayal, explicó que en marzo del 2013 le informaron que parte de la casa donde funciona su local y residencia personal sería expropiada para ensanchar la avenida Mackenna.
No obstante, precisó que hasta la fecha no han realizado ningún tipo de conversaciones sobre montos a pagar, ni fechas de inicio de las obras, ni con la empresa encargada o personal del Serviu.
"No estamos en contra del progreso, al contrario, pero necesitamos saber plazos porque tenemos que cerrar la tienda y trasladarnos de casa. Es compleja la situación, son 50 años de trabajo y no es simple vivir con la espera constante de tener antecedentes concretos", dijo Hayal.
Agregó que sólo saben que de su propiedad serán 200 metros cuadrados los expropiados para ser utilizados en el ensanche de la avenida, lo que en la práctica significa dividir la propiedad a la mitad.
La sensación es compartida por otros propietarios en los alrededores del cruce Lynch, que por estos días deben convivir con palas mecánicas, polvo y ruidos molestos.
Es así como los propietarios de la botillería El Tigre y la ferretería El Timón, por ejemplo, están evaluando lo que sucederá con sus negocios, los cuales esperan sigan en el mismo lugar, pero no en las estructuras que serán derribadas para dar paso a locales más modernos a orillas de una nueva calle.
De hecho, en el sector ya trabajan máquinas, por lo que fue habilitado sólo un acceso peatonal que se transforma en un laberinto difícil de transitar y que incluso ha provocado que algunos locales comerciales estén cerrados gran parte del día por la falta de público.
Patricia Ruiz es dueña de la tienda Romance Antiguo y reconoce que los trabajos que se realizan en avenida Mackenna se han transformado en una preocupación de vida para los afectados.
Relató que las ventas en su local han bajado al mínimo y que como ella no es propietaria, poco y nada puede hacer.
"Mi actividad económica tiene directa relación con el flujo de peatones y público, el cual hoy es casi nulo. Entendemos el progreso, pero existen costos asociados que la empresa ni las autoridades están midiendo", explicó Ruiz.
Detalló que desde que comenzaron las obras son muchos los cortes de agua y luz que se provocan, sin previo aviso y por tiempos prolongados. "Muchas personas afectadas ya ni reclaman, porque evidentemente no tiene ningún resultado positivo", dijo.
Nueva vía
Los únicos trabajos de pavimentación ya efectuados en el nuevo brazo de av. Mackenna se realizan entre las calles Colón y Prat. Uno de los primeros locales que quedó ubicado al medio de estas obras es encendidos y gomas Agal, situado en av. Mackenna esquina Colón.
Hugo Eschmann, dueño de Agal, precisó que aparte de que le expropiaron gran parte de su patio, su local quedó ubicado al centro de los trabajos, lo cual ha resultado complejo.
Indicó que los plazos entregados no se cumplen, ya que en un principio el tramo de Mackenna entre Colón y Prat debía ser entregado en diciembre de 2014, cosa que no ocurre hasta la fecha.
"Lo único que esperamos es que nos habiliten estacionamientos, porque con el problema vial que existe los clientes prefieran evitar esta zona. Es un costo que estamos dispuesto a asumir, pero con fechas claras y que se cumplan", enfatizó el comerciante.
Dudas en la fecha
En la Sala de Sesiones del municipio se realizó al mediodía de ayer una nueva reunión con vecinos que habitan en el perímetro donde se realizan los trabajos, representantes de la empresa, el Serviu y el municipio local.
En la ocasión, donde participaron más de 50 personas, se planteó la inquietud por los plazos de habilitación de las calles y los diversos problemas que deben enfrentar a diario los comerciantes del sector.
Cecilia Ubilla, delegada provincial del Serviu, precisó que el proceso de expropiaciones comenzará la primera semana de julio y que a las personas afectadas se les cancelará el valor comercial del edificio completo, aunque sólo se expropiará para la obra un tramo del terreno.
Según afirmó, han existido conversaciones sobre metros cuadrados pero no es posible entregar valores todavía, ya que justamente el proceso se inicia con las tasaciones de los edificios y la propuesta económica a sus dueños.
"No podemos realizar ofertas porque nosotros tampoco los manejamos, pero la gente debe estar tranquila porque los procesos tienen tiempos y plazos asociados. Si las personas tienen dudas, que se acerquen a conversar a nuestras oficinas", sostuvo Ubilla.
El tramo entre las calles Colón y Portales será habilitado la primera semana de junio de 2015. El tramo Ecuador-Ercilla será habilitado la tercera semana de abril de 2016. Y los trabajos en el cruce entre Colón y Bulnes se habilitarán paulatinamente entre la primera semana de junio y octubre.