A través de la consolidación de medidas de distintos ministerios, el Gobierno planteó ayer un plan hídrico por $ 105.000 millones para combatir la sequía que afecta por años a varias regiones del país y que provocó que 194 comunas hayan sido declaradas Zonas de Emergencia Agrícola.
Entre otras medidas, destacan el apoyo a los agricultores, la instalación de plantas micro-desaladoras, la rehabilitación y construcción de embalses y la instalación de sistemas de captación de aguas lluvia.
"No cabe sino asumir la escasez de recursos hídricos como una realidad que vino para quedarse", dijo la Presidenta Bachelet, luego de reunirse ayer con el comité interministerial encargado de abordar los efectos de la sequía.
"No hay desarrollo ni calidad de vida sin un uso eficaz del agua", agregó la Mandataria, que añadió que "debemos tratar el abastecimiento y el uso del agua como una política de Estado y un objetivo país".
por fases
Según la Mandataria, con los fondos para este año se implementarán acciones para asegurar "el consumo humano, así como las actividades agrícolas y ganaderas".
Entre las medidas a mediano plazo, Bachelet afirmó que "se trata de obras de mayor complejidad con tiempos de hasta cuatro años", como instalación de plantas y construcción de pequeños embalses.
Entre las acciones de largo plazo se prevé la construcción de 19 grandes embalses hasta el 2024. A través del Indap, el Gobierno va a apoyar a pequeños agricultores, apicultores o crianceros para comprar forraje, plantas, semillas o equipamiento; recursos para el programa de alimentación familiar; explotación de aguas subterráneas por pozos, encauzamiento de ríos y revestimiento de canales.
También se instalarán 6.500 sistemas de captación de aguas lluvia en domicilios que hoy reciben agua por camión aljibe en las regiones del Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos.
Como obras de mayor envergadura se contempla la instalación de plantas micro-desaladoras en las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Maule y Biobío; la rehabilitación y construcción de pequeños embalses hasta el 2017; la reutilización de las aguas servidas; plantas desaladoras en Copiapó, Petorca, La Ligua, en la Cuenca del Choapa y en la Cuenca del Limarí y la construcción de 19 grandes embalses hasta el año 2024, entre otras iniciativas.
El ministro de Agricultura, Carlos Furche, dijo que "todos debemos trabajar para enfrentar los temas de sequía, y al mismo tiempo debemos seguir fortaleciendo las capacidades de nuestro sector agropecuario, ya que tiene condiciones muy favorables de crecimiento e inserción en los mercados internacionales principalmente este año y los que vienen".
El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Patricio Crespo, dijo que al gremio le parece "oportuno" que el Gobierno reaccione a la urgencia hídrica con el plan anunciado. "Esperamos, eso sí, que la medida contemple recursos adicionales a los ya disponibles en el Presupuesto Nacional, de modo que puedan efectivamente paliar la emergencia en el corto plazo". Eso sí, Crespo dijo que "extrañamos que el plan no contemple la regularización de títulos de derechos de aguas de pequeños productores, ni tampoco el fortalecimiento de las organizaciones de usuarios que son los que día a día gestionan el recurso.
Mauricio Mondaca
6.500
sistemas de captación de aguas lluvia se instalarán entre las regiones del Biobío y Los Lagos.
19
grandes embalses se construirán hasta el 2024 para aumentar el porcentaje de agua disponible.