Secciones

Crean mesa de trabajo para controlar la población de visones en la Región de Los Ríos

plaga. El programa es desarrollado por el Servicio Agrícola Ganadero(SAG) y tiene por objetivo capturar al animal antes que produzca daños a la flora y fauna propia de la zona. Se estudia repetir la iniciativa en La Araucanía y Los Lagos.

E-mail Compartir

Estudios realizados en la Universidad Austral de Chile, con datos obtenidos de la Municipalidad de Maullín, estiman en aproximadamente 300 mil pesos el perjuicio económico por cada ataque del visón en los campos de la zona. Según el director del Servicio Agrícola y Ganadero (Sag) de la región de Los Ríos, Jorge Cid, esta situación genera un impacto económico directo sobre la agricultura.

De la misma forma -dijo- se han observado ataques de visón sobre avifauna silvestre, lo que contribuye a disminuir la riqueza y abundancia de ejemplares de la fauna, con repercusiones diversas sobre el medioambiente y el turismo.

El Consejo Regional (Core) de Los Ríos, aprobó de forma unánime 405 millones de pesos para llevar a cabo, en un plazo de tres años, el programa "Control comunitario del visón en la región". De estos, 180 millones de pesos serán ejecutados durante este año. Los recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) están en trámite administrativo y, por lo tanto, aún no han sido liberados.

PROGRAMA

Cid explicó que el programa se fundamenta en la capacitación y transferencia de tecnología necesaria para realizar capturas de visón en el territorio regional.

Los recursos que serán transferidos desde el Gobierno Regional permitirán ejecutar el plan ya diseñado por el departamento de conservación de recursos naturales del Sag.

Entre los componentes se encuentran la adquisición de trampas de autocaptura; la contratación de equipos de profesionales y técnicos que puedan tener presencia territorial en actividades relativas a capacitación de voluntarios y retiro de visones capturados.

Además, considera el procesamiento de las muestras obtenidas de los animales capturados para la determinación del rol que pudiesen estar cumpliendo como vectores o transmisores de enfermedades de importancia sanitaria animal y humana, y la difusión de la problemática a nivel de toda la región de Los Ríos por distintos medios.

"Es bien sabido que la caza activa del visón no es eficiente para lidiar con la actual sobre población y que los reportes de caza por arma de fuego en la región son escasos. Ello demuestra la necesidad de implementar metodologías diferentes, como el sistema de autocaptura con las trampas Tomahawk".

Detalló que ese sistema de captura requiere de vigilancia permanente de la trampa así como su mantención.

De ahí que el compromiso de la comunidad que quiera involucrarse es necesario y debe ir en la línea de mantener y revisar las trampas para dar aviso oportuno de la captura de visones.

El director regional del Sag aseguró que "la implementación de un programa de esta envergadura sin involucrar a los habitantes de los sectores a intervenir es muy compleja y requeriría de mucho tiempo y recursos humanos, lo que elevaría demasiado los costos del programa".

MESA DEL VISÓN

En 2014, actores públicos y privados conformaron en la región la Mesa del Visón. Esto como respuesta a la necesidad de coordinar acciones orientadas al control de la sobre población de esta especie y con el objetivo de elaborar e implementar la "Estrategia regional de control del visón".

Jorge Cid enfatizó en los logros de esta mesa. Destacó que se activó un plan de extracción de visón desde el Santuario de la Naturaleza, el que involucró a la Corporación Nacional Forestal (Conaf) y al Sag, con el apoyo técnico de la Universidad Austral de Chile. Mediante esa acción fueron capturados 70 ejemplares en esa zona, lo que a juicio del director regional "validó el sistema de captura propuesto por el Sag".

Además valoró el compromiso de diversas autoridades, como el senador Alfonso de Urresti, y el subsecretario de Agricultura, además de los representantes del Sag de la Araucanía y de Los Lagos para lidiar con el problema desde una perspectiva macro-zonal. Asimismo, destacó la voluntad del intendente Egon Montecinos y de los consejeros regionales por incorporar esta materia en el presupuesto regional.

"Se logró el compromiso de la transferencia de fondos desde el ministerio para recabar mayor información sobre esta especie invasora en la zona sur y como producto más relevante, también gestionado por el senador De Urresti en la discusión del presupuesto institucional, se logró ubicar esta problemática a nivel regional", dijo.

COMITÉ

Según el director regional del Sag, el punto más crítico en el cumplimiento de los objetivos de la mesa eran conseguir los fondos necesarios para la implementación de la estrategia regional de control del visón.

En esa tarea, se constituyó un comité de financiamiento. A partir de éste se generaron dos propuestas al FNDR, una elaborada por el ministerio de Medio Ambiente, orientada a la educación ambiental y una del Sag enfocada al control, siendo aprobada esta última.

Ahora -detalló Cid- el objetivo es implementar el programa, "teniendo siempre como contraparte a la mesa del visón para priorizar, a nivel regional, los puntos a intervenir y, de la misma manera, involucrar a la mesa en el análisis de los resultados obtenidos en la implementación del mismo, para realizar modificaciones que maximicen la eficacia del programa en caso de ser requerido".

PRESENCIA EN LOS RÍOS

El visón fue introducido a Chile para usos en peletería industrial durante la década de 1930 a partir de iniciativas privadas de inversión en la región de Magallanes y en la Patagonia argentina.

El director del Sag explicó que, posteriormente, producto de escapes y liberaciones intencionales se dispersaron en el medio natural. Durante la década de 1960 fue trasladado a la región de Aysén y en la decadencia de la industria peletera en esa región, los especímenes en cautiverio se eliminaron o liberaron iniciándose un segundo foco de avance de la especie en nuestro territorio.

El visón es un mustélido originario de Norteamérica. Tiene un cuerpo alargado, su tamaño varía entre los 40 y 65 centímetros de largo total. Las hembras son capaces de generar camadas de aproximadamente seis crías luego de 39 a 75 días de gestación. El director regional del Sag, Jorge Cid, explicó que en su ambiente original es un depredador de segundo rango, restringiendo su dieta principalmente al consumo de peces y crustáceos. Sin embargo, al adaptarse a nuestro medio se comporta como un carnívoro generalista y de primer orden, depredando sobre aves, peces, crustáceos, mamíferos pequeños y anfibios.